Adoptar un sistema de fichajes como en el fútbol, la propuesta de Lefevere
El veterano dirigente del Soudal-QuickStep continúa con su indignación tras el extraño fichaje de Cian Uijtdebroeks por parte de Jumbo-Visma y propone emular al fútbol para evitar estos casos que suelen acabar en batalla judicial entre las dos partes.
El fútbol posible solución a casos como el de Uijtdebroeks
Mientras el ciclista belga Cian Uijtdebroeks, cuyo fichaje fue anunciado de forma sorpresiva por Jumbo-Visma hace unos días, ya entrena con sus futuros compañeros del equipo neerlandés, aunque vistiendo una indumentaria totalmente negra, Patrick Lefevere sigue su particular cruzada contra Ralph Denk y las formas utilizadas por Jumbo-Visma para hacerse con el corredor.
Si hace unos días criticaba al dirigente de la escuadra amarilla por su doble juego como dirigente de Jumbo-Visma y como presidente de la asociación de equipos, ahora ha ido un paso más allá explicando que los neerlandeses llegaron a realizar una oferta por Remco Evenepoel.
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Según Patrick Lefevere, estos problemas se solventarían si se contara con un sistema de fichajes similar al existente en el fútbol profesional. En ciclismo un equipo no puede buscar la contratación de un ciclista hasta 6 meses antes de que finalice el contrato de este. Únicamente se permite rescindir el contrato si todas las partes: equipos y corredor se ponen de acuerdo y la UCI otorga el visto bueno a la operación. Algo que, por ejemplo, sucedió recientemente con Primoz Roglic en su paso al Bora-Hansgrohe.
En el caso de Cian Uijtdebroeks el problema surge porque Jumbo-Visma afirma que el contrato del ciclista finalizó este pasado 1 de diciembre mientras que Bora-Hansgrohe mantiene que la finalización del mismo está fechada para el 1 de diciembre, pero de 2024, por lo que es muy probable que el asunto acabe en los tribunales y sea el juez quién decida tras analizar toda la documentación.
Por su parte, el sistema del fútbol es más flexible, permitiendo a los equipos, dentro de los periodos de fichaje establecidos al comienzo de la temporada y mediada la misma, realizar ofertas por los jugadores y, si se llega a un acuerdo entre las partes realizar el fichaje. Además, los contratos de los jugadores establecen un cláusula de rescisión con cuyo abono no es necesario llegar a un acuerdo. Por último, se añaden diversas compensaciones a los equipos, reguladas por UEFA en el caso del fútbol europeo, en concepto de formación de jugadores y otros aspectos.
Lefevere señala que, tal cómo se plantean los contratos habitualmente en el ciclismo, no más de uno o dos años, aunque últimamente se están viendo contratos más largos buscando atar a corredores jóvenes, tras los cuales cualquier equipo puede fichar a un determinado corredor sin mayor compensación para el equipo de origen resulta muy difícil vender un proyecto a los patrocinadores que pueden encontrarse que, a mitad de su apuesta el equipo pierda a alguno de sus corredores estrella. Con el sistema del fútbol no habría problema en establecer de entrada contratos de mayor duración sabiendo que existen posibilidades de romperlo sin que ello suponga un galimatías judicial y, en caso de que esto suceda, el equipo sabe que va a poder obtener algún beneficio de la venta del ciclista.
Evidentemente, el problema de este sistema es que los equipos con mayor poderío económico contarían con ventaja a la hora de hacerse con los mejores ciclistas, pero, según comenta Lefevere, ¿Qué diferencia hay con lo que ocurre en estos momentos en el ciclismo donde equipos como Jumbo-Visma o UAE Team Emirates acaparan a los mejores ciclistas del mundo?