Beneficios del helado para los ciclistas
Comer helado puede no ser un pecado menor, un capricho para hacer muy de vez en cuando. De hecho tiene unos beneficios nutricionales muy concretos, que aliviarán tu mala conciencia la próxima vez que decidas comerte uno. Por supuesto siempre con moderación, un helado puede aportar muchas cosas necesarias para el organismo de un deportista.
Los beneficios del helado para un deportista
El helado puede contener calcio, lactosa, proteínas de alta calidad, fósforo, magnesio, potasio y diversos tipos de vitaminas. De hecho, un helado puede suponer el 20% de la ingesta de lacteos recomendada para todo un día, y hasta un 10% de la de proteína.
Tomar un helado puede rebajar el nivel de estrés que nos puede causar llevar un entrenamiento y dieta muy estrictos. Los helados te hacen más feliz!
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Además, el helado es un tipo de alimento fermentado por lo que es beneficioso para nuestro aparato respiratorio y gastrointestinal, y por lo tanto podría ayudar a tener un sistema inmune fuerte.
Se trata, por tanto, de un alimento muy completo que nos proporciona algunos de los nutrientes esenciales para nuestro organismo, que ingerimos todos los días en otros alimentos. ¿A qué se debe entonces su mala fama?
Precauciones con el helado
Todo tiene su cara b: si solo existiese la a, algunos comerían helado todos los días. Se trata de un alimento muy rico en grasas y de un gran aporte calórico, sin embargo esto no es razón suficiente para eliminarlo de la dieta de una persona sana, que realice deporte de manera habitual. Una porción pequeña de helado aporta unas 150 calorías, cantidad que se quema en 15 minutos de carrera o 40 de paseo.
Se trata, por tanto, de algo fácil de quemar para gente que realiza deporte de manera regular. Sin hacer el esfuerzo de un ciclista en el Tour de Francia -que llega a quemar 5.000 calorías- se puede consumir helado ocasionalmente sin ningún remordimiento.
Así pues, este verano podrás mirar el helado con otros ojos. No es un alimento vedado a los ciclistas: disfruta de vez en cuando si sentirte un delincuente. Y, al día siguiente, quema el exceso con una buena salida de mountain bike.