Sepp Kusss 'el gregario' gana y alcanza la gloria en La Vuelta a España 2023

Carretera 17/09/23 20:10 Sergio P.

Finaliza La Vuelta a España 2023, tercera y última grande de esta temporada, con la inesperada pero merecida victoria de un trabajador del pelotón como es el estadounidense Sepp Kuss a quién han secundado en el podio sus compañeros Jonas Vingegaard y Primoz Roglic vencedores del Tour de Francia y Giro de Italia respectivamente que culminan así la temporada perfecta de Jumbo-Visma

Jumbo-Visma certifica su dominio en las grandes este año copando el podio de La Vuelta 2023

Se termina el monólogo de Jumbo-Visma en La Vuelta a España 2023 en un año en el que apenas han dejado apenas las migajas, entre comillas ya que algunas son carreras realmente importantes como la París Niza que se llevó Tadej Pogacar o el Tour de Suiza en el que se impuso Mattias Skjelmose. El resto de la principales pruebas por etapas, incluidas las tres grandes, han ido a manos de ciclistas de Jumbo-Visma, en especial de Primoz Roglic que con Tirreno-Adriático, Volta a Catalunya y Giro de Italia culmina un calendario espectacular, lo mismo que su compañero Jonas Vingegaard que al Tour de Francia ha logrado añadir Itzulia y Critérium du Dauphiné.

Con estos precedentes la victoria en La Vuelta que hoy finalizaba parecía decantada antes de salir en favor de uno de estos dos ciclista. Lo que no se esperaba es la partida de mus y la escapada casi bidón que se produjo en la 6ª etapa camino del Observatorio de Javalambre y en la que, aunque el liderato cayó de forma temporal en manos de Lenny Martínez, nos dejaba al acecho a uno de los mejores ciclistas del pelotón como es Sepp Kuss, uno de esos gregarios de superlujo que siempre están junto a sus líderes hasta los últimos compases de las etapas más decisivas y que, en esta temporada 2023 acumulaba la machada de haber disputado las tres grandes vueltas.

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Reforzaba su candidatura al triunfo y arrancaba un problema en el seno de Jumbo-Visma cuando tras la etapa con final en el Xorret de Catí no sólo aguantaba con los favoritos sin problema sino que se situaba como líder de la general. Aunque entonces no podía ni imaginarlo, una prenda que ya no dejaría de vestir hasta Madrid.

En todo caso, en esos momentos las miradas estaban centradas en que parecía el hombre a batir, el vigente ganador de la prueba Remco Evenepoel que se había mostrado tremendamente sólido en la primera semana venciendo con contundencia la primera etapa de montaña en tierras andorranas. Sin embargo, Remco no lograba hacer valer su poderío en la contrarreloj de Valladolid lo que abría la incertidumbre en la general. Por el contrario, Sepp Kuss se marcaba una espléndida etapa que no hacía sino afianzarle en el liderato.

Llegábamos así a las etapas pirenaicas que debían definir con claridad la carrera y, a las primeras de cambio, sucumbía Remco Evenepoel en una etapa con final en el Tourmalet en la que Jumbo-Visma comenzaba a pasar el rodillo y que, sin aún saberlo, comenzaban las tensiones internas con un ambicioso Jonas Vingegaard que realizaba un contundente ataque que lo dejaba a tiro del liderato además de lograr una prestigiosa victoria de etapa.

Tensiones que llegarían a su culmen días más tardes en la llegada al temible Angliru donde Sepp Kuss lograría salvar el maillot rojo por los pelos ante la ofensiva de sus propios compañeros.

A partir de ahí, tras la pertinente reunión entre los ciclistas y los directores de equipo, volvía la paz a al formación neerlandesa sentenciando que, salvo desfallecimiento inesperado Sepp Kuss era digno merecedor del maillot rojo y se le iba a proteger como corresponde al líder.

Del resto de aspirantes a vestir la prenda roja poco podemos decir. Algo de batalla vimos en el Tourmalet pero, a partir de ahí nada. Ni Juan Ayuso, ni Enric Mas han mostrado capacidad ofensiva. Únicamente Mikel Landa y su Bahrain-Victorious han planteado un poco más de ambición aaunque con más ganas que fuerzas.

Únicamente el show de de Remco Evenepoel que, tras perder sus opciones a la general, se dedicó a buscar etapas con tremenda rabia ha conseguido salvar de cara al espectador la última semana y media de La Vuelta 2023.

Llegábamos así a la última jornada, con un recorrido ya tradicional en torno a la ciudad de Madrid hasta llegar al habitual circuito entre el Paseo del Prado y las calles Alcalá y Gran Vía con el único aliciente de conocer si Kaden Groves lograría certificar su triplete de etapas o se tendría que conformar con las dos logradas durante la primera semana.

Antes de arrancar esta jornada casi festiva en lo que respecta a la competición, conocíamos de boca del propio Javier Guillén, Director General de Unipublic, que la salida de la próxima edición de La Vuelta tendría como sede la ciudad de Lisboa, probablemente con una crono individual y con las primeras etapas por tierras lusas.

Llegados al circuito final se aceleraba el ritmo y comenzaba la auténtica competición algo que, preguntes al corredor que preguntes, aunque parezca que se trata de una jornada de paseo, es de los momentos de mayor intensidad de cada Vuelta. Como resulta habitual siempre con valientes que lo intentaban más de cara a la galería que con esperanzas de llegar.

En esta ocasión los que arrancaban eran los ciclistas de Bora-Hansgrohe Nico Denz y Lennard Kämna en compañía de Rui Costa. Cuando ya todos imaginábamos el guion habitual en el que les cogen ya en los últimos kilómetros se producía la sorpresa cuando realizaba una dura arrancada el propio Remco Evenepoel a quién marcaba de cerca Kaden Groves al estar la clasificación por puntos aún en el aire. A ellos se les unían 3 ciclistas de INEOS Grenadiers: Omar Fraile, Kim Heiduk y Filippo Ganna. Los dos primeros se dejaban la vida para llevar a Omar, Groves y Remco hasta la cabeza antes de explotar, prueba del intensísimo ritmo.

Desde ahí, mantenían un duro pulso con el pelotón, llegando a alcanzar más de 30 segundos de diferencia que se iban reduciendo por la fatiga y el altísimo ritmo que marcaba el pelotón. Aun así alcanzaban el último paso por meta con 15 segundos de ventaja que les hacía soñar con la victoria. Sin embargo, el típico parón y vigilancia a unos cientos de metros de meta hacía que el pelotón llegara hasta ellos momento que aprovechaba Remco para intenar sorprender y casi lo consigue, sacando a todos de rueda menos a un portentoso Kaden Groves que sabía reaccionar para regresar a la rueda de Evenepoel y sobrepasarlo en los últimos metros, redondeando su maillot verde con un fantástico triplete de etapas.