Jenny Rissveds sobre su enfermedad: "Mi vida comenzó a parecerse a la de un adicto"
Tenía menos de 23 años cuando la sueca Jenny Rissveds ganó el oro olímpico en Río de Janeiro, además había ganado el mundial sub 23 y formaba parte del equipo de mountain bike más potente del mundo, el Scott-SRAM, todo eso se diluyó en cuestión de meses hasta que anunció que se retiraba de la competición. ¿Qué pasó? Ella misma explicó que la perdida de varios familiares la sumió en una depresión, pero ahora acaba de publicar una explicación más extendida en la que revelá que lo pero fueron los transtornos alimentarios.
Jenny Rissveds confiesa que ha sufrido un transtorno alimenticio severo
Con motivo del Día Mundial de la Salud Mental Rissveds ha publicado en su cuenta de Instagram un texto con el que, según ella, pretende que pueda ayudar a otros que pasen por lo mismo que ella ha padecido.
Lo de su depresión ya era conocido por todos pero asegura que le ha costado anunciar que su depresión desembocó en un trastorno alimenticio. Ella misma los explica: "Lo único en lo que pensaba era en comer todo lo posible. A continuación solo podía pensar en la manera de llegar al baño sin levantar sospechas. Mi vida comenzó a parecerse a la de un adicto. Probablemente me convertí en un adicto"
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No fue hasta finales de 2017 cuando Jenny rissveds buscó ayuda para su depresión y fue entonces cuando por primera vez confesó su problema con la comida. Allí descubrió que su obsesión por la comida y su cuerpo estaba conectada directamente con la depresión. Esa reunión en el departamento psiquiátrico del hospital se convirtió en la primera llamada de atención para Rissveds.
Por recomendación sanitaria Jenny acudió a una clínica de trastornos de la alimentación y se incribió en un programa reeducar sus patrones alimentarios. "Aproximadamente 8 meses después, en junio de 2018, finalmente pude comer por primera vez en años, sin ansiedad ni sentimientos de culpa."
Como punto final, Rissveds hace una reflexión importante al recomendar que cuando alguién se sienta como ella y busque respuestas en Google, no haga caso de lo que pueda leer allí, simplemente pide ayuda a los profesionales.