Por qué son tan caras las mountain bike
Seguro que te lo han dicho: "tu mountain bike vale lo mismo que un coche". Pero, ¿de verdad es esto cierto, o no es más que una frase hecha carente de sentido?
La crítica: por qué una mountain bike es tan cara
Si ya ruedas a cierto nivel y has tratado de buscar una mountain bike competente, o si solo eres un aficionado curioso, sabrás el coste de una mountain bike de nivel, montada con buenos componentes. Ante esta realidad, siempre está la sugestión y la duda: con ese dinero podrías comprarte otra cosa, incluso un coche.
Esta es una verdad a medias. No se puede comparar una mountain bike de primer nivel, de competición pura de los mejores ciclistas, con un coche de segunda mano y baja gama. La crítica no admite esa simplificación.
En primer lugar, el cuadro de una mountain bike es una obra de diseño y calidad. Es diseño porque tiene sentido: se estudia la geometría y se avanza en mejorarla día a día; y es calidad porque se fabrican con la certeza de que los materiales y procesos de fabricación aseguran una gran durabilidad.
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Pero vamos más allá: todo esto se hace con una máxima siempre en mente, que es conseguir la mejor resistencia posible, la mayor durabilidad, pero con el menor peso. Cuadros de 4kg que soportan una fuerza tremenda.
Estamos hablando de innovación, y la innovación hay que pagarla porque supone el trabajo de cientos de miles de personas durante cientos de miles de horas. Es una inversión que los fabricantes planifican recuperar progresivamente con la venta de esas mountain bike.
Y por supuesto, está la economía de escala, la construcción de un producto en serie. Una mountain bike no es un coche. Sí que hay que decir que en España, por ejemplo y según AMBE, se venden algo más de 1.100.000 de bicis al año, de las que en torno al 45% son mountain bike; y que según la DGT se venden más de 1.200.000 coches al año. Cifras muy similares que se deben relativizar debido al coste medio de una bici nueva y de un coche nuevo: el precio medio de una bici está en los 1100 euros; y de un coche en los casi 17000 euros (un coste que durante su vida útil supera los 44000 euros).
Esta diferencia de inversiones relativiza la posibilidad de beneficio de los fabricantes y, por lo tanto, de crecer en escala y poder abaratar los precios de las mountain bike.
Las razones que explican por qué una mountain bike puede parecerte cara
Los detractores de esta afirmación aseguran que no es cierto. Muchos fabricantes lo son incluso de vehículos equivalentes en precio, como motocicletas, que puede parecer que tienen un precio similar al de una bicicleta. Pero ellos mismos se encargan de desmontar este mito, afirmando que las motos que vemos en los concesionarios y tiendas son gamas bajas y media, mientras que las mountain bike con las que se comparan en precio, suelen ser topes de gama.
Aquí nace su segundo argumento: son mountain bike topes de gama y no hay más nada por encima de ellas. Es decir, si llevas el tope de gama de una firma o fabricante de mountain bike, llevas la misma bici que el Campeón del Mundo o del Tour. En resumen, en las mountain bike no hay techo de acceso, puedes llevar la mejor máquina si estás dispuesto a pagarla. Eso no ocurre en ningún otro deporte o sector: no puedes llevar el coche de un piloto de rallyes, ni la moto de un piloto de MotoGP, ni las botas fabricadas exclusivamente y a medida del último Balón de oro. En ciclismo no ocurre esto.
Se podría decir mucho más. Por ejemplo, que cuando pensamos en el precio de las mountain bike no debemos olvidar que en nuestra mente no solo están las nuevas, sino también el coste de las bicis de segunda mano, que ha aumentado considerablemente durante los últimos años. Esto tiene una explicación: hace una década, el mercado de segunda mano albergaba nada más que reliquias, cosas inservibles que la gente acumulaba en un trastero y que se deshacía de ese auténtico hierro por muy poco dinero solamente por ganar espacio.
Hoy en día es muy diferente, multitud de ciclistas cambian de bici anualmente o bianualmente, ya no digamos si compiten a cierto nivel. Así, los precios de las mountain bike de segunda mano también han subido ostensiblemente. De hecho, una famosa página de compra-venta de segunda mano ya apuntaba según sus datos en 2016 que el precio medio de una bicicleta superaba los 1000€ de media en todas sus ventas anuales, y el de una mountain bike (más del 50% de las ventas, es decir de cada dos bicis que se venden en segunda mano, una es mountain bike) casi justo en los 1000€. Seguro que por ese precio no se trata de bicis inútiles e inservibles.
Aun así, si te siguen pareciendo cara una buena mountain bike, puedes buscar y verás que hay precios totalmente desorbitados. Igual te sirve para relativizar y entender que la calidad, si se quiere, hay que pagarla, y es bueno pagarla.