Pinarello añade dos nuevos modelos a su catálogo
La firma italiana reestructura su colección añadiendo las series F y X como segundo escalón de su gama tras las espectaculares Dogma, en sustitución de la Prince y París que desaparecen de su catálogo. Ambas bicis se crean con enfoques diferentes, puramente deportivo la primera y con una geometría asequible para todos los públicos aunque manteniendo un gran nivel de eficiencia en el caso de la X
Pinarello F y X, renovarse o morir
Pinarello ha decidido dar un lavado de cara a su gama de carretera actuando sobre los modelos más asequibles a la mayoría de usuarios, el segundo escalón de la gama que, al fin y al cabo, son las bicis que más habitualmente acabamos viendo en la carretera al ser un poco más económicas que la superexclusiva Dogma F que ocupa el tope de gama, la misma bici que emplean los ciclistas de INEOS-Grenadiers.
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Hasta ahora, en ese segundo nivel aparecía un nombre mítico de la marca como es el modelo Prince, que Pinarello retomó hace unos años a fin de ofrecer similares características a las de la Dogma pero a un precio más asequible. Vuelve a desaparecer la Prince del catálogo siendo sustituida por un nuevo modelo que, es herencia directa de su hermana mayor en la gama.
Esta nueva serie de bicicletas pasa a denominarse con un escueto Pinarello F y su enfoque es claramente deportivo, habiendo trabajado en mejorar las cualidades de la Prince para aproximarse al máximo a la Dogma.
Pinarello elaborará tres versiones de esta gama F: F9, F7 y F5. En las dos primeras se emplea carbono Toray T900, mientras que la F5 utiliza un más asequible T700. Todas ellas, acompañadas, por supuesto, por componentes Most. Como es tradicional en las bicis Pinarello que se ofertan en nuestro país, Pinarello España realiza sus propios montajes. A falta de confirmación, únicamente estará disponible el cuadro F9, en colores negro, blanco o rojo sin que se hayan detallado aún los montajes disponibles.
Por supuesto, Pinarello mantiene en estas bicis las líneas maestras de diseño de la Dogma como los perfiles aerodinámicos de sus tubos o las secciones asimétricas de los tubos del triángulo trasero entre los de la izquierda y los de la derecha para así lograr una respuesta óptima las fuerzas ejercidas al pedalear. Como curiosidad, tanto esta, como la X, optan por lo que parece estar convirtíendose en tendencia, al trasladar la batería, en caso de usar grupo Di2, de la tija de sillín a la zona del pedalier con un alojamiento accesible a través de una tapa bajo el mismo.
Gran fondo en estado puro
Aunque sea un concepto de bici que ha ido cayendo en desuso dentro de las gamas merced al crecimiento de las bicis gravel, las bicicletas de estilo endurance o gran fondo siguen siendo la opción más adecuada para la inmensa mayoría de ciclistas que pedalean por las carreteras. Bicicletas con una conducción y un posicionamiento del ciclista mucho más amables, además de contar con un laminado de fibras orientado a lograr la máxima comodidad con una mínima pérdida de prestaciones respecto a los modelos de competición.
Pinarello apuesta por este concepto con su serie X, marcada principalmente por una geometría más relajada, con una dirección más alta y un alcance más corto además de mayor longitud entre ejes para conseguir una conducción más estable. Al contrario que otros modelos gran fondo del mercado, aquí no hay guiños hacia el gravel, siendo el paso de rueda máximo de 32 milimetros.
El carbono elegido para fabricar el cuadro de esta serie X es el Toray T600, compartido por los dos modelos que comercializará Pinarello: X3 y X1, montados con Shimano 105 o SRAM Rival el primero y 105 mecánico el segundo. Por lo demás, las líneas de diseño y estética de esta serie X no difieren de las de la deportiva F, siendo prácticamente indistinguibles de un primer vistazo si no nos fijamos en los logos de la bicicleta. Al igual que ocurre con su hermana F, Pinarello España aún no detalla los montajes que existirán de esta bici, que estará disponible en colores negro o rojo.