Primeras ruedas 750d, ¿nuevo tamaño estándar para gravel?

El afamado fabricante de bicicletas de titanio Moots presenta un prototipo de su bici de gravel Routt CRDD desarrollado en colaboración con WTB para equiparla con ruedas de 750 con las que la marca busca acercar las capacidades de las bicis de gravel a las de las mountain bike. Si será sólo un experimento o el inicio de un cambio de paradigma en las bicis gravel es algo que sólo el tiempo aclarará.

Moots a la búsqueda de nuevos caminos para el gravel

El SBT GRVL, una prueba de gravel en las montañas de Colorado que se disputó hace unos días fue el escenario elegido por Moots, la conocida firma de bicicletas de titanio, para la puesta de largo de un nuevo proyecto de bici gravel llevado cabo en colaboración con la marca de ruedas y cubiertas WTB.

Un prototipo que cuenta con la llamativa novedad de utilizar una nueva medida de ruedas, 750d, más grandes que las habituales de 700 o las 650b que también suelen utilizarse en algunos modelos de gravel.

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700 es la medida más común al tratarse de la medida tradicional en las bicicletas de carretera en cuyo origen se encuentran las bicis de gravel. Una medida que permite montar cubiertas en las que se combina una gran capacidad de rodadura con una notable asbsorción, sobre todo con el uso de balones mayores de los 700x40c que podríamos considerar como estándar.

Más allá del rendimiento, en el aspecto más salvaje del gravel se suele recurrir a la medida 650b, la misma medida de 27,5’’ empleada en mountain bike y con la que se puede usar cubiertas puras de esta disciplina para llevar el uso de la gravel a terreno puro de montaña.

Ahora, como sucedió en su día en el mundo de la mountain bike, cuando las tradicionales ruedas de 26’’ fueron sustituidas por las de 29’’ y 27,5’’, Moots propone una nueva medida de rueda para gravel, en este caso, aún mayores que las habituales de 700.

La motivación de esta nueva medida de 750 es lograr un comportamiento similar al de las bicis de montaña de 29’’, tanto en capacidad de rodadura como de absorción sin por ello tener que montar gomas de gran balón como ocurre cuando optamos por la medida de 27,5’’. Con llantas de 750 y las cubiertas de 40 que montaba el prototipo de Moots se logra un diámetro efectivo igual al de una rueda de 29’’ con cubiertas de mountain bike.

Al ganar diámetro, el paso sobre las irregularidades del terreno se suaviza al incidir estas sobre el arco de circunferencia mayor de la rueda de una forma más oblicua, todo ello, en teoría, manteniendo una gran capacidad de rodadura como se demuestra en las bicis de XC. En el lado negativo habría que hablar del aumento de peso de unas ruedas de mayor tamaño y la pérdida en manejabilidad que podría suponer pero que, como han hecho las marcas en otras ocasiones, bien se podría resolver modificando de forma adecuada la geometría de las bicis que utilicen esta medida.

De todas formas parece difícil que esta nueva medida pueda desbancar a las ruedas de 700 sobre todo por la compatibilidad que ofrece esta medida con las de carretera y que añade versatilidad a las bicis de gravel para ser usadas sobre asfalto. Prueba de ello es que el uso de 650b, que en principio prometía ser la panacea al permitir mayor absorción pero con un diámetro equivalente a las ruedas de 700, tiene un uso claramente minoritario. En todo caso habrá que esperar a ver si otros fabricantes deciden considerar esta nueva medida.