5 hábitos que siguen los ciclistas efectivos

Siempre puedes mejorar, no lo olvides. Por eso, estos 5 hábitos pueden hacerte un ciclista más efectivo para conseguir tus objetivos.

Son sencillos, son comúnmente conocidos, los has considerado o los practicas. Sea como sea, hay ciertos hábitos que conviene recalcar si nuestro objetivo es ser ciclistas efectivos, o más efectivos, o sencillamente mejores. En síntesis, podríamos condensar estos hábitos en 5 grandes líneas de actuación.

4 hábitos para ser un ciclista efectivo (y quizá mejor)

No creas que los ciclistas profesionales sólo entrenan. De eso nada. En el ciclismo, como en el deporte en general, los hábitos son casi la otra mitad que complementa al entrenamiento más exigente. Olvidar esta parcela hará que no desarrolles por completo tu potencial en el ciclismo o mountain bike. Por eso, nos hemos propuesto listarte los 5 hábitos principales que debes tener siempre en mente para ser un ciclista efectivo, eficiente y explotar todo tu potencial.

1. El sueño es el gran olvidado. Exacto, no se puede rendir sin haber descansado correctamente y creemos que para practicar ciclismo a la mañana siguiente nos basta con dormir sin más. De hecho, multitud de atletas hablan del sueño como un elemento muy importante en su rutina de entrenamientos. Es sencillo, porque ayuda en dos fases: ayuda en la mejor concentración durante el ejercicio posterior; y también, al mejor descanso del ejercicio ya hecho. Así de sencillo: en el ciclismo, el sueño es el reseteo, supone poner a cero nuestro chip, recuperar las reservas consumidas, para volver a darle duro a tu bici de carretera o mountain bike al día siguiente. Consejo: duerme entre 8 y 9 horas y, si no te es posible, no duermas menos de 7 antes de un entrenamiento exigente.
   
   
   
   
2. La alimentación. Estaba claro que iba a aparecer. No vamos a ahondar al nivel de otros artículos en los que te hemos explicado qué supone para el ciclismo un tipo u otro de régimen alimenticio. Esta vez nos quedamos en un apunte más concreto: considera estudiar a fondo tu alimentación durante el entrenamiento o la prueba ciclista. Comer correctamente en el tiempo en bici evitará que cometas errores después de bajarte de ella, es decir, si comes correctamente no necesitarás atracones posteriores. Kate Courtney, la actual Campeona del Mundo XCO ya afirmó en una entrevista que este había sido su gran cambio: saber alimentarse durante el tiempo en su mountain bike.
   
   
   
   
3. Mejora tu movilidad y tu flexibilidad. Por supuesto, en bici la flexibilidad no está en la cúspide de la pirámide de los hábitos ciclistas, pero es muy importante así que no la subestimes. Evitarás lesiones, podrás moverte de forma más ágil sobre la bici y, sobre todo, sobre la mountain bike cuando el terreno se ponga más exigente. Piensa en actividades que te ayuden en este y en el aspecto de concentración y ventilación de la mente: yoga, ejercicios con rodillo, con foam roller, con pelota. No importa el tipo, entrena tu movilidad y notarás que tu agilidad sobre la bicicleta mejora ostensiblemente.
   
   
   
   
4. Mejora tu comunicación. ¿Sorprendido? ¿Sorprendida? Pues sí, comunicar mejor te ayudará independientemente de que tengas grupeta, entrenador o nada de ello. Porque nos referimos a la comunicación en general, incluso a la comunicación contigo mismo. Pero vamos más allá: gana el hábito de medir todo lo que tu cuerpo y tu bici comunican, y agrega notas sobre esto para luego analizarlo más pausadamente. Eso también es comunicación y conocimiento de uno mismo. Normalmente no tenemos el hábito ciclista de comunicarnos mejor, creemos que solo es una cuestión de entrenamiento. Pero medir más, tomar mejores apuntes en el momento (luego se olvida) y repasar toda esta información te harán mejorar matices que marcan la diferencia.

Y un hábito más para ser un ciclista efectivo y racional

1. Cómprate una agenda. O un diario. O sencillamente una libreta en blanco. Anota lo que se te ocurra del entrenamiento, puede serte útil. Irás aprendiendo qué anotar y qué no: sentimientos, sensaciones, molestias físicas, análisis del terreno o de la carretera. Todo puede valer: la información técnica, para valorar y considerar su mejora; la información del terreno, para filtrar rutas en función del entrenamiento que en cada momento necesitas; y la información personal, para medir tu confianza y saber en qué momento anímico te encuentras.
   
   

Hay muchos más, pero pueden sintetizarse en estos 5. Esperamos que te sean de utilidad para mejorar en tu ciclismo. Ponlos en práctica y verás que en realidad sí que lo son.