¿Cuándo hay que reponer el líquido tubeless? ¿Qué cantidad?
Si no sabes cuánto líquido tubeless tienes que poner, o cuándo tienes cambiarlo, aquí resolvemos estas y otras dudas sobre el sistema antipinchazos más utilizado en mountain bike.
Cuándo y por qué poner líquido tubeless
Lo primero que tienes que saber es que para reponer líquido tubeless hay varias opciones y lo puedes hacer tú directamente en casa.
El método más limpio y sencillo es inyectar el líquido a través de la válvula. Tanto si tienes una válvula Schraeder como una Presta, el proceso es similar: quitar el obús para que salga todo el aire y permitir introducir directamente en la válvula una jeriga o tubo por el que hacer llegar el líquido al interior de la rueda. Hay miles de tutoriales en YouTube, es sencillo, no te preocupes.
RECOMENDADO
Damoff Sealant, el líquido tubeless que huele a melocotón
Válvula Presta VS. Válvula Schrader: ventajas y desventajas
Tubeless v.s ruedas con cámara
El vídeo más divertido que te enseña cómo instalar neumáticos tubeless
Cerveza, vino y chocolate caliente para ganar el Tour de Francia
Los maillots más importantes del Tour de Francia
Pero aquí lo que tratamos de resolver es cuándo y por qué debes cambiar el líquido tubeless.
En primer lugar, no hay un tiempo estándar y depende mucho de las condiciones externas y de la cantidad de líquido que tengas.
Por lo general, cada 3 meses es más que recomendable hacer una revisión el nivel de líquido. Pero si has notas que el neumático pierde aire o que se ha gastado bastante líquido tapando algunos pinchazos, entonces sería más que recomendable reponer líquido antes de esos 3 meses prudenciales.
Aquí te dejamos una lista con las cantidades recomendadas de líquido para cada tipo de rueda, pero recuerda que si estás reponiendo líquido solo deberás completarlo.
Cantidad de líquido recomendada para Mountain Bike según el tamaño de rueda:
- MTB 26″: entre 60-80 ml
- MTB 27,5″: entre 80-100 ml
- MTB 29″: entre 90-120 ml
- Fat Bike: entre 170-200 ml
Es muy importante que antes de rellenarlo, sobre todo si es tras un cambio de cubierta, te asegures antes de haber talonado bien la cubierta, si no quieres malas experiencias y malgasto de líquido tubeless.
Y cómo hago el mantenimiento de mis ruedas con líquido tubeless
Menos pinchazos, mejor ajuste de presión porque evita pérdidas y una ligera mejora de peso. Las ventajas del líquido tubeless son conocidas. Sí, pero ¿y cómo hacer el mantenimiento?
En primer lugar, revisa a menudo la presión de tus neumáticos. Son un buen testigo, una buena alarma en caso de que algo vaya mal. Si el líquido ha hecho su trabajo y ha sellado, o si no lo ha hecho y la rueda ha perdido aire, el ajuste de esta presión te servirá para detectar que algo no macha bien. Quizá sea un simple poro, es lo más probable, pero mejor estar al loro por si es algo más grave.
Pero es que el líquido tubeless también puede sufrir pequeñas evaporaciones además de perder capacidad y propiedades con el paso del tiempo. De ahí que te indicásemos esos 3 meses de tiempo prudencial. Depende mucho del uso, porque igual llevas medio año sin revisarlo y crees que te va de maravilla. Y es posible, pero damos valores de revisión prudenciales, no de casos puntuales.
Un último consejo. Parece sencillo, tonto, pero es útil: mueve las ruedas de vez en cuando y pega bien el oído (con los pies no se escucha). Escucharás el movimiento del líquido tubeless y, con el tiempo, sabrás identificar la cantidad aproximada que queda sólo con oírlo.
Y si no has probaddo el líquido tubeless en tus ruedas de bicicleta, de veras, inténtalo. A quién no le han estropeado una salida un par de pinchazos, cuando es más que evitable, ¿no?