7 errores comunes que se comenten en el rodillo

El uso del rodillo en este estado de confinamiento se sigue multiplicando. Al no poder salir por culpa del coronavirus, el ciclismo indoor se ha disparado. Y, claro, muchos ciclistas no están acostumbrados y caen en errores a la hora de adaptarse al pedaleo en rodillo. Te apuntamos los principales errores que puedes cometer al usar rodillo en casa.

7 errores que solemos cometer sobre el rodillo

1. Tu posición sobre la bicicleta en el rodillo deberá sufrir algunas alteraciones. En primer lugar, considera la técnica de ir arriba y abajo, y no lateralizar tu esfuerzo, pues en la realidad, sobre todo en ascensos y en sprint, es la bicicleta la que voltea lateralmente, y aquí todo ese balance lateral lo hará tu cuerpo. También, cuida la posición de otras partes de tu cuerpo: cambia de vez en cuando la posición de tus brazos sobre el manillar, no te encalles; levántate de vez en cuando, siempre con consideración hacia el esfuerzo de torsión que hará tu bici (aunque tu cuadro lo soportará, no te asustes), pero levántate varias veces en tu entrenamiento; y entrena el cuello, no mires los pedales constantemente pues el cuello también necesita estar fortalecido para el regreso a la normalidad.

2. Aprovecha para mejorar esa pedalada. La técnica de pedaleo es un mundo apasionante. Es como controlar tu respiración: al principio debes estar muy concentrado para acompasar tu ritmo de respiración al ritmo de la cadencia, pero una vez la entrenas y te concentras va sola. Pues esto es igual: aprende cómo mejorar tu técnica de pedalada, concéntrate en mantenerla, y con el tiempo irá sola. Para ese entrenamiento, el rodillo es la mejor opción.

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3. Ten un plan de entrenamiento. Hay muchas opciones, incluso gratuitas. Porque es el objetivo el que nos mueve, y si te montas al rodillo sin esa meta en mente, será más duro dar pedales en la situación tan estresante en la que estamos. De hecho, el rodillo también es más propicio el uso de las dobles sesiones de entrenamiento, siempre que tengas en cuenta el esfuerzo total es una buena opción para hacer dos entrenamientos más cortos con visos a ganar fondo.

4. Planifica tu alimentación e hidratación durante el entrenamiento. Es uno de los errores más recurrentes: nos montamos al rodillo sin alimentación e incluso sin hidratación, y luego tenemos que romper la rutina de entrenamiento al bajarnos del rodillo en busca de alimento. Además, la sudoración se multiplica, por lo que necesitarás hidratarte muy bien, con sales incluidas.

5. Elige el mejor lugar para entrenar, sobre todo que esté bien ventilado. Vale casi cualquier espacio, siempre que esté bien ventilado. También recuerda que un ventilador es una gran opción, puesto que va a aumentar tu evapotranspiración. También puedes tener a mano una toalla para un uso ocasional. 

6. Si haces el uso del rodillo algo monótono, irá en tu contra. Rompe con esa monotonía. No solo con tu plan de entrenamiento, sino con opciones que en exterior no existen, como el uso del ciclismo virtual y de plataformas como Zwift, pero hasta el consumo de cine y series, de música y podcast. Todo vale con tal de cumplir tu plan de entrenamiento.

7. Por último, usa el material óptimo específico: no gastes tu goma de carretera en el rodillo, hay cubiertas fabricadas para su uso en rodillo. También, ajusta tu bicicleta a tope, porque es buen momento de hacerlo y testarla sobre el rodillo. Y, por supuesto, cuida de esa bici: protégela, hazle un buen mantenimiento y límpiala con asiduidad.

Adaptarse al uso del rodillo

Por supuesto, no se trata solamente de dar pedales. Hay que considerar que usar el rodillo no es totalmente asemejable a entrenar en el exterior, no solo para ti sino también para tu bici. Por eso, ten en cuenta que tendrás que adaptar ciertos comportamientos al ejercicio sobre el rodillo. No es nada insalvable, pero tenlo en cuenta para mejorar tu rendimiento sobre el rodillo y para proteger tu bici en el uso de esta disciplina. Ciclistas como Chema Arguedas dan muchos más consejos, porque no está de más considerar que si todo ha cambiado, nosotros también debemos cambiar, pues en el cambio está la evolución.