5 razones para NO comprar una Mountain Bike de doble suspensión

Tranquilo, no te enfades si tienes una mountain bike doble suspensión o si estás pensando comprarte una. Este artículo no intenta decirte que estás equivocado, porque tus razones tendrás. Sino que trata de reforzar a aquel ciclista que ha decidido no comprar una mountain bike doble suspensión. Es decir, hoy escribimos para aquellos que tenéis claro, muy claro, que queréis una rígida, para cargaros de argumentos en vuestra idea. Porque no decantarse por una mountain bike doble suspensión, sino por una hardtail, también tiene sus ventajas, ya verás.

Por qué comprar una rígida y no una mountain bike doble suspensión

1. La primera razón es económica. Vas a ahorrar dinero. Pero antes y durante, porque en el antes, descubrirás que el precio de una rígida con respecto a una mountain bike doble suspensión es por norma menor. Es lógico, pensarás, porque lo es: añadir sistemas de balanceo, una suspensión trasera con todo su ajuste en puntos de giro, bieletas y soldado al cuadro, conlleva un gasto, claro está. Pues eso es sólo el principio: el mantenimiento de una rígida también será menor al de una mountain bike doble suspensión, por la misma razón: menos mantenimiento de suspensiones, menos puntos de engrase, menos piezas móviles en el cuadro. Por lo tanto, el bolsillo, cómo no, es la primera razón para no decantarse por una mountain bike doble suspensión.
   
   
   
   
2. En segundo lugar, para los fanáticos del peso, ten en cuenta que una rígida pesará bastante menos que una mountain bike doble suspensión. Hablamos de una comparación en base a un mismo presupuesto, no vale hacer trampas. Es decir, con los mismos 2000 euros que te vas a gastar en una bici, por ejemplo, te puedes comprar un bicicletón rígido, pero si los gastas en una mountain bike doble suspensión tendrás que bajar rango y elegir una más pesada, añadiendo que ya de base era mucho más probable que fuese más pesada.
   
   
   
   
3. ¿Sabéis eso de que los buenos fotógrafos usan sólo objetivos fijos? Sí, porque el zoom hace que tomes la foto desde el otro lado de la ciudad, pero el objetivo fijo dice que si la foto aparece de cerca, es que el fotógrafo estaba realmente cerca. Pues algo así sucede con las rígidas para bajar: si usas una rígida y bajas como una bala, es que bajas bien, es que técnicamente eres muy bueno en el descenso. Porque la rígida te obligará a trabajar y mejorar tu técnica de bajada si quieres ir más rápido, ya que lo que no te absorbe la suspensión trasera que no llevas y sí monta una mountain bike doble suspensión, debes suplirlo con inteligencia, equilibrio, baile. Ver bajar a un profesional con una mountain bike rígida es un auténtico espectáculo de técnica y concentración.
   
   
   
   
4. Y claro, para subir, llanear o en falso llano para qué hablar, aquí la rígida devora a una mountain bike doble suspensión. Toda la potencia de la pedalada va directa al desarrollo, el cuadro no alterará nada estos valores. En una mountain bike doble suspensión, la acción mayor o menor de la trasera hará que pierdas vatios en ese balanceo, en el camelleo de la bici.
   
   
   
   
5. Si estás empezando, o te consideras un ciclista nivel medio, es más idónea una rígida. Es más sencillo acostumbrarte a esta y explotarla a fondo que comprar una mountain bike rígida y no sacarle todo el jugo.
   
   

La versatilidad de la que carece una mountain bike doble suspensión

Insistimos: no queremos que cambies de opinión, no es nuestra intención, sino reforzar más bien los puntos fuertes de una mountain bike rígida. Y ahí, hay que reconocer que una mountain bike doble suspensión es mucho menos versátil, es mucho mejor para bajar, pero poco más, en el resto de terrenos, de circunstancias, de perfiles de usuarios ciclistas, una hardtail sale mejor parada. Y ahora, compra la mountain bike que tú quieras.