Kate Courtney reflexiona sobre su "fracaso" en los JJOO
La ciclista norteamericana ha publicado recientemente un artículo en el que analiza la derrota, sus causas y consecuencias. Courtney desarrolla unos párrafos brillantes sobre la importancia de la asunción del fracaso y el cuidado de la salud mental en el deporte.
Kate Courtney y su resultado en los JJOO de Tokio
A menudo, la línea que separa la victoria de la derrota es delgada. Muy delgada. Por eso, también a menudo se infravalora un segundo puesto o una medalla de plata, o también se reflexiona poco sobre la derrota y la grandeza en esa derrota. Esa derrota, incluso un fracaso absoluto, forma parte de la esencia del deporte y hay que aprender a convivir con él.
RECOMENDADO
Un segundo puesto nunca dio tanto que hablar. Ponemos en perspectiva la "derrota" de N1NO
7 puertos ciclistas del Pirineo que no debes perderte
Cómo soltarte de manos en tu bici y no perder la sonrisa
El UAE blinda a Pogacar hasta 2027
Consejos para salir en bici con lluvia
Por qué el maillot de Campeón del Mundo es arcoíris y quién fue el primero en llevarlo
Por eso, cuando una deportista del nivel de Kate Courtney asume la derrota y se para a reflexionar sobre su fracaso en los Juegos Olímpicos de Tokio es algo a aplaudir. Porque una filosofía así para una ciclista con tanta visibilidad ayuda enormemente a entender el deporte en su plenitud, con todo lo que lo compone, y mejora la respuesta de generaciones venideras ante la ansiedad o la presión a la que se pueden ver sometidas por el simple hecho de no ganar.
Sin embargo, es algo bastante excepcional. Hace pocas semanas se movieron mucho por redes unos vídeos de Perico Delgado hablando de esta cuestión de aprender a perder. Es una importancia reciente, pero aprenderla es tremendamente importante.
En este sentido, las palabras de Kate Courtney en el Washington Post son clarividentes y necesarias. Y por eso, las analizamos brevemente después de terminar Courtney muy lejos del pódium en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
El alegato de Kate Courtney frente al fracaso
No es la primera vez que habla de esto. Kate Courtney se caracteriza por su nivel y compromiso social. Ahora, el Washington Post le ha permitido una tribuna en la que explica cómo ha sido su fracaso en Tokio y cómo lo supera, y reflexiona sobre el concepto social de éxito y la crítica.
Es dura consigo misma, pero también con la sociedad, la misma que según Courtney la elevó a los cielos y luego “la abrumadora avalancha de positividad y apoyo que había recibido antes de mi carrera dio paso a una ola de consuelo y críticas”. Acepta la derrota de manera muy honesta, e incluso la crítica (la autocrítica ya la hace, sin duda), pero estos comportamientos sociales y mediáticos no son buenos para el deporte.
Su gran argumento lo fundamenta en una rival en la pista y una amiga fuera de ella: Jolanda Neff. Kate Courtney la pone como ejemplo de que la ferocidad de ese argumento en torno al fracaso no funciona ni tiene sentido. Porque Jolanda Neff viene de dos años muy complicados, de una caída que casi le cuesta la vida y de una fractura de mano previa a Tokio. Y ganó el oro. Pero por el camino, mucha gente no confió en ella. Pero, insistimos, ganó.
Por ello la hace referente de los altibajos lógicos en el deporte (y en la vida). Porque Kate Courtney hace referencia al tremendo debate levantado en torno a la salud mental de los deportistas de élite. Simone Biles ha sido la punta de lanza de una catena de deportistas que han reivindicado esa salud mental por encima del rendimiento deportivo. No se puede presionar a una persona para que gane y a cambio se destruya por dentro. “El coraje es agotador”, afirma Courtney, que cierra su alegato con un último párrafo brillante y que debería ser leído en todo el deporte base.
“Esta no es la historia que esperaba escribir sobre mis Juegos Olímpicos”, comienza diciendo, pero “hay temporadas de lucha y temporadas de triunfo, y que no siempre puedes elegir cuándo pasar de una a la otra”, así que estar dolida, agotada no es sinónimo de falta de coraje, sino de abundancia. “Negar la lucha es negar lo mismo que nos permite triunfar”, cierra Courtney, a la que la vida seguro que le aguarda grandes triunfos profesionales y personales con esa actitud y con esa brillante cabeza, capaz de leer una carrera de mountain bike para ganarla y de analizar de este modo las mil emociones que produce la derrota y que nos hacen también sentirnos vivos y vivas.