El pelotón se planta por la nieve y se monta el lío en la O Gran Camiño
Durísimo debut de Jonas Vingegaard en la presente temporada en una jornada dantesca a causa de la nieve que ha acabado siendo cancelada tras el plantón por parte de los corredores. Una vez más resurge la polémica acerca de cuándo se consideran condiciones extremas y si era posible competir o no en esas condiciones.
La nieve, protagonista del debut de Jonas Vingegaard en la primera etapa de O Gran Camiño
De nuevo, las condiciones meteorológicas desatan la polémica en el el mundo del ciclismo y ponen en un brete a la organización de una prueba ciclista. En esta ocasión, la damnificada ha sido la joven vuelta O Gran Camiño que hoy arrancaba su segunda edición, atrayendo la atención por ser el lugar elegido para comenzar la temporada por el vigente vencedor del Tour de Francia Jonas Vingegaard.
Ya en la jornada de ayer las previsiones apuntaban al importante bajón de las temperaturas debido a una entrada de viento norte que, además, colocaba la cota de nieve en cifras bajas. Sin embargo, la jornada amanecía sin precipitaciones en la primera etapa, de 188 kilómetros que tendría que unir Lugo con Sarria.
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Sin embargo, poco a poco las precipitaciones fueron haciendo acto de presencia según la carrera avanzaba hacia el interior de la quebrada geografía gallega, ofreciéndonos imágenes de ciclistas ateridos pese a hacer uso de todo el arsenal de prendas técnicas con que las escuadras cuentan hoy en día.
Parecía en todo caso, que la etapa se iba a desarrollar con normalidad, pudiendo los ciclistas incluso disfrutar de algunos momentos de sol que, pese a todo, no conseguían aplacar las gélidas temperaturas reinantes.
A poco más de 20 kilómetros de la conclusión, volvía a arreciar la nieve, esta vez de forma copiosa, hasta llegar a un punto en que en cabeza del pelotón, los ciclistas decidían parar la carrera de motu propio. Mientras tanto, por delante, los tres componentes de la fuga del día: Sebastian Schönberger, Vicente Hernaiz y Gianni Moscon continuaban su camino hacia meta ajenos a lo que se fraguaba por detrás. Finalmente no le quedaba más remedio a los organizadores que detener la prueba oficialmente ante la negativa en el seno del pelotón a proseguir, desatando de nuevo la polémica sobre si las condiciones eran adecuadas o no para proseguir.
Especialmente irónico es que, en el momento que los organizadores decidieron por fin parar a los ciclistas de cabeza, cesaba de nevar y el sol hacía su aparición.
Esta cancelación sucede apenas unos días después de que en la tercera etapa de la Vuelta a Andalucía – Ruta del Sol se vivieran situaciones de auténtico peligro a causa del fortísimo viento reinante aquel día y que, incluso, llegó a sacar de la carretera a algunos ciclistas mientras algunos corredores reclamaban de forma airada, nunca mejor dicho, a la organización que cancelara la jornada. En aquella ocasión no hubo ni parón ni suspensión por lo que el día finalizó normalmente, con la victoria de Tim Wellens.
¿Qué opináis vosotros, ha sido correcta la decisión de parar la carrera y el plantón de los corredores? Dejános tu opinión en nuestras redes sociales.