Bebidas hipotónicas, isotónicas e hipertónicas ¿qué son y para qué sirven?

Cuando hablamos de bebidas deportivas a menudo nos referimos a ellas, en muchos casos de forma erronea, como isotónicas, seguramente influenciados por una conocida marca comercial. Te explicamos qué tipos de bebidas deportivas hay y cuáles son las más adecuadas para el tipo de esfuerzo realizado.

Elige la bebida deportiva más adecuada

Cuando realizamos deporte en general y ciclismo en particular perdemos líquidos a través de la transpiración. Una pérdida que hemos de ir reponiendo para mantener el nivel de esfuerzo. El organismo nos recuerda que debemos hacerlo activando la sensación de sed que nos incita a beber. Sin embargo, además de perder agua, con el sudor también eliminamos sales minerales ya que el organismo para mantener un correcto funcionamiento ha de mantener un equilibrio entre la concentración de estas en sangre y en el interior de las células de forma que estas puedan obtener las que necesiten de forma sencilla, unas sales que, por otra parte, son esenciales en la transmisión de los impulsos nerviosos que son, al fin y al cabo las que provocan la contracción de los músculos.

Para entender la definición de cada una de los tipos de bebidas energéticas en funciónn de su concentración de sales es necesario conocer como funciona el intercambio de líquidos y nutrientes entre las células y el medio que las rodea, un intercambio que se produce mediante un fenómeno denominado osmosis. De forma muy general se puede explicar mencionando que la membrana celular es semipermeable. Si la concentración de sales en en el medio es igual a la concentración de sales en el interior de la célula se dice que la célula está en un medio isotónico, una situación en la que el sistema está en equilibrio. Si la concentración de sales es superior a la del medio se dice que este es hipotónico. En ese caso, la membrana dejará pasar agua al interior de la célula hasta que la concentración de sales se equilibre mientras que, al contrario, si el medio tiene más concentración de sales, será la célula la que expulse agua buscando ese equilibrio, una situación que se denomina hipertónica.

Con la evolución de la nutrición del ciclismo, las bebidas deportivas es uno de los campos que ha ayudado a mejorar la capacidad de hidratación y de mantener el esfuerzo. Las bebidas deportivas tienen diferentes formulaciones que aportan agua, sales minerales y carbohidratos para proporcionar también un aporte de energía. La concentración de estos elementos en la bebida en relación con la concentración de sales en el interior de las células del cuerpo es lo que determina que se denominen de una u otra manera.

Cuando una bebida es isotónica significa que la concentración de sales de la misma coincide con la del interior de las células lo que hace más sencillo tanto la absorción de la misma por el organismo como que las células puedan eliminar el exceso de sales. Sin embargo, cuentan con la limitación de que, para mantener la concentración adecuada la concentración de glucógeno ha de estar entre un 4 y un 8% del contenido. En cualquier caso, son las más habituales precisamente por esa facilidad de absorción que las hace muy adecuadas para mantener un buen aporte de energía y una hidratación adecuada durante el ejercicio.

Si la concentración de sales de la bebida es menor que la de las células entonces la bebida se denomina hipotónica. El mejor ejemplo de este tipo de bebidas es simplemente el agua con el que llenamos nuestros bidones que contiene minerales pero en una proporción insuficiente para que fluyan hacia el interior de la célula y permitan recuperar los perdidos mediante la transpiración. También existen bebidas deportivas de carácter hipotónico que se caracterizan por un contenido aporte de carbohidrátos, menos del 4% del contenido.

Únicamente son adecuadas para mantener a hidratación cuando el nivel de intensidad no es elevado al igual que para realizar un aporte ligero de energía, por ejemplo, antes del comienzo de una prueba sin que lleguemos a pasarnos en la cantidad de glucógeno ingerida que nos pueda provocar un pico de insulina que nos deje sin fuerzas en la parte inicial.

Por último tenemos la bebidas hipertónicas que, en los últimos tiempos, han ganando en importancia por la importancia de aportar la mayor cantidad de carbohidratos posible. De hecho, el contenido de estos nutrientes en estas bebidas supera el 8% por lo que la misión de estas bebidas en más la alimentación que la hidratación, limitada por la alta concentración de sales hace más complicada su absorción. De hecho, ocurre lo contrario ya que el organismo, que siempre trata de equilibra la concentración de sales entre los distintos medios, hace que las células liberen agua para buscar ese equilibrio por lo que, lo habitual si se usan es combinar su ingesta con otro bidón que sólo contenga agua.