Gravaa, un sistema ligero para inflar y desinflar las ruedas de MTB en marcha

Este sistema incorporado en el buje es capaz de ajustar la presión de tus ruedas sin tener que detenerte en ningún momento. De repente, tu mountain bike tendrá siempre la presión exacta, para que te despreocupes.

Gravaa en el mundo de los reguladores de presión de ruedas

Hay vehículos que incorporan un sistema de control de presión de los neumáticos y ajuste automático. Se ve, por ejemplo, mucho en camiones para el transporte internacional, con una especie de tubos hacia las válvulas de las ruedas para controlar la presión y reajustarla sin parar. Pues algo así es Gravaa, pero para una mountain bike.

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De hecho, este tipo de sistemas no son nada raro. Son raros o novedosos en el mountain bike. Sobre todo porque siempre ha habido un hándicap: el peso. Ya sabéis, añadir peso para algo que “solamente” controla la presión de los neumáticos no parece la mejor decisión para los más puristas.

Sin embargo, los inventos se han ido sucediendo hasta la llegada de este Gravaa, un sistema que sí que está más maduro, más refinado, mejor acabado. De repente, variar la presión de tus neumáticos en marcha supondrá precisamente una mejoría. De repente, insistimos, puedes reducir presión en un tramo para ganar adherencia, y aumentar la presión para volar en tramos de velocidad. Desinflas para bajar, luego rápidamente inflas para subir.

Cómo funciona Gravaa en tu mountain bike

Son ejemplos reales que consigue un producto, este Gravaa, diseñado en Holanda. Un sistema bastante completo y compatible con las mountain bikes y las bicis de gravel. Con él, no sólo podrás variar las presiones en marcha, sino también salir de un embrollo: si el pinchazo no lo arregla la tubelización o el líquido antipinchazos, Gravaa puede ir metiendo presión para sacarte del apuro, aunque no está totalmente pensado para eso. La presión exacta en cada momento.

Su pero, ese peso, aún es una incógnita, pero ha de bajar el medio kilo si quiere competir con lo que existe actualmente en el mercado.

El sistema funciona de la siguiente forma: en el buje se incorpora Gravaa, una pequeña bomba de aire de altísima presión y minúscula, así como el sistema de control electrónico de las presiones, para su regulación. Gravaa sólo se activa autónomamente y cuando nota la bajada de presión, pero se conecta a cualquier dispositivo con ANT+, por lo que podrás controlarlo desde tu GPS. A falta de confirmación de compatibilidades, se prevé que desde ese mismo dispositivo puedas regular las presiones. Lo vimos en prototipos como en Choka, no es totalmente nuevo, pero sí novedoso.

La mala noticia es que aún no está a la venta. La buena, que verá la luz este 2021, posiblemente de cara al verano. Ni el precio ni otras tantas características han sido desvelados, así que habrá que esperar un poco para contrastar su potencial.