Beneficios del entrenamiento funcional

Hace unos días analizábamos todos los aspectos relacionados con el entrenamiento funcional. Este tipo de entrenamiento ayuda muchísimo en cualquier disciplina y, por supuesto, el ciclismo no iba a ser diferente. Además, te proponíamos 4 rutinas de ejercicio para que tu entrenamiento funcional ciclista fuese óptimo. Hoy, te apuntamos todos los beneficios del entrenamiento funcional.

4 principales beneficios del entrenamiento funcional

En primer lugar, el entrenamiento funcional facilita el consumo de componentes grasos de tu cuerpo, lo que significa que actúa como quemagrasas natural. Un ejercicio prolongado en el tiempo es más útil para este fin que cualquier otro tipo de entrenamiento, y el entrenamiento funcional consiste básicamente en ello, en hacer un ejercicio natural y adaptado a las posiciones más usadas en tu vida o deporte y hacerlo durante un tiempo suficientemente prolongado como para que tenga efectos muy positivos desde el primer día. El entrenamiento funcional te ayudará así a eliminar todo tipo de toxinas y excesos de tu cuerpo.

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Mejora las posturas fisionómicas encima de la bici, ya que los ejercicios de tu entrenamiento funcional adaptado al ciclismo, uno a uno, se elaborarán pensando en las posturas que utilizas cuando montas en bici. Es muy útil sobre todo para pequeñas sobrecargas de partes del cuerpo que no son exclusivamente las piernas, que son la parte más usada en bici pero por supuesto no la única. Partes como los tríceps o los músculos cervicales son fundamentales en bici, y si están sin tonificar sufrirán sobrecargas y provocarán dolores en el ciclista, mientras que un buen entrenamiento funcional puede evitar esto.

Relacionado con ello, un entrenamiento funcional reducirá las lesiones. Por la misma razón, todos los músculos que más tarde vayas a emplear sobre la bici ya estarán muy bien trabajados y fortalecidos, y las posiciones para hacerlo habrán sido las mismas que sobre la bici. Por tanto, el riesgo de lesiones se reducirá ostensiblemente.

Y, por último, el entrenamiento funcional te ayudará enormemente a trabajar el equilibrio, el gran olvidado del ciclista. No todo son piernas y potencia en ciclismo. El equilibrio se trabaja y se entrena desde pequeños: en las escuelas de ciclismo se hacen multitud de ejercicios para mejorar el equilibrio de los jóvenes, algo fundamental luego para saber moverse encima de la bicicleta. El entrenamiento funcional te ayudará a que tu equilibrio en cualquier situación, sobre todo en situaciones complejas y cargadas de cansancio, sea óptimo. Saber mover los pesos y distribuirlos encima de la bici y en función del terreno te ayudarán a trazar mejor cualquier tramo, a salvar cualquier obstáculo. Y para ello, un buen entrenamiento funcional con patrones de ejercicio de equilibrio te ayudará muchísimo.

Entrenamiento funcional como complemento al entrenamiento en bici

Así que recuerda que ser un buen ciclista no sólo consiste en instalar un potenciómetro y meter el máximo de vatios durante el máximo de tiempo posible, sino que un buen entrenamiento funcional que mantenga las zonas de tu cuerpo implicadas totalmente a tono, y que emplee posturas que luego serán las mismas posturas que sobre la bici, te ayudarán a ser mejor ciclista.