El Lidl-Trek elige componentes de gravel para las Clásicas
Se acerca el opening weekend de las clásicas del pavés con la disputa de la Omloop Het Niewsblad y, a lo largo de la semana, las carreteras de Flandes han estado repletas de ciclistas profesionales reconociendo los tramos con lo que se han podido ver algunos detalles sobre el material que utilizarán los equipos para lidiar con los adoquines.
Algunos ciclistas del Lidl-Trek eligen el monoplato del SRAM Red XPLR de 13v
Que el monoplato supone una ventaja mecánica cuando su uso no condiciona otros aspectos como el rango de desarrollo disponible o un excesivo salto entre relaciones es algo sobre lo que hay consenso. De hecho, en los últimos años, no ha sido extraño ver a ciclistas de Visma-Lease a Bike o Lidl-Trek, los equipos que equipan grupos SRAM en sus bicis utilizando esta configuración en etapas puntuales.
El lanzamiento hace unos meses del SRAM Red XPLR, el grupo de 13v monoplato orientado específicamente hacia el gravel ha dado mayor versatilidad a la configuración monoplato hasta el punto que, en los reconocimientos previos al inicio de las clásicas, se ha visto a varios ciclistas de Lidl-Trek utilizando este grupo.
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El uso del monoplato en las clásicas del pavés supone todo ventajas para un ciclista profesional ya que reduce al mínimo los problemas mecánicos, como una salida de cadena en el momento más inoportuno, que pueden dar al traste con la carrera. A esto hay que sumar las características específicas del cambio trasero Red XPLR, diseñado con el concepto full mount heredado de sus grupos de mountain bike de forma que el cambio se ancla directamente al cuadro abrazando la patilla por ambos lados. Esto, sumado a un diseño tremendamente robusto hace que el cambio sea prácticamente indestructible incluso si sufre un impacto en una caída.
Para utilizar el cambio SRAM Red XPLR el único requisito es que la bici cuente con patilla de cambio tipo UDH, el tipo de patilla de cambio que SRAM está consiguiendo convertir en un estándar. Una premisa que cumple la Trek Madone Gen8 que utilizan los ciclistas del Lidl-Trek.
El SRAM Red XPLR dispone de un casette 10-46 lo que, combinado con un plato de 53 dientes debería proporcionar desarrollo de sobra para afrontar cualquiera de los muros flamencos, de hecho, un 53x46 ofrece un desarrollo más corto que el 40x34 con que cuentan los ciclistas que montan Shimano y, gracias a los 13 piñones, los saltos entre relaciones son contenidos pese a la amplitud del casette.
Precisamente el único inconveniente que tiene el uso de esta configuración es precisamente esos 13 piñones, que pueden suponer un problema en caso de pinchazo ya que el ciclista únicamente podría obtener repuesto desde su coche de equipo ya que es improbable que los vehículos neutros cuenten con casettes de este tipo para un reducido número de corredores.