Consejos para descongestionar la nariz antes de salir a pedalear

El flujo de aire que llega a tus pulmones, antes ha debido entrar por tu nariz. Y para descongestionar esa nariz en pleno invierno hay formas sencillas de llevarlo a cabo.

Cómo descongestionar la nariz antes de dar pedales

Un ciclista siempre necesita un flujo respiratorio fluido, para lo cual es imprescindible descongestionar la nariz antes y durante un entrenamiento. Más aún ahora, con este tiempo, con esta atmósfera fría y a menudo también húmeda que hace que algo tan sencillo como respirar sin impedimentos a veces se convierta en una lucha constante. Hoy te explicamos algunos trucos para solucionar este inconveniente y descongestionar tu nariz.

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En primer lugar, tu misión para descongestionar la nariz es agrandar, dilatar, ampliar al máximo posible tus conductos nasales. Para ello, puedes hacer ejercicios, forzar la apertura y ayudarte de un masaje de empuje, que reactive estos músculos y empuje la mucosa hacia el exterior. Con los dedos pulgar e índice en pinza, desliza apretando de arriba abajo durante dos o tres minutos. Luego, suena tu nariz ya con las fosas abiertas y los músculos activos.

Sin duda, un aspecto fundamental es mantener una humedad aceptable en el ambiente, porque esta humedad favorece la descongestión nasal. Hay humificadores, por supuesto, que se han puesto muy de moda hoy en día, pero también métodos caseros y naturales. Como por ejemplo, colocar recipientes con agua en los focos de calor de tu vivienda. Si son radiadores, hay de estos fabricados en cerámica o metal, que cuelgan de los huecos entre celda y celda. Si usas una estufa (da igual el combustible), puedes colocar directamente un pequeño cazo de agua arriba (al rato hace un poco de ruido, nada insoportable) y rellenarlo de vez en cuando. Si usas aparatos de aire acondicionado con bomba de calor, también hay pequeños depósitos para los agujeros de salida.

Es de uso popular emplear cebolla, toma de vapores o lavados salados. Son útiles, sobre todo estos últimos, que sin duda son un método excelente para descongestionar la nariz. Hay pequeños envases ya preparados con agua marina a presión. Es un poco molesto al inicio, pero cuando le tomas el truco, es un segundo y un par de horas de alivio. Antes de salir a pedalear, van muy bien. Por supuesto, estos lavados de agua salada los puedes hacer sencillamente con una jeringa.

Y recuerda: si la congestión es pequeña, si el catarro es poco, salir en bici es buena terapia porque abrirás las fosas y eso será de ayuda para expulsar mucosa. Si hay fiebre o una congestión atroz, quédate en casa y cuídate un poco.

Por qué es importante descongestionar la nariz

La mucosa es una aliada. Ocurre algo parecido a la fiebre: la tememos y queremos que desaparezca, pero esa subida de temperatura es nuestra ayuda para finiquitar a un virus, por lo que no hay que hacerla desaparecer, sino evitar que suba más de la cuenta. Pues con la mucosa para descongestionar la nariz pasa algo similar.

Es una barrera natural que tu organismo crea con varias funciones. En primer lugar, para que el aire no entre tan frío y tan seco, sino que pase por ella, calentándose y humedeciéndose antes de llegar a la parte interna de tu sistema respiratorio.

Pero también, esta membrana de las fosas y la nariz, filtra y limpia el aire. Sí, no es un filtro perfecto, pero es nuestro filtro natural. Humo, polvo, polen, hongos, bacterias pero también virus, encuentran en esa mucosa la primera barrera de entrada. Eso sí, un exceso hace que el flujo sea peor. Sobre todo, mientras practicas deporte, descongestionar la nariz es un dilema, una necesidad.

Pero, lo dicho, aplica los trucos sin olvidar que descongestionar la nariz es necesario, pero la mucosa tiene su función. Y, por supuesto, no hagas como Froome: las limpiezas en plena marcha con precaución.