La importancia de realizar una prueba de esfuerzo
¿Vas a someter a tu cuerpo a un esfuerzo importante, uno para el que no sabes si está preparado? Si estás a las puertas de participar en una competición de mountain bike, lo ideal es que antes realices una prueba de esfuerzo. El objetivo es cerciorarse de que todo funciona correctamente, chequear nuestro organismo -igual que cuando llevas el coche al taller antes de un viaje largo- para evitar problemas innecesarios.
Por qué deberías realizar una prueba de esfuerzo
Una prueba de esfuerzo consiste en un examen completo de nuestro organismo llevado a cabo por profesionales de la medicina. Desde la postura corporal, el pesaje, las medidas y la auscultación hasta la prueba de rendimiento. Sobre una cinta de correr o una bici estática, el examinado realiza ejercicio incrementando la intensidad paulatinamente. En las más profesionales se toman muestras de sangre -para ver la evolución del lactato- y siempre se mide el ritmo cardíaco y el análisis de gases usando una máscara de espirometría. En unos 15 minutos se puede completar.
La prueba de esfuerzo proporciona mucha información: la frecuencia cardíaca máxima, el consumo máximo de oxígeno, el umbral aeróbico y el umbral anaeróbico. Además, en algunos casos, permite detectar disfunciones en el corazón.
RECOMENDADO
Conoce tu talla de bicicleta en 1 minuto: fórmula y tablas
¿Por qué las bicis son tan caras como una moto o un coche?
3 entrenamientos de una hora para mejorar velocidad, fuerza y resistencia
Maneras de ponerse una braga de cuello o tubular BUFF®
¿Por la mañana o por tarde? a qué hora es mejor entrenar
Ejercicios isométricos: 10 sencillos e imprescindibles
Esto es algo que no hay que tomarse a broma: todos los años se dan casos de paradas cardíacas en deportistas de élite o amateurs, que en algunos casos se pdrían haber evitado con un chequeo que confirmase si se estaba o no en condiciones de llevar a cabo la práctica deportiva.
Pero realizar una prueba de esfuerzo no solo es útil como prevención. La cantidad de información que nos proporciona es básica para desarrollar un plan de entrenamiento efectivo en función de nuestros objetivos, nuestras capacidades y nuestra forma física.
Además, será una ayuda excelente para regularnos de la manera adecuada: saber el ritmo que podemos mantener al principio de una carrera para no terminar fundidos, y las revoluciones que podemos sostener a máximo rendimiento.
En definitiva, la prueba de esfuerzo es una opción excelente para cualquier ciclista, también el amateur. En cualquier centro de medicina deportiva puedes llevarla a cabo con profesionales especializados, y con un coste que suele oscilar entre los 100 y los 200 euros.