Dónde ver la Milán-San Remo 2023: horarios y favoritos
La Classicissima, el primero de los 5 monumentos, la carrera de las altísimas velocidades y un kilometraje único en nuestros días llega el 18 de marzo con una edición 2023 tremendamente emocionante con una amplia nómina de candidatos a alzar los brazos en la Vía Roma de San Remo en lo que es la clásica más fácil de disputar pero la más complicada de rematar.
Milan-San Remo, ciclismo con sabor de antaño
Si hay una carrera que mantiene el sabor de aquel ciclismo en blanco y negro, que recoge la pasión de un país donde el ciclismo desata emociones y que ha coronado a lo largo de la historia a algunos de los más grandes corredores contra toda lógica que pueda presuponerse a la vista de su recorrido, esa es la Milán-San Remo.
Una carrera difícil de comprender para el aficionado ocasional y que, sin embargo, es uno de los momentos más esperados de cada temporada para el entendido. Horas de ver rodar a un pelotón a altísima velocidad sin que aparentemente ocurra nada, para ir madurando las piernas a fuego lento, para llegar a uno de los desenlaces más brutales que se pueden vivir en el ciclismo en una receta que inalterada desde hace décadas.
Elenco heterogéneo: Favoritos para la Milán-San Remo 2023
RECOMENDADO
Si una carrera ofrece un final incierto y está abierta a un numero de ciclistas bastante más amplio que el de la habitual lista de favoritos esa es la Milán-San Remo. Una circunstancia que viene definida por el ritmo de auténtica locura al que se pedalea durante la última hora de carrera, como si el de las 5 anteriores no hubiera sido altísimo, y que únicamente permite disparar una bala. Aquel que acierta con la suya es quien acaba llevándose el gato al agua.
Pese a que el perfil más habitual de ganador en Milán-San Remo es el de un sprinter polivalente capaz de pasar bien las ascensiones y de buscarse la vida en grupos reducidos, históricamente hemos visto todo tipo de ganadores en esta carrera, desde sprinters puros como Petacchi o Cipollini, hasta escaladores como el espectáculo que nos brindó Vincenzo Nibali en 2018.
De hecho, en esta edición 2023 es inevitable incluir como favorito a Tadej Pogacar tras el descomunal inicio de temporada que se ha marcado el esloveno, venciendo a placer en Clásica de Jaen Paraíso Interior, Vuelta a Andalucía y, sobre todo, el poderío mostrado la semana pasada en París-Niza donde además de vencer, destrozó las moral de sus rivales, incluido el vigente ganador del Tour Jonas Vingegaard. Piernas para jugar sus bazas en el Poggio de San Remo tiene, equipo para endurecer la carrera en el tramo previo también, ni que decir de la técnica para jugarse el todo por el todo en la bajada final hacia San Remo.
Quizás su mayor handicap a superar sea la escasa dureza de la subida al Poggio que resta efectividad, como se vio en la edición del año pasado, a su presumible movimiento en en esta subida frente a ciclistas de potencia bruta. Aunque todos sabemos que apenas hacen falta un par de segundos de ventaja en la cima para poder llegar en solitario a la Vía Roma.
Hablando del descenso hacia San Remo, es obvio que hay que incluir al que probablemente sea el mejor bajador del pelotón en estos momentos además de vigente vencedor de la carrera como es Matej Mohoric, quien ya utilizó su bici con tija telescópica en Strade Bianche y que, sin duda, tratará de destacarse en otra espeluznante bajada como la que nos regaló el año pasado.
Hablando de bajadores y ciclistas en forma, baja sensible en INEOS Grenadiers que se queda sin Tom Pidcock para esta carrera tras la caída que sufrío en la última etapa de Tireno-Adriático y que le obligó a abandonar la carrera. Esta misma mañana, el equipo publicaba una nota informando que Pidcock había mostrado síntomas de conmoción cerebral por lo que descartaban su participación en Milán-San Remo como precaución para no comprometer su salud. Por tanto las opciones de los británicos pasarán por que hombres como Kiatkowsky, Ganna o Viviani tengan un día inspirado.
También potente es la escuadra que presenta, no podía ser menos, Jumbo-Visma donde un Wout Van Aert, todavía lejos de su mejor forma tras únicamente haber competido en Tirreno-Adriático, será una vez más la baza del equipo. No olvidemos que el belga ya sabe lo que es vencer en las calles de San Remo, triunfo que logró en 2020.
Al igual que ocurre con Van Aert, otro con el que siempre hay que contar en los pronósticos es con Mathieu Van der Poel, quien tratará de mejorar el podio del año pasado pese a que, según sus propias declaraciones y lo mostrado en el transcurso de Tirreno-Adriático, llegue a este primer monumento bastante corto de forma
Otro que ya sabe lo que es ganar en esta temporada y es capaz de pasar el Poggio con los mejores es el danés de Trek-Segafredo Mads Pedersen. En su caso la baza pasa por resistir lo máximo posible hasta la misma Vía Roma, para tratar de imponer su punta de velocidad en un sprint reducido, una situación que, por otra parte, tampoco es extraña en los desenlaces de Milán-San Remo.
Por último, otro de los corredores que podría utilizar esta misma táctica y apostar por un desenlace al sprint sería el eritreo Biniam Girmay, pese a que, salvo su victoria en la primera etapa de la Volta a la Comunitat Valenciana, no conssiguió acercarse a la victoria en la Tirreno-Adriático donde fue claramente superado en las volatas disputadas.
300 kilómetros para madurar a fuego lento: Recorrido Milán-San Remo 2023
Novedades en este 2023 en el trazado de una prueba que mantiene su menú prácticamente inalterado desde hace décadas. Pero no os asustéis, los ciclistas seguirán viendo el 300 kilómetros en sus ciclocomputadores al final de la carrera y el recorrido sigue siendo ese tributo a la velocidad que siempre ha sido.
El cambio que se introduce en esta edición es el cambio del lugar de salida desde el centro de Milán hasta la localidad periférica de Abbiategrasso, meramente por motivos logísticos evitando los inconvenientes de salir desde el centro de una ciudad tan grande como Milán y que suponía añadir cerca de una veintena de kilómetros entre raíles de tranvía y asfalto en mal estado a la ya ingente kilometrada que tenían que afrontar los ciclistas.
El resto del menú, continúa siendo el mismo, una parte inicial que busca la costa a través del Passo del Turchino que tras su larga bajada dejará a los ciclistas en las bellas costas de Liguria en un recorrido precioso, al menos hasta que, a falta de 60 kilómetros para la conclusión, la carretera supera los Capos Mele, Cervo y Berta, donde el ritmo se desata definitivamente como preludio de la ascensión a Cipressa,lugar donde, en sus más de 5 kilómetros, se separa el grano de la paja.
Desde ahí, únicamente los elegidos podrán estar delante en el Poggio, una subida que incluso cualquier cicloturista sube con el plato grande engranado teniendo incluso que mimar el trazado de sus cerradas curvas por la velocidad a la que se desarrolla. Colocación perfecta y saber esperar el momento preciso es la única opción de quienes traten de hacer su apuesta en este punto.
Tras coronar, uno de los descensos más técnicos de cuantos se afrontan en competición, conduce de forma fugaz a los ciclistas a las calles de San Remo en unos últimos dos kilómetros en los que un ataque sorpresa que nadie decide cerrar en el momento también ha sido una forma de vencer en esta prueba que siempre nos ofrece un desenlace digno de la mejor película de acción.
Dónde ver la Milán-San Remo 2023
Sólo para los muy frikis del ciclismo, el canal Eurosport ofrecerá la cobertura completa de la prueba desde la salida en las proximidades de Milán. Por tanto, quienes optéis por esta opción, olvidaros de montar en bici el próximo sábado 18 de marzo ya que tendréis que estar pegados a la televisión desde las 9:45 de la mañana hasta las 17:45 cuando está previsto que finalice la retransmisión que incluye el primer programa en este 2023 de La Montonera, el postcarrera en el que los comentaristas y expertos del canal analizarán pormenorizadamente el desenlace de la misma.