Probamos la Orbea Alma 2025 ¿funciona realmente el X-Fader?

Orbea acaba de renovar su gama completa de rígidas de competición y pocas veces una rígida ha venido envuelta en tanto misterio. En el pasado Campeonato del Mundo en Andorra, algunos corredores del equipo oficial ya disputaron el Short Track con esta bici con parte de su cuadro oculto. Ahora, tras su presentación, hemos tenido la oportunidad de probar la nueva Orbea Alma 2025 durante semanas y te contamos nuestra experiencia con ella.

La nueva Orbea Alma 2025 es más capaz que nunca

Con este nuevo modelo de Alma Orbea ha dejado claro que en absoluto ha detenido  la innovación y la búsqueda de la mejora de prestaciones para sus XCO rígidas. A pesar de que la mayor cuota de protagonismo se la llevan las dobles suspensiones, las rígidas siguen teniendo argumentos para ser las elegidas, tanto por los corredores profesionales en determinados circuitos, como por una gran parte de usuarios.

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En la nueva Orbea Alma 2025, Orbea ha querido dar un salto en las prestaciones de un modelo que ya ofrecía un excelente resultado.

Había varias premisas para ello. Una de ellas era la adopción de un tubo vertical para uso de tija de 31,6mm, y con ello maximizar compatibilidad con tijas telescópicas. Pero para que esto no implicara una merma en la comodidad, restando capacidad en la filtración de irregularidades, han estudiado a fondo diferentes opciones de diseño, llegando al llamativo diseño final, denominado X-Fader que, no sólo no pierde esa capacidad de filtración de impactos de alta frecuencia sino que, a tenor de los ensayos, mejora claramente en este sentido tal como nos explicaron en la presentación, y todo ello manteniendo el nivel de rigidez necesario en una rígida de competición.

Además de este equilibrio entre comodidad y rigidez, se ha dado un paso más allá en la geometría, aumentando las capacidades de la Orbea Alma en bajadas y terrenos técnicos. La adopción de horquilla con recorrido de 110mm es clara prueba de esta búsqueda en el aumento de capacidades.

La geometría de la nueva Orbea Alma 2025 está pensada para asemejarse al máximo a la de su hermana OIZ en la posición de sag (con el rider subido a la bici) y queda con los siguientes números: el ángulo de dirección llega hasta los 67º (1º más lanzado que en la versión previa), el reach aumenta ligeramente hasta los 435mm en talla M, el tubo vertical también aumenta en 1º, hasta los 75,5º. Y también se ha acortado el tubo vertical en todas las tallas, buscando libertad de movimientos y la posibilidad de montar tijas telescópicas de largo recorrido. Otro ejemplo más de hasta qué punto se ha dado prioridad a las capacidades técnicas de una bici rígida que no se conforma solo con la ligereza y rigidez propias de su segmento.

Toda la nueva gama Alma comparte el mismo cuadro y, a pesar de la mayor complejidad de su diseño se queda en una cifra de peso muy razonable de 1080 gramos para el cuadro en talla M completamente pintado.

Programa MyO de Orbea

En la nueva Orbea Alma contamos, por supuesto, con las opciones de personalización que ofrece Orbea con su programa MyO.

Esto se concreta en que, en los 5 modelos que componen la gama, tenemos la opción de elegir entre diferentes opciones en algunos de los componentes de la bici, como la elección de tija telescópica o tradicional, diferentes opciones de manillar o cockpit integrado, ruedas o frenos.

En cuanto a la decoración, existen tres acabados de gama, pero en los tres modelos superiores, tenemos la opción de personalizar los colores del cuadro, los logos e incluso la decoración de las llantas y el cockpit, de manera que hay infinidad de posibilidades para diseñar una bici única.

Orbea Alma M-PRO: máximas prestaciones a precio terrenal

La Orbea Alma M-PRO 2025 es el modelo que hemos podido probar durante semanas de esta nueva versión, y lo cierto es que este montaje tiene todos los argumentos para ser una superventas. Una bici ideal para aquellos que buscan un modelo competitivo del más alto nivel, pero sin un desembolso exagerado.

El cuadro es el mismo en toda la gama, y en el equipamiento de este modelo encontramos una horquilla Rock Shox SID Select con 110mm de recorrido.

La transmisión se confía al que para nosotros es el grupo estrella de Sram por su relación calidad-precio. El Sram GX Eagle AXS de nueva generación tiene un funcionamiento idéntico a los grupos superiores y tan solo paga cierto peaje en la báscula a cambio de una sustancial reducción de precio.

Los frenos Shimano M6100 ofrecen un funcionamiento totalmente fiable, aunque aquí encontramos una de las posibilidades de personalización que nos ofrece el programa MyO de Orbea, ya que en este modelo Alma M-Pro, podemos optar por el montaje de unos XT pagando un suplemento.

En los componentes destaca una de las grandes novedades de la marca propia OC, presentado recientemente. Se trata del cockpit integrado OC Mountain Performance MP10, con un peso anunciado de 265g y unas formas atractivas que contribuyen a mejorar aún más la integración de cables hacia la dirección.

En la tija de sillín tenemos otra de las posibilidades de personalización, ya que en el montaje de gama incluye una tija de carbono, pero nuestra bici de pruebas montaba la, también presentada recientemente, tija telescópica OC Mountain Control MP10, con 100mm de recorrido, ajuste infinitesimal y un peso bastante contenido de 419g.

Otra de las elecciones que puede tener el usuario que adquiera este modelo Alma M-Pro la encontramos en las ruedas.

En el montaje estándar vienen unas ruedas Oquo Mountain Performance MP28PRO con llanta de aluminio, pero está la opción de mejorar la bici con las Mountain Performance MP30TEAM con llanta de carbono de 30mm de anchura interna. Este era el juego que hemos tenido en nuestra unidad de pruebas.

Sobre estas ruedas Oquo se montan neumáticos Pirelli Scorpion XC RC con carcasa reforzada Pro Wall, en anchura de 2,40”.

Y un componente que podría pasar desapercibido pero que también es novedad en esta nueva gama de Orbea es el mando remoto OC Squidlock MP11, cuya principal innovación es que con solo dos palancas controla tanto la tija telescópica como la horquilla.

Probando la nueva Orbea Alma 2025

La verdad es que ya tuvimos ocasión de ver de cerca la nueva gama Alma en la presentación que nos ofreció Orbea en los pasados Campeonatos del Mundo en Andorra. Pero ahora, hemos tenido nuestra unidad de pruebas en casa para exprimirla durante un tiempo y volver a conectarnos con esas sensaciones puras que ofrece una hardtail.

Está claro que lo primero que destaca cuando tenemos a la nueva Alma 2025 delante es el X-Fader, como llaman a esa peculiar forma en la zona del pedalier, y que Orbea se encargó de camuflar en los Campeonatos del Mundo, cuando este modelo hizo su estreno en el Short Track. Sin duda es una forma llamativa y que no va a dejar indiferente a nadie. Como hemos comentado, esta solución atiende a un intento de maximizar la filtración de irregularidades y adoptando, al mismo tiempo, un tubo de sillín de 31,6mm de diámetro interno.

Pero el cuadro tiene más detalles interesantes. Uno de ellos tiene que ver con la posibilidad de montar tijas telescópicas de cierto recorrido incluso en tallas pequeñas (ya vemos que aunque se trate de una rígida Orbea tiene este punto en su lista de prioridades), y se trata de los anclajes para el bidón vertical desmontables, denominados Smart Clips, de modo que si no usamos ese portabidón se pueden quitar las roscas y poner unas tapas de goma y ganar todo el espacio útil interior de tubo vertical. De todas formas, en la mayoría de los casos podremos montar el segundo portabidón sin limitación en la elección de tija.

Como no podía ser de otra manera, la nueva Alma adopta el cableado a través de la dirección y, en este caso con el nuevo cockpit integrado, la entrada de cables queda de lo más discreta y estética.

Por lo demás, el cuadro tiene unas líneas generales que recuerdan a su predecesor, destacando ese tubo superior tan aplanado con su característico pliegue para alinearse con la dirección de los tirantes antes de su encuentro con el tubo de sillín.

Las vainas tienen una considerable sección vertical, en búsqueda de esa rigidez necesaria para transmitir los esfuerzos de la pedalada, y los tirantes, más delgados, van variando su forma a lo largo de su recorrido alternando zonas planas y aristas en búsqueda del equilibrio entre rigidez y comodidad.

En el montaje de la Alma M-Pro llama la atención el cockpit integrado que, aunque es cuestión de gustos, nos parece de los mejor conseguidos estéticamente.

Cuánto pesa la Orbea Alma 2025

Antes de ponerle los pedales cumplimos con el ritual de la báscula y la bici arrojó la cifra de 10,160 kg lista para salir a rodar. Teniendo en cuenta el montaje de tija telescópica, neumáticos de 2,4” con carcasa reforzada y el grupo Sram GX que destaca, entre otras muchas cosas, por su robustez, nos parece una cifra excelente.

Rodando con ella y exprimiendo el X-Fader

Uno de los detalles que nos llamó la atención de entrada es la adopción de bielas de 170mm en talla M. La verdad es que es tendencia y cada vez parecen más demostrados los beneficios de acortar ligeramente las bielas.

Nuestra posición en la Alma resultó ser bastante cómoda. La altura de una horquilla de 110mm de recorrido, unido a que en una rígida el pedalier puede estar más bajo que en una doble suspensión, resulta en que el Stack es algo generoso. Por tanto el manillar no lo encontramos en una posición agresiva, a pesar de la angulación de -20º del cockpit integrado. Es una posición eficiente y de ataque, pero aun eliminando todos los espaciadores no es excesivamente agresiva.

Desde el primer día nos conectamos a esa sensación de agilidad que solo ofrecen las hardtails. En nuestra adaptación fuimos buscando primero pistas en buen estado, donde disfrutamos de un rodar ágil y una sensación de eficiencia que nos hacía subir el ritmo.

En estos momentos ya empezamos a familiarizarnos con el nuevo mando remoto Squidlock. Ambas palancas están en una posición muy cómoda de utilizar y nos adaptamos muy rápido al sistema de bloqueo usando solo la palanca superior. El funcionamiento es muy suave al bloquear, y la palanca se queda en una posición más hacia dentro, para soltarla tan solo hay que volver a pulsar con un poco más de fuerza y vuelve a la posición inicial.
En cada subida repentina se disfruta el hecho de ponernos de pie y apretar sin que se diluya ni un solo vatio por el camino, también en zonas muy lisas o asfalto tendemos instintivamente a ponernos de pie más de lo que lo hacemos en cualquier doble, ya que es una sensación de transmisión de energía que solo ofrece una rígida y realmente engancha.

Cuando entramos en terreno irregular es cuando podemos comprobar los avances conseguidos en cuanto a filtración de impactos. Lo cierto es que no notamos los impactos secos que recordamos de las rígidas de hace años pero, aunque es difícil distinguir qué parte del mérito otorgarle al X-Fader y que parte se lleva el hecho de montar neumáticos de 2,4” y llantas con 30mm de anchura interna, nos atrevemos a afirmar que el X-Fader cumple con esa función de filtración de impactos. Lo cierto es que, en conjunto, la nueva Orbea Alma ofrece un tacto dócil que nos permite mantener la velocidad en terrenos accidentados.

En descensos por pistas rápidas nos hemos encontrado bajando con una gran seguridad gracias a esa geometría que le da a la Alma 2025 una estabilidad sorprendente. Y es que un ángulo de dirección de 67º, una longitud generosa y esa posición natural que ya hemos mencionado hacen que sintamos todo bajo control. Además la horquilla, con su generoso recorrido, absorbe fielmente cada irregularidad y nuestras manos están descansadas aun en las bajadas más largas. Aquí haremos mención especial a los puños Ergon GXR que monta la bici y, en comparación con los típicos puños de tipo Lock on que montan la mayoría de bicis aumentan mucho el confort en el agarre del manillar.

A pesar de este buen comportamiento y capacidades de la Orbea Alma, es evidente que las trialeras y terrenos muy técnicos no van a ser su terreno, pero la pusimos a prueba igualmente. Y es que en los circuitos de XC las zonas complicadas van a hacer su aparición en algún momento, e incluso el usuario sin ambiciones competitivas, tarde o temprano se encuentra con lugares que ponen a prueba sus capacidades y las de su montura, así que nos acercamos a esos senderos a los que normalmente vamos con otro tipo de bici.

En nuestra unidad de pruebas contamos con la grandísima ayuda que nos otorga la tija telescópica, que marca una diferencia clara en la posibilidad de pasar o no por según que sitio. Aquí el X-Fader no puede hacer milagros y las piedras se sienten, pero la Alma atenúa los impactos secos y la verdad es que la geometría de la bici maximiza bastante la capacidad de pasar con relativa fluidez por zonas rotas e incluso bajar algunos escalones que pensábamos que quedaban fuera del alcance de una rígida. También los 110mm de recorrido de la Rock Shox SID hacen que el tren delantero lo tengamos bajo control en todo momento.

Y cuando los senderos no son tan técnicos pero requieren una buena dosis de control y agilidad es cuando más hemos disfrutado de la Alma. Se mueve con una agilidad asombrosa y, al mismo tiempo, se muestra predecible, de manera que permite ir bastante rápido.

Han sido varias semanas las que hemos disfrutado de la Alma y con algunas sesiones maratonianas en las que nos ha demostrado que se pueden pasar horas sobre esta bici sin que nuestro cuerpo se resienta por el hecho de no contar con suspensión trasera.

En cuanto al montaje de la Orbea Alma M-Pro ya hemos comentado que el grupo Sram GX AXS nos parece una elección idónea. Una vez más, su funcionamiento ha estado a la altura de sus hermanos de gama superior. La elección de plato de 32 dientes democratiza el uso de este modelo y solo aquel usuario que pretenda competir a cierto nivel echará en falta un plato mayor.

La Rock Shox SID SL Select se ha comportado con nota, ofreciendo una absorción muy buena y una gran sensibilidad. A pesar de contar con barras de 32mm y un recorrido de 110mm no hemos notado falta de precisión en la trazada y la rigidez nos ha parecido buena.

Mención especial merecen los componentes propios de la marca. El cockpit integrado ya hemos comentado que sus acabados son muy buenos y su forma está muy conseguida, ofreciendo un aspecto de gran calidad. La nueva tija OC MP10 tiene un funcionamiento impecable.

Por su parte las ruedas Oquo MP30TEAM que monta nuestra unidad son una maravilla, compartiendo llanta con el modelo tope de gama y diferenciándose en los radios, que en este caso son redondos y los bujes, que no llegan al nivel de aligeramiento que reservan a los tope de gama.

La elección de neumáticos nos ha gustado. Los Pirelli Scorpion XC RC los conocemos bien. Son excelentes rodadores pero guardan un buen equilibrio entre rodadura y agarre. Tan solo aquellos que prioricen la seguridad de un neumático más agresivo echarán en falta algo más de taco en la rueda delantera.

Conclusiones

Nuestras conclusiones después de acudir a la presentación que nos ofreció Orbea y haber probado a fondo la nueva Alma son realmente positivas.

Últimamente algunas marcas parecen relegar sus modelos hardtails a un segundo plano, e incluso eliminarlos de la gama alta. En Orbea se han tomado muy en serio la renovación de su rígida de XC que, por otra parte, es un modelo muy popular.

La nueva Alma es claramente más capaz que nunca y su rango de uso se ve ampliado. No ofrece la misma comodidad y control en los descensos que su hermana OIZ, pero a cambio tiene otras virtudes, como una ligereza y reactividad que a aquellos a los que les gusta ir con el cuchillo entre los dientes valorarán mucho. Además si entramos en comparación directa está claro que el factor económico tiene su peso, pues a igualdad de categoría la Alma es más barata y a igualdad de precio tendremos una Alma con montaje superior.

La nueva gama Orbea Alma 2025 consta de 5 modelos y arranca en la cifra de 2.499€ con el modelo M30 que comparte el mismo cuadro con un montaje más sencillo. El tope de gama lo encontramos en el modelo M-LTD que por 7.999€ ofrece un montaje espectacular.

Orbea Alma M-Pro: especificaciones, peso y precio

• Cuadro: Orbea Alma Carbon
• Horquilla: RockShox SID SL Select 110, 2 posiciones
• Bielas: Sram GX Eagle Dub, 32t
• Manillar: OC Mountain Performance MP10 Carbon, Cockpit, 760mm
• Pulsador: Sram AXS Pod
• Frenos: Shimano M6100 (Op Shimano XT M8100)
• Cambio: Sram GX Eagle AXS
• Cadena: Sram GX Eagle, 12 speed
• Ruedas: Oquo Mountain Performance MP28PRO (Op Oquo MP30TEAM)
• Cassette: Sram GX-1275 Eagle, 10-52
• Neumáticos: Pirelli Scorpion XC RC 2,40”, Pro Wall
• Tija: OC Performance XP10 Carbon (Op OC MP10 Dropper, 100mm)
• Sillín: Prologo Nago R4 Tirox rails, 137mm (Op Women Kit: OC grips 29mm / Selle Italia SLR Boost SuperFlow)
• Peso: 10,160kg (Con tija telescópica y ruedas MP30TEAM)
• Precio: 3.999€