Los mejores rodillos para ciclismo ¿qué debes tener en cuenta antes de comprar uno?

Los rodillos para ciclismo han ido evolucionando hasta dejar de ser esa tortura insufrible a la que los ciclistas recurrían, como mal menor, cuando la meteorología era realmente adversa. Hoy en día el los modelos actuales son auténticos simuladores del ciclismo más real.

Rodillos para ciclismo: qué tipos hay, qué debes tener en cuenta y cuál necesitas

Hablar hoy en día de rodillos de entrenamiento es tener que referirse de forma obligada a los rodillos interactivos. Rodillos dotados de un sistema de resistencia accionable de forma electrónica y controlado desde el ordenador o el ciclocomputador gracias al protocolo de comunicación ANT+ FE-C que ya desde hace unos años se convirtió en el estándar para estos aparatos.

Sin embargo, aún podemos encontrar en los catálogos de las marcar rodillos convencionales que aún pueden dar buen servicio a quienes únicamente utilicen el rodillo en días muy puntuales y no quieran invertir demasiado en adquirir uno. Tampoco nos podemos olvidar de los tradicionales rodillos de tres rulos, los favoritos de los ciclistas de mountain bike y pista para calentar antes de las competiciones que, además, son una herramienta que todo ciclista que pedalee en pelotón debería de utilizar ya que permite mejorar tremendamente el dominio sobre nuestra bicicleta.

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A la hora de adquirir uno u otro modelo, evidentemente, debemos plantearnos el nivel de uso que le vamos a dar. Hay ciclistas que, en cuanto llega el cambio de hora, únicamente pueden pisar la carretera los fines de semana. Para ellos el rodillo se convierte en un herramienta indispensable para lograr llegar a la primavera con una forma aceptable. A ellos les compensará invertir en un buen rodillo con las mejores prestaciones. Por el contrario, alguien que viva en la costa levantina, con buenos horarios de trabajo es posible que no tenga necesidad de subirse al rodillo en la vida. Este tipo de ciclista en caso de querer comprar uno seguramente salga del paso con un modelo más económico que le permita salvar días muy puntuales.

A la hora de escoger un rodillo el primer aspecto en el que fijarse es la calidad y estabilidad de la estructura, sobre todo, si vamos a hacer un uso intenso. No es lo mismo subirse al rodillo para pedalear un rato que competir en carreras virtuales a cara de perro con continuas arrancadas. Del mismo modo, en función del uso que le vayamos a dar y nuestra forma física hemos de comprobar qué capacidad de resistencia es capaz de aportar el rodillo. Obviamente, no podemos pretender hacer intervalos de fuerza en un rodillo de tres rulos al igual que tampoco nos hará falta un rodillo capaz de simular esfuerzos de 2.000 W si en un sprint a tope no somos capaces de dar más de 800 W.

El volante de inercia es otro de los puntos claves de los rodillos. Una rueda pesada que se utiliza para simular la inercia natural de la bici cuando pedaleamos en carretera. Cuanto más grande y pesado sea el volante de inercia la sensación de pedaleo será más realista. Respecto a este último punto, hay que diferenciar entre los rodillos tradicionales en los que la resistencia la ejercía un cilindro apoyado sobre la cubierta y los modernos rodillos de montaje directo. Los primeros cuentan con ruedas pequeñas y se van frenando constantemente por lo que las sensaciones distan mucho de la reales, un problema que vinieron a solucionar los de montaje directo que, en los modelos más recientes llegan a un realismo casi absoluto. Por su parte, los rodillos de 3 rulos no necesitan de este elemento ya que las ruedas giran como en la carretera y, aunque la inercia no es la misma y la bici se para cuando dejamos de pedalear, es lo más parecido que podemos encontrar a rodar por carretera.

Un último aspecto a tener en cuenta a la hora de decantarnos por uno u otro modelo es la sonoridad cuando lo usamos, sobre todo para aquellos que vivan en un piso y tengan que convivir con vecinos. Los modelos de montaje directo son, hoy por hoy, los más silenciosos y, en el extremo opuesto, los clásicos que apoyan en la cubierta los más ruidosos.

Razones para tener un rodillo en casa

¿Para que necesitamos un rodillo? Una duda que acude a la cabeza de muchos al a hora de afrontar la inversión que supone adquirir uno de estos aparatos. Obviamente, el cicloturista de fin de semana, que únicamente quiere pedalear sin ningún objetivo deportivo concreto con los compañeros de grupeta no se plantea adquirir un rodillo. Sin embargo, a poco que tengamos anhelos deportivos el rodillo se convierte en una útil herramienta.

Las exigencias laborales y de nuestros quehaceres diarios a menudo nos ponen muy complicado mantener una rutina de entrenamientos. El rodillo añade mucha más flexibilidad al permitirnos entrenar sin importar si fuera está lloviendo o ya es noche cerrada cuando lleguemos a casa. Aparte, si dejamos las cosas preparadas de antemano es mucho más rápido llegar, ponernos un culotte y comenzar a pedalear.

Aparte, una de las ventajas del rodillo es que, prácticamente todo el tiempo de pedaleo es tiempo útil de entrenamiento. Aquí no tenemos que salir de la ciudad, parar en media docena de semáforos, etc. hasta que alcanzamos las carreteras en las que vamos a hacer lo que toque ese día. Si queremos, desde la primera pedalada podemos estar apretando a tope, aunque lo recomendable sea mantener las habituales rutinas de calentamiento y enfriamiento.

Entre las pegas debemos mencionar que nos obliga a contar con un lugar dedicado al rodillo, algo que puede ser complicado en algunos pisos de reducidas dimensiones. Sobre todo, en los rodillos interactivos en los que, si tenemos que montar y desmontar todo el tinglado cada vez que queremos entrenar tenemos que contar con un buen rato para colocar la bici, sacar el ordenador, preparar el ventilador, los accesorios que podamos necesitar, etc. Fácil se nos va media hora sólo en preparativos.

Es por ello que, muchos de los que hacen uso intensivo del rodillo acaban buscando un sitio en casa para lo que en el argot se conoce como la “pain cave”, donde tenemos todo listo para llegar a casa y sólo tener que encender el ordenador y ponernos a pedalear. Muchos incluso tienen constantemente montada su segunda bici en el rodillo.

Mejores rodillos de bici por tipos

Rodillos fijos

Btwin In Ride 100

Decathlon pone a nuestra disposición un modelo tremendamente económico a la par que funcional. Destaca por su mando que podemos colocar en el manillar y que permite seleccionar entre los 7 niveles disponibles para su resistencia magnética que, en la posición más dura, genera una salida de 550 W. Hay que tener en cuenta que sólo admite bicicletas, con medida de rueda entre 26’’ y 28’’ (las de 700 mm de carretera) y que sus anclajes sólo son aptos para ruedas con cierre rápido convencional por lo que, si contamos con una bici con freno de disco y eje pasante no podremos utilizarlo. Destaca que el cilindro que presiona la cubierta está recubierto de elastómero para una mejor transferencia de fuerza y un menor desgaste de la cubierta trasera.

• Precio: 99,99 €
• Peso: 8,2 kg
• Volante de inercia: 1,7 kg

Tacx Boost

Este Boost lleva al máximo las prestaciones de los rodillos clásicos. Su resistencia magnética cuenta con 10 niveles de ajuste desde su mando remoto capaces de generar una resistencia de hasta 1050 W, más que suficiente para la mayoría de los mortales. Es de agradecer que incluya de serie la peana para elevar la rueda delantera y así pedalear con la bici equilibrada. Entre sus características, destacar que cuenta con un transmisor ANT+ que permite comunicar a nuestro ciclocomputador los datos de nuestro entrenamiento. De serie viene configurado para ser usado en bicis con cierres rápidos convencionales aunque Tacx dispone de adaptadores para poder utilizarlo con bicis con ejes pasantes.

• PVP: 249,99 €
• Peso: 8,5 kg
• Volante de inercia: 1,6 kg
• Dimensiones: 675 mm x 650 mm x 410 mm (564x410x245 plegado)

Elite Qubo Fluid

Elite es otra de las marcas estandarte en lo que a rodillos se refiere. Este Qubo es la máxima expresión de sus rodillos convencionales siendo los primeros que recubrieron el cilindro que apoya en la rueda con un elastómero para lograr reducir el ruido provocado por su uso y disminuir el desgaste de las cubiertas. Este Qubo Fluid cuenta con una resistencia de tipo hidráulica que no es ajustable de forma manual sino que el rodillo va aumentando la resistencia que ofrece según aumentamos la fuerza y velocidad con la que pedaleamos hasta un máximo de 540 W. Elite incluye con este rodillo el transmisor Misuro B+ que emite los datos de velocidad, potencia, etc para poder grabar nuestro entrenamiento en el ciclocomputador o poder utilizar, aunque sin las capacidades de simulación, las aplicaciones de ciclismo virtual. Destaca el diseño de su estructura en la que el contacto con el rodillo depende del peso del ciclista, logrando mejorar la sensación de pedaleo.

• PVP: 237 €
• Peso: 11,93 kg
• Dimensiones: 57,91x21,08x67,82 cm

Rodillos para ciclismo de Transmisión directa

Elite Turno

Uno de los pioneros entre los rodillos de montaje directo sigue teniendo un hueco en el catálogo de la marca italiana. Lo único que le diferencia de sus hermanos mayores es el no contar con ajuste interactivo de su resistencia hidráulica que, al igual que ocurre en el Qubo, va creciendo según aumentamos la velocidad de pedaleo hasta un límite de 700 W. Al igual que este, también incluye el transmisor Misuro B+ para poder contar con los datos del entrenamiento. Por supuesto, cuenta con adaptadores para poder usar distintos tipos de cierre.

• PVP: 446 €
• Peso: 17 kg
• Dimensiones: 71x57x51 cm

Rodillos ciclistas inteligentes 

Zwift Hub One

Zwift ha creó hace un par de años su rodillo Hub con la intención de proporcionar la mejor experiencia posible en su popular aplicación de ciclismo virtual gracias a un firmware específicamente ajustado para lograr el comportamiento más realista. Ahora, mejora aquel primer rodillo con un modelo que prescinde del cambio de marchas de la propia bici para sustituirlo por un cambio electrónico virtual más rápido y eficiente. Aparte cuenta con unas prestaciones al límite, siendo capaz de generar hasta 1.800 W y simular pendientes de hasta un 16%. a la vez que logra una pedalada realista con su gran volante de inercia de 4,6 kg.

• PVP: 599 €
• Peso: 15 kg
• Volante de inercia: 4,7 kg
• Dimensiones: 49,7x61,2x46,1 cm

Tacx Neo 2T

El rodillo perfecto, así, sin medias tintas. Este modelo de Tacx es el sueño húmedo de quienes hacen un uso intensivo de las aplicaciones de ciclismo virtual. Estable, rapidez de reacciones a los cambios de pendiente, incluso la capacidad de vibrar para simular cuando se pedalea por terreno bacheado o ser el único modelo del mercado capaz de simular la inercia en los descensos. Su resistencia es capaz de generar una salida de hasta 2.200 W pudiendo emular pendientes de hasta el 25%. Es curioso su sistema de funcionamiento que no deja la inercia en manos del habitual gran volante de inercia sino que es responsabilidad de sus 32 potentes imanes de neodimio que mantienen el impulso de la rueda.

• PVP: 1.299 €
• Peso: 21,5 kg
• Dimensiones: 575x750x550 mm

OREKA 5

El OREKA O5 se trata de uno de los rodillos direct drive más realista del mercado, ofrece libertad de movimiento con posibilidad de configurar el nivel del mismo de forma sencilla con un simple inflador. Es fácil de instalarlo y no necesita configuración ni calibrado, además de no necesitar estar conectado a la corriente eléctrica. Una opción a tener en cuenta para aquellos que pasan largas jornadas de entrenamiento sobre el rodillo, para los amantes de los e-sports o simplemente para usarlo durante el calentamiento de cualquier competición. 

• PVP: 1.130 €
• Peso: 30 kg
• Superficie Ocupada (largo x ancho): 133 × 90 cm

Wahoo Kickr

Los rodillos de Wahoo son, por su calidad/precio unos de los preferidos por quienes entrenan de forma habitual en plataformas de ciclismo virtual. Su estructura cuenta con un cierto movimiento lateral para resultar más realista cuando nos ponemos de pie, integra un medidor de potencia tremendamente preciso y resulta tremendamente silencioso. Cuenta con un gran volante de inercia de 7,2 kg y una estructura robusta y tremendamente estable. Es capaz de aportar una resistencia de hasta 2.200 W y simular pendientes hasta de un 20%. Aparte, Wahoo cuenta con una amplia gama de accesorios que permiten mejorar aún más la experiencia con este rodillo como la unidad Kickr Climb que eleva la parte frontal de la bici cuando rodamos cuesta arriba o el ventilador específico que varía su intensidad en función de nuestro nivel de esfuerzo al estar conectado a nuestra cinta de pulsómetro.

• PVP: 1.299 €
• Peso: 22 kg
• Volante de inercia: 7,2 kg
• Dimensiones: 51 cm x 71 cm x 43 cm

Rodillos de rulos

Tacx Antares

Un clásico de los rodillos de tres rulos. Facil de almacenar, robusto, con rodamientos de buena calidad. Destaca la forma ligeramente cóncava de sus rulos que hace que la bici tienda a permanecer en el centro haciendo un poco más sencillo su uso, sobre todo para aquellos que comienzan con este tipo de rodillos.

• PVP: 179 €
• Peso: 7,7 kg
• Dimensiones: 1350x470x135 mm (800x470x135 mm plegado)

Elite Nero

A menudo se asocia los rodillos de 3 rulos con modelos sencillos que sólo sirven poco menos que para calentar. Sin embargo, Elite cuenta desde hace tiempo con un modelo que incluye una pequeña unidad de resistencia controlada de forma electrónica que lo convierte en rodillo interactivo. Por el reducido tamaño de su unidad de resistencia y volantes de inercia situados en los rulos traseros, además de por temas de seguridad la resistencia máxima que ofrece es de 830 W, simulando sólo hasta un 7% de pendiente, unas cifras que, por otra parte, resultan más que suficientes para la mayoría de usuarios. Cuenta además con el sistema flotante introducido hace años por Elite de forma que oscila delante y detrás para que ponernos de pie no resulte la maniobra delicada que habitualmente es en este tipo de rodillos y rodillos parabólicos para que la bici permanezca en el centro.

• PVP: 683 €