5 claves para elegir un culotte

Es quizá la pieza de ropa ciclista más importante. El culotte supone la prenda clave de cualquier ciclista. Hoy te contamos mucho más sobre ellos y te damos 5 claves para que siempre las tengas en cuenta a la hora de decantarte por uno u otro modelo de culotte.

5 claves para elegir un buen culotte

El culotte es fundamental porque supone el uso de una prenda que, en primer lugar, va a ser la zona de mayor contacto con otros componentes, como la bicicleta en el sillín; en segundo lugar, por ser el culotte la zona de apoyo de nuestro peso en la parte de su badana; y en tercer lugar porque va a suponer un roce constante de nuestra parte interior de las piernas. Por todo ello, elegir un buen culotte es algo fundamental.

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Piensa que con un par de culottes puedes más que de sobra practicar ciclismo varias veces en semana, así que mejor que sean de calidad. Para ello, aquí tienes los cuatro aspectos fundamentales que necesitas conocer y valorar para tomar una decisión definitiva sobre el culotte que debes usar. Toma nota:

1. La badana es el punto clave en toda esta ecuación. Un buen culotte se define como tal sobre todo por la calidad de su badana. En este sentido, para poder saber qué badana es la mejor, valora los siguientes aspectos. En primer lugar, el diseño, por supuesto: que no sea una badana tremenda que entorpezca tu pedalada, pero tampoco demasiado pequeña que te desproteja algunas zonas. La badana apoya el trasero, sobre todo en la parte de los huesos isquines, y por eso es necesario que tenga buen acolchado y buena absorción. Pero más grosor no significa mejor badana en un culotte, que no te engañen: busca densidades de materiales altas, materiales elásticos que tomen la forma necesaria. Por lo tanto, el material de la badana de un culotte y su diseño son la clave: si además el material es antibacteriano y antiolores, y antialergénico, pues mejor que mejor, será una buena compra.
   
   
2. Si la badana te ha convencido, el segundo punto a valorar del culotte es el material, la licra. No hay tantos tipos de licras, así que vas a tener que decidir entre unos 4 o 5 modelos de licras en un culotte. Por eso, valora en ella su calidad, su nivel elástico y la resistencia que ofrece, para que te conceda mayor libertad. En este caso, los extras son si la licra en cuestión de ese culotte es más o menos transpirable y si también incorpora protección solar, que son cualidades más raras pero que también deben valorarse. Incluso hay culottes cerámicos para una mayor protección en caídas.
   
3. La talla de un culotte debería ser lo primero que mires pero es tan obvio que lo hemos relegado a un segundo plano. Llevar un culotte grande hará que te moleste y no se ajuste bien; llevar un culotte pequeño constreñirá tu circulación y empeorará tu rendimiento, provocándote incluso problemas mayores. Debe ajustarse bien a tus piernas y tronco, pero no apretar demasiado, no hacer una marca profunda, solamente quizá alguna pequeña señal tras horas de uso. Los fabricantes te facilitarán tu talla idónea en función del diámetro de tus muslos o la longitud de tus piernas. Un consejo: en caso de duda, elige la talla de culotte mayor, nunca menor.
   
4. Sexo. No te asustes. Pero por si lo desconocías, hay culottes para hombres y culottes para mujeres. Su diseño tiene notables diferencias, aunque las tres principales son el patronaje que tienen en cuenta las mayores curvaturas femeninas, la badana que concibe el diseño distinto de las caderas de hombres y mujeres y el diseño de los tirantes, que para las mujeres va cruzado en la parte delantera para que no les moleste debido a los pechos femeninos y se ajuste mejor a su cuerpo. Por supuesto que puedes circular con cualquier culotte, pero si quieres un mejor ajuste y comodidad, este factor también importa.
   
5. La temporada del culotte. Una obviedad, pero hay culottes de invierno, culottes de verano y culottes de entretiempo. Para los culottes largos, no hay dudas, pero para los cortos sí que a menudo se confunde un culotte para regiones o temporadas de extremo calor, con otros de entretiempo, cuyo grosor, trama de la licra y protección solar es diferente.
   

Por qué es importante elegir un buen culotte

No sólo por la comodidad, por la protección de los huesos isquiones, sino que un buen culotte te protegerá del adormecimiento sobre todo de esta zona. Además, la zona prostática, que también provoca muchísimos dolores de cabeza y molestias a largo plazo principalmente para los hombres, queda muchísimo mejor protegida con un buen culotte de ciclismo.

Y por cierto, un último apunte que por los comentarios vemos necesario hacer: con culotte no es necesario usar ropa interior. Muchos y muchas ya lo sabréis pero se escucha de todo, así que dicho queda: los diseños de los culottes ya consideran su uso sin ropa interior, con materiales igual de cómodos e higiénicos, y no llevar ropa interior evitará mayores problemas de rozaduras.