La muerte súbita en el ciclismo, ¿hay que preocuparse?
La muerte súbita, especialmente desde hace unos años, se ha convertido en una de las grandes preocupaciones de cualquier deportistas profesional, incluyendo como es obvia a los ciclistas. Los casos más sonados, por el altavoz del mundo del fútbol, fueron los del espanyolista Dani Jarque, el bético Miki Roqué y el sevillista Dani Jarque, pero muchos más deportistas han fallecido a causa de una parada cardíaca repentina. No es posible evitar el riesgo en toda su amplitud, pero sí podemos adoptar ciertos métodos de prevención que reduzcan los riesgos, conociendo sus causas habituales.
Métodos de prevención de la muerte súbita
Las causas de la muerte súbita pueden ser varias, pero en la mayoría de los casos es una anomalía cardíaca existente con anterioridad, que no ha sido detectada a tiempo. Es por ello que la mejor forma de prevenir un desenlace fatídico es acudir a un especialista y realizar con él una prueba de esfuerzo. En la mayoría de los casos permitirá detectar cualquier anomalía cardíaca, sea la que sea, y actuar en función de los resultados. Otro método de prevención adecuado es ir en nuestra bici siempre equipados con un pulsómetro, que nos permita medir los esfuerzos y no entrar en zonas de riesgo cardíaco por llevar nuestro corazón demasiado al límite.
Hay que tener en cuenta igualmente que se trata de un riesgo menor, que afecta a entre 1 y 3 jóvenes deportistas por cada 100.000. El deporte es salud, eso es cierto, no debemos coger miedo a salir en nuestra bici. Pero sabiendo que, como afirma un estudio italiano, la práctica deportiva de alto nivel eleva los riesgos de sufrir una muerte súbita hasta 2,5 veces toda precaución es poca. Una prueba de esfuerzo, el pulsómetro siempre a mano y medir siempre nuestros esfuerzos para no elevar los riesgos, y poder seguir disfrutando de la vida como amantes del ciclismo.