Astana despide a Superman Lopez ¿qué ha pasado desde el inicio?
El equipo kazajo publicaba en la tarde de ayer un escueto comunicado en el que rescindía el contrato con Miguel Ángel López tras conocer nuevos elementos acerca de la relación del ciclista con el médico deportivo Marcos Maynar y su implicación en la operación Ilex que investiga el tráfico de sustancias prohibidas para uso deportivo.
Superman López sale de nuevo con polémica de un equipo
Hace unas semanas varios medios publicaban la noticia de que Miguel Ángel Superman López estaba siendo investigado en el seno de la operación Ilex que la Guardia Civil estaba llevando a cabo con el fin de desmantelar una red de tráfico de sustancias dopantes. Salía el ciclista entonces a desmentir su relación con la causa.
Un río que ya venía sonando cuando en el mes de julio trascendió que su equipaje había sido registrado en el aeropuerto de Barajas y ya por entonces comenzaba a hablarse de su implicación en esta operación. Entonces, Astana le suspendió durante unos días mientras se aclaraba su relación con el caso.
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Ahora, ya no se ha podido estirar más la goma y Astana ha optado por rescindir el contrato con el colombiano al conocer nuevos elementos en la investigación y que relacionarían al colombiano con el presunto cabecilla de la trama, el Dr. Marcos Maynar, un nombre habitual en los casos de dopaje en el deporte español.
No ha tardado Superman López en dar la cara, reafirmando su inocencia y anunciando medidas legales contra el equipo Astana tras lo que entiende que es un “despido abusivo y sin causa justa”.
Sospechosos habituales
Marcos Maynar, Dr. en Medicina Deportiva y actualmente profesor en la Universidad de Extremadura ya fue detenido en el año 2014 durante la investigación de una red de tráfico de sustancias dopantes en gimnasios. En los registros se encontraron anabolizantes y esteroides, que el médico alegó que utilizaba en sus investigaciones.
Antes de eso, su nombre ya saltó a la palestra del dopaje en el caso del exfutbolista del Athletic de Bilbao Carlos Gurpegui, en el que se alegaba que la nandrolona podía ser generada de forma natural por el cuerpo, informe que finalmente fue desestimado.
En el año 2008 también se le relaciono en la investigación de la muerte del ciclista portugués Bruno Neves a causa de un paro cardíaco en plena carrera. Su médico era Marcos Maynar que tuvo que enfrentarse a las acusaciones de dopaje tras desubrirse en las posteriores investigaciones al equipo multitud de sustancias dopantes y fichas al respecto de la administración de las mismas.
Más recientemente, tuvo que responder en el año 2015 por su implicación en un caso de dopaje en el seno del equipo de traineras de Urdaibai en el el que también se le situaba como cabecilla de una presunta red de dopaje.
Ahora, es la operación Ilex desarrollada por la Guardia Civil la que trata una vez más de poner cerco a las actividades del Dr. Marcos Maynar. Una investigación que también implica a otros ilustres nombres del dopaje nacional como el exciclista y exdirector del equipo Kelme Vicente Belda, cuyo nombre quedó inevitablemente asociado al dopaje tras la tristemente famosa Operación Puerto que sacudió el ciclismo mundial.
También se encuentran entre los investigados el hijo de este, también llamado Vicente, que en su caso ejerce como masajista en el seno del equipo Astana. El otro nombre que ha trascendido es el del exciclista Ángel Vazquez, sancionado de por vida tras repetidos positivos por EPO y que en el año 2012 se vio envuelto en la polémica cuando la Guardia Civil, a instancias de la organización, le paró cuando circulaba destacado en cabeza de la marcha Quebrantahuesos.
Volviendo a la salida de Miguel Ángel López del equipo Astana, en el que ya había militado entre los años 2015 y 2020, llama la atención cómo la historia se repite. Hace algo más de un año, tras La Vuelta a España, el colombiano rescindía su contrato con Movistar Team tras su abrupto abandono en la penúltima etapa de la ronda española en el que quedaron expuestas las tensiones existentes en el equipo.