¿Cuánto hay que pedalear para quemar una cerveza?

Nadie es perfecto, y por mucho que nos propongamos eliminar el alcohol de nuestras dietas, el que más o el que menos se deja llevar un día y se toma sus cañas de cerveza, sus copas de vino o, por qué no, sus combinados de alcohol destilado. Pero, ¿qué penitencia conllevan esos actos? ¿Qué nos aportan?  ¿cuánto deberemos pedalear para quemar las calorías que nos aportan? Os lo contamos.

¿Cuánto hay que pedalear para quemar una cerveza?

En primer lugar, aclarar que los datos proporcionados son relativos y aproximados, y están calculados en base a un hombre de peso y estatura media, es decir, entre 170 y 180 cm y entre 70 y 75 kg de peso.

Pongámonos en situación. Junio, domingo a medio día. Has quedado a tomar un aperitivo con tu pareja y el grupo de amigos. Luce el sol en lo alto, en la mesa de la terraza que habéis elegido se está a las mil maravillas, pero con el verano encima el calor empieza a apretar. Y, consecuentemente, acabas "apretándote" una cerveza. Un tercio, concretamente. O lo que es lo mismo, entre 140 y 150 calorías -si se trata de una cerveza rubia nacional, de graduación normal- o hasta 190 -si se trata de cervezas extranjeras, negras o de más alta graduación-.

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No te juzgo, la disfrutaste tanto como un gorrino disfruta revolcarse en el fango. Pero al día siguiente habrá que ponerse a pedalear para equilibrar los excesos, y es que la cosa se alargó y terminaste por pedir el segundo tercio. Consumiste, por tanto, entre 300 y 400 calorías en cerveza, el equivalente  aproximado a 100 gramos de patatas fritas o chorizo.

Pero tranquilo, no es tan malo como suena. En unos 22 minutos sobre la bici habrás quemado las 150 calorías del primer tercio, y en otros tantos las del segundo. Es decir, con pedalear tres cuartos de hora, bien sea sobre la bicicleta estática o saliendo a rodar, habremos logrado compensar la cerveza consumida.

¿Y otras bebidas?

Quizá prefieras sustituir ese tercio del medio día por un vermut, un vino o quizá lo que más te apetece es una copa después de la comida. Pues bien, lo primero contiene unas 275 calorías, por lo que necesitaríamos unos 40 minutos para quemarlas; una copa de vino alcanza las 100 calorías, quemadas en 15 minutos sobre la bici; mientras que los destilados, en función de si son más o menos azucarados, oscilan entre las 100 y las 120 calorías a las que habría que añadir el refresco que utilicemos para el combinado.

A partir de ahora, siempre con moderación, podréis permitiros pequeños recesos en vuestra dieta de abstinencia, siempre siendo conscientes del tiempo que deberéis pedalear al día siguiente para compensarlo.