Comprar una bici por piezas o completa ¿qué es mejor?
Aunque la cada vez mayor integración de componentes ha hecho que caiga en desuso, comprar una bici por piezas es la forma de tener la bici de nuestros sueños, con exactamente los componentes que elijamos. Sin embargo, las marcas ofrecen montajes solventes con los que tener una bici sin complicaciones. Te contamos las ventajas e inconvenientes de cada una de las opciones.
¿Comprar una bici por piezas o completa?
Quienes lleven un buen montón de años en esto del ciclismo recordarán una época en la que, cuando querías una bici de gama alta, la forma habitual de conseguirla era adquirir el cuadro suelto, los componentes por otro lado, elegir nuestro grupo preferido e incluso montar unas ruedas a medida, de forma artesanal, con los bujes, radios y llantas que más se adecuaran a lo que buscábamos.
Poco a poco, las marcas fueron ofreciendo opciones más completas de montajes en sus catálogos, reduciendo las posibilidades de elección y haciendo que esta práctica de montarse una bici a medida haya quedado prácticamente limitada a quienes optan por cuadros fabricados a medida o quienes busque un montaje con componentes premium que es imposible encontrar en los modelos de serie.
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Algunas marcas como Trek con su programa Project One u Orbea a través de las opciones de personalización MyO han flexibilizado sus montajes de serie permitiéndonos no sólo personalizar la decoración de nuestra nueva bici sino elegir componentes y ruedas entre una oferta limitada a las marcas colaboradoras con la marca en cuestión.
También tenemos que tener en cuenta que en las bicis actuales, algunos componentes como tija y conjunto de manillar y potencia están específicamente creados para integrarse en la estructura aerodinámica de la bici por lo que no es posible utilizar otros que no sean los suyos, algo que también reduce la capacidad de elección.
Elegir una bicicleta de serie
Si no nos queremos complicarnos la vida a la hora de adquirir nuestra bici nueva, lo más sencillo es elegir uno de los modelos de serie que ofrecen las marcas. Hoy en día, las gamas y opciones de montaje son bastante amplias y suelen contar con un buen escalado de calidades que permite encontrar con facilidad el que más se ajuste a nuestro presupuesto y uso previsto.
Sin embargo, en muchas ocasiones, la necesidad de ceñirse a la disponibilidad de sus proveedores y de ajustar el precio de los montajes obliga a las marcas a recurrir a algunos componentes genéricos que quedan claramente por debajo del nivel de la bici. Esto suele ser especialmente patente en las ruedas elegidas en los montajes de gama media y entrada, el principal punto donde las marcas pueden abaratar y donde, a menudo, encontramos modelos muy básicos.
De todas formas, como regla general, adquirir una bici completa continúa siendo una forma más económica de tener una bici nueva salvo para aquellos capaces de bucear hasta los últimos entresijos de internet para encontrar las mejores ofertas de cada uno de los elementos que van a componer su futura bici.
Montaje por piezas
En la actualidad, la opción de montarse una bici por piezas sólo suele ser utilizadas por quienes buscan un montaje exclusivo y completamente a su gusto como la ligerísima Orbea Oiz que nos montamos hace unas semanas en Brujula Bike
La mayoría de las marcas siguen ofreciendo por separado sus kits de cuadros tope de gama que, además del cuadro en sí, suelen incluir horquilla, tija y conjunto manillar/potencia que suelen ser específicos.
Evidentemente, adquirir una bici por piezas nos obliga a contar con un taller de confianza que la monte adecuadamente, al menos, los rodamientos del pedalier que, con los habituales sistemas prensados, requieren de una herramienta específica de la que no solemos disponer en nuestro taller casero si somos amantes de la mecánica.
Y es que, el montaje de las bicis actuales, con todos los cables guiados por el interior de extremo a extremo, cuenta con una cierta complejidad que lo aleja del alcance de muchos usuarios, aunque el proceso se simplifique si utilizamos un grupo inalámbrico como los SRAM eTap AXS o los nuevos Shimano Di2 que reducen el cableado a la unión de ambos desviadores y la batería.
Recurrir al montaje por piezas también puede ser una buena opción si en nuestra bicicleta actual ya contamos con un buen elenco de componentes y queremos actualizarnos a un cuadro con mejores prestaciones. En este caso, el principal punto crítico a tener en cuenta es la compatibilidad de nuestras bielas con el sistema de pedalier del nuevo cuadro, así como la medida de la potencia con algunas marcas utilizando un diámetro de 1’’ 1/4 en vez del habitual 1’’ 1/8.
El montaje por piezas, a menudo, suele salir más caro que uno de serie. Evidentemente, al adquirir por separado los diferentes elementos nunca podremos hacerlo al precio que las marcas obtienen esos mismos componentes al comprar directamente al fabricante y en grandes volúmenes.
Además, quien elige un montaje por piezas suele buscar componentes que se salen de lo habitual y, en algunos casos, de esas marcas elitistas que a muchos nos vienen a la mente para lograr una bici totalmente exclusiva.
Y vosotros, ¿cómo preferís que sea vuestra bici nueva? ¿De serie o por piezas?