Las camas antisexo regresan a los JJ. OO.

Las camas de cartón volverán a ser protagonistas en la Villa Olímpica de París 2024. La medida nació en Tokio 2020 como ejemplo de sostenibilidad, pero se viralizó como un intento por evitar el sexo. El secreto a voces de las relaciones sexuales entre olímpicos y el miedo a la pandemia contribuyeron a difundir el rumor. Además se espera que en esta edición se repartan 300.000 preservativos.

Las camas de los Juegos Olímpicos vuelven a acaparar la atención: ¿sostenibilidad o antisexo?

A 79 días de que arranquen los Juegos Olímpicos de París 2024 -epicentro mundial del deporte desde el 26 de julio al 11 de agosto-, empiezan a conocerse los detalles del que sin duda será el evento deportivo del año. La antorcha olímpica ya ha llegado a territorio francés, en el Vieux Port de Marsella, a bordo del barco Belem, que partió de Grecia hace unos días. Sin embargo, las curiosas camas en las que dormirán los atletas han copado el interés de muchos titulares.

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Los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 estuvieron marcados por la pandemia. El coronavirus obligó a retrasar un año la celebración de los Juegos y a adoptar medidas restrictivas que condicionaron a atletas, trabajadores, espectadores y a cualquier otra persona vinculada a la competición.

En ese momento, se habló mucho de las camas de los deportistas; la decisión de hacerlas de cartón no tenía precedentes en la historia. Los rumores que circulan sobre las relaciones sexuales en la Villa Olímpica y el miedo de la organización a un contagio masivo hicieron creer que el objetivo era amueblar las habitaciones con camas a prueba de sexo. Sin embargo, la noticia de las camas de cartón se anunció antes de la llegada de la pandemia.

La razón de ser de las camas en realidad tiene otro origen: la sostenibilidad, ya que se eligieron estos materiales para después reciclarlos y convertirlos en otros productos. A pesar de que pueden romperse si alguien salta sobre ellas, es difícil pensar que el motivo sea estrictamente evitar el sexo: soportan un peso de hasta 200 kg y "son más resistentes que las de madera o acero", de acuerdo con Airweave, encargado de fabricar las 18.000 camas de Tokio 2020. Una vez que se desató el coronavirus, las camas pudieron convertirse de rebote en otra medida disuasoria del contacto físico.

Por otro lado, en París 2024 se repartirán unos 300.000 preservativos entre los 14.250 atletas de las 200 delegaciones que acudirán a los Juegos Olímpicos y Paralímpicos -una medida que se implementó en Seúl 1988 y que tocó techo en Rio 2016 con nada menos que 450.000 unidades-. Los preservativos forman parte del 'kit del amor', que también incluye geles, lubricantes y otros productos.

Las camas de cartón están formadas además con un colchón - fabricado con fibras de resina- dividido en tres piezas, con la particularidad de cada una tiene una densidad diferente. Según su altura y su peso cada atleta deberá combinarlos de una manera concreta para conseguir un descanso adecuado. Con el fin de buscar el mejor descanso también se ha tomado la medida de prohibir el alcohol.

La Villa Olímpica de París, ubicada al norte de la capital francesa a orillas del río Sena, ya está acabada. En total, se han levantado 82 edificios que albergarán 3.000 apartamentos y 7.200 habitaciones; consta de cinco zonas residenciales que tendrán -dentro de cada edificio- servicios de limpieza, lavandería y centros multirreligiosos.

Más allá de la zona de viviendas, habrá restaurantes abiertos las 24 horas del día -que servirán hasta 60.000 comidas diarias-, lugares de entrenamiento y una clínica médica. Además, después de los Juegos toda el área se traducirá en 2.500 nuevos hogares, una residencia para estudiantes, un hotel y varios parques, entre otros.

El calendario de las pruebas ciclistas arrancará el 27 de julio con la contrarreloj individual y terminará el 11 de agosto con la última prueba de pista.