Battaglin Portofino R, acero de vanguardia
Si las bicis de acero hubieran seguido evolucionando seguramente se parecerían a esta Battaglin Portofino R, tecnologías de ultima generación aplicadas al material más clásico en la fabricación de bici para crear una bicicleta de grandes prestaciones y un gusto exquisito que te hará olvidarte de los modernos cuadros de carbono.
Portofino R, la clásica más moderna de Battaglin
El acero ha sigo el material mas utilizado a lo largo de la historia para la fabricación de bicicletas, pero la llegada, primero del aluminio y más tarde de los cuadros de fibra de carbono que permitían llevar a la práctica diseños antes inimaginables acabó relegando a este tradicional material a un segundo plano, únicamente para nostálgicos del ciclismo de otros tiempos.
Sin embargo, el acero vive una segunda juventud gracias a los fabricantes artesanales que mantienen la construcción de este tipo de bicis con el aliciente de poder tener una bici a medida y los fabricantes de tubos, donde Columbus se lleva la palma, que les proporcionan el material necesario para la elaboración de estas bicis de estilo clásico.
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Pero hay quien ha decidido no quedarse en lo tradicional. Marcas con la italiana Battaglin ha optado por seguir el camino de la innovación, tratando de llevar el uso del acero un paso más allá, como si el carbono no hubiera invadido todo. El resultado de este proceso, son unas bicis impresionantes como esta Battaglin Portofino R que culmina su oferta.
Volviendo a las raíces
Giovanni Battaglin, fundador de la marca en el año 1982, fue un notable ciclista profesional en los años 70 y comienzos de los 80, con un notable palmarés en el que brilla el doblete Vuelta a España y Giro de Italia logrado en el año 1981, un año en el que apenas hubo tres días de descanso entre la finalización de la ronda española y el comienzo del Giro.
Durante la década de los 80 la marca comenzó su crecimiento, proporcionando sus máquinas al equipo Carrera y siendo la máquina sobre la que Stephen Roche consiguió el hito de vencer el Giro el Tour y el Mundial en el año 1987. No quedó la marca ajena a la crisis que supuso para las firmas tradicionales la llegada del carbono. Sin embargo, en el año 2014, Giovanni Battaglin decidía dar un giro a la marca que les permitiera diferenciarse y recuperar el legado perdido.
Desempolvaron las viejas máquinas y volvieron a sus raíces para recuperar la fabricación artesanal en acero, buscando ofrecer unas bicis diferentes pero con la clara intención de extraer de este material todo lo que pudiera dar. Llegamos así hasta su última creación, la Battaglin Portofino R
Material clásico, tecnología de vanguardia
Lo primero que llama la atención de la Battaglin Portofino R, aparte de su característica decoración utilizando la técnica del cromovelato, que logra una estética inigualable, es la gran sección de sus tubos, que nos hace plantearnos si realmente estamos ante una bicicleta fabricada en acero.
La Battaglin Portofino R se fabrica íntegramente en su factoría de Marostica, en la región industrial del Veneto, zona donde se concentra un buen número de firmas del sector de la bicicleta.
Como materia prima se emplean tubos proporcionados por Columbus, de su serie GB81, pero con unas especificaciones exclusivas para Battaglin. Se le añaden uno racores de acero sobredimensionados, que ellos mismos elaboran en su fábrica y una horquilla de carbono, también elaborada en Italia para Battaglin que cuenta con el tubo de dirección en forma de D para posibilitar el guiado interno de los cables.
El cuadro aúna varias técnicas de fabricación, empleándose los racores en las uniones entre pipa de dirección y los tubos diagonal y horizontal, y también para los tubos de sillín y horizontal. Sin embargo, se usa la soldadura tipo brazing en los tubos que confluyen en la caja de pedalier, en la que encontramos otro guiño a la actualidad con el uso de un eje sobredimensionado T47 y en los nuevos tirantes de este modelo que optan por un actual diseño de anclaje bajo en la parte media del tubo de sillín.
Esta solucción permite que la Battaglin Portofino R pueda tener unas secciones más finas en el triángulo trasero para ganar en comodidad sin que se vea afectada la rigidez. Una solidez general que garantiza en el triángulo delantero las generosas secciones de sus tubos.
Detalles de lujo
Nos podemos quedar embobados simplemente dejando viajar nuestra mirada por los acabados de esta Battaglin Portofino R, comenzando por la auténtica obra maestra que son sus racores, en especial el del sillín que, en otro alarde de modernidad, integra el cierre del sillín tal como podemos encontrar en las bicis de carbono del momento.
El cuadro de mandos también es obra de Battaglin en lo que respecta a la potencia de aluminio que se integra en las líneas del cuadro, diseñada para albergar guiado interno de los cables como es norma en las bicis actuales. Todo ello, también el manillar, e incluso las manetas de cambio para ir a juego con la decoración del cuadro.
Una decoración que es una auténtica obra de arte, utilizando la clásica técnica del cromovelato. Un acabado clásico en las bicis de acero que consiste en pintar sobre los tubos cromado con una fina capa de pintura de forma que el brillo de los cromados queda patente. Battaglin lo lleva más allá y la Portofino R luce ademas una trama con diminutas filigranas que reproducen el logo de la marca por roda la superficie.
También exquisitas son las punteras traseras del cuadro, también elaboradas por Battaglin en vez de recurrir a los modelos estándar que proporcionan los fabricantes de tuberías y que proporcionan en la misma pieza el anclaje flat mount para el disco trasero.
Por supuesto, tratándose de una bici artesanal en acero, se fabrica a nuestra medida. Una exclusividad y un nivel de calidad que, por supuesto, tiene su precio. 8.000 € es el precio base que hay que pagar por tener esta pieza de artesanía 100% Made in Italia