Probamos el Classified Powershift en la 3T Strada: adiós a los desarrollos prohibidos y al desviador
A lo largo de la evolución en el mundo de las bicicletas hemos visto numerosas innovaciones que, con el tiempo, acaban relegadas al olvido, ya sea por su complejidad, peso, o dudosa utilidad. Pero con el sistema de cambio interno Classified Powershift nos encontramos ante un producto que nos trae beneficios reales y tiene la suficiente sencillez y ligereza para acabar teniendo cierta relevancia en el mundo del ciclismo en general.
Lo hemos estado probando durante una temporada en su versión para carretera y aquí te contamos nuestra experiencia.
Classified Powershift: dos velocidades internas en el buje y adiós para siempre al desviador
Tan sencillo como eso. El sistema Powershift de Classified sustituye la función que cumple el llevar dos platos, con su correspondiente desviador, por una desmultiplicación interna en el buje trasero, de manera que podemos convertir cualquier bici a monoplato, con las ventajas que ello conlleva en cuanto a simplicidad y fiabilidad, y seguir contando con el mismo rango de desarrollos.
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Hace ya muchos años que existen los bujes con cambios internos, e incluso con múltiples desarrollos para sustituir al completo las transmisiones convencionales, pero estos han adolecido siempre de un peso excesivo y una eficiencia mermada debido a rozamientos internos, siendo por ello relegados casi siempre a bicis urbanas.
Pero la apuesta de Classified es algo más simple. Solo dos velocidades en el buje, de manera que han conseguido un peso muy competitivo y una eficiencia casi del 100%. Además, funciona de manera electrónica e inalámbrica, con lo que se evitan instalaciones complejas.
El sistema consta del propio buje, que se podría dividir en el cuerpo en sí, donde se anclan los radios, y el sistema interno, donde se hallan los engranajes planetarios para la desmultiplicación. También forman parte del sistema el eje pasante, que cumple una función imprescindible, como veremos más adelante, y la unidad remota que va en el manillar, con su pulsador. Además el cassette también es específico y se ofrece en combinaciones de 11, 12 y 13 velocidades y diferentes opciones de dentado.
Como hemos comentado, el sistema funciona de manera inalámbrica.
En el manillar encontramos la unidad de mando que dispone de una pila 1632, con una duración aproximada de un año. Esta unidad se instala en el final del manillar y va conectada a un pequeño pulsador que se coloca cerca de la maneta, en una posición cómoda de utilizar, ya sea con las manos en las propias manetas o en la parte baja del manillar.
La señal emitida por la unidad de mando es recibida por el eje pasante, el cual es otra de las partes vitales del sistema. En la palanca del eje pasante encontramos una conexión micro USB para cargar su batería interna, que nos ofrece una duración de unos 4 meses o unos 10.000 cambios.
El eje es el encargado de transmitir la señal de cambio al propio sistema interno, pero lo curioso es que lo hace mediante una inducción sin contacto directo y sin que el propio sistema de engranajes tenga ningún tipo de batería.
La velocidad del cambio es de 150 milisegundos y se puede realizar en cualquier circunstancia, sin que sea necesario pedalear en el momento del cambio, o bien pedaleando a toda potencia, ya que el cambio se realizará incluso soportando hasta 1000 Vatios de potencia en las bielas.
Las dos posiciones de las que dispone el buje son equivalentes a lo que obtendríamos en caso de usar una transmisión convencional de doble plato. Una de estas posiciones anula la desmultiplicación y hace funcionar el buje como si de uno tradicional se tratara. Esta sería la posición equivalente a llevar un plato grande, como el que lleva la bici, en nuestro caso de 50 dientes.
Si apretamos el pulsador y efectuamos un cambio en el sistema, el buje pasa a tener una desmultiplicación de aproximadamente 0,7, es decir, la rueda girará algo más despacio de lo que lo hace el cassette, de manera que simula el uso de un plato pequeño. La equivalencia si usamos un plato de 50 sería el de un plato pequeño virtual de 34.
Classified muestra una tabla de equivalencias en función del plato que montemos y podemos observar que, casi todas las combinaciones equivalen a lo que solemos encontrar en las bicis de doble plato.
Varias opciones para montar el Classified Powershift
Podemos optar por adquirir el sistema suelto que incluiría el buje trasero completo, el eje pasante (que se ofrece en diferentes versiones para adaptarse a cualquier cuadro), el cassette, y la unidad remota con el pulsador.
También está la posibilidad de adquirir un juego de ruedas completas de la propia marca o incluso de otros fabricantes que ofrecen ruedas con el Powershift.
Y por último está la opción de comprar una bici que incluya el sistema en su montaje, como nuestra bici de pruebas.
En cuanto a compatibilidades, Classified afirma que el sistema es compatible con grupos Shimano o Sram de 11 0 12 velocidades, así como con Campagnolo de 11 y 13 velocidades. También se ofrecen las referencias de cadenas compatibles de cada marca aunque, curiosamente, nuestra bici venía montada con una cadena Sram Eagle de MTB, a pesar de estar la cadena Sram Force entre las compatibles.
Una de las posibles dudas a la hora de plantearnos el montaje del sistema Powershift puede ser la durabilidad o mantenimientos necesarios. Pues bien, Classified indica que el sistema es totalmente libre de mantenimiento, y su duración estimada superará con creces la de cualquier bici. Los rodamientos sí se pueden cambiar, como en cualquier buje.
Classified Powershift apenas penaliza en el peso total de la bici
Aunque depende en gran medida de con qué componentes concretos se le compare, podemos decir que el peso total se mantiene similar a un montaje estándar de doble plato de gama media-alta.
Hemos podido pesar casi todo el sistema en nuestra propia báscula:
- El sistema interno del buje, donde se encuentran tanto los engranajes planetarios, rodamientos y sistema de rueda libre, nos ha dado una cifra de 507 gramos.
- El cassette de nuestra unidad de pruebas era un 11-32 de 12v y ha pesado 188 gramos y el eje pasante 74 gramos.
- La unidad remota del manillar anuncia un peso de 14 gramos y, aunque no la hemos desmontado, no creemos que varíe en exceso.
Lo único que no hemos podido pesar, ni hemos encontrado el dato, es el cuerpo externo del buje, ya que teníamos la rueda montada, pero es una pieza de aluminio bastante aligerada y de aspecto liviano.
Según nuestros cálculos, respecto a un montaje con Sram Force y buje DT 240s, la bici ganaría algo más de 100 gramos de peso. En cualquier caso poco relevante si tenemos en cuenta las ventajas que puede llegar a ofrecer el sistema.
Probamos el Powershift en una 3T Strada
Para nuestras pruebas con el Classified Powershift tuvimos a nuestra disposición durante unos meses un modelo de bici bastante especial. La mítica marca italiana 3T ofrece un montaje de su modelo Strada con el Classified Powershift de serie.
Se trata de un modelo con una clara orientación aero que, en su montaje, además de los componentes propios de la marca, que son referencia en el mundo del ciclismo, apuesta por un grupo Sram, combinando el Red y el Force, y el Powershift, que viene acompañado del juego completo de ruedas de Classified, con llantas de carbono de perfil 50.
En la bici destacan a simple vista sus formas aerodinámicas y la presencia de un monoplato, que es lo primero que salta a la vista. De hecho, si no conocemos de antemano el sistema Powershift, es difícil percibir que la bici esconde alguna otra cosa. Tan solo hay un buje trasero algo más voluminoso de lo normal en carretera y un diminuto pulsador en el manillar que pasa desapercibido. La verdad es que el Powershift mejora la estética de la bici dando una apariencia de mayor integración.
Lo primero que nos resultó curioso el primer día es que, hasta que no estamos pedaleando, no podemos saber en qué posición o “plato virtual”, por llamarlo de alguna manera, se encuentra el sistema. Hay que empezar a pedalear para percibir la cadencia y así saber en qué modo estamos. Esto es así salvo que emparejemos el Powershift con nuestro GPS (tiene conectividad ANT+), así de esta manera podemos tener en la pantalla, tanto el desarrollo elegido, como la batería del sistema.
Una vez en marcha, lo primero a destacar es que no hay desarrollos “prohibidos”. La cadena nunca va cruzada y todas las coronas traseras son igual de utilizables en cualquier posición en la que tengamos el Powershift.
Comenzamos usando la desmultiplicación y percibimos un leve sonido en esta posición, en cualquier caso menor del que suele emitir la cadena cuando la cruzamos bastante en una combinación de doble plato.
En cuanto a rozamientos internos o falta de eficiencia no notamos absolutamente nada. La bici acelera y se mueve con mucha agilidad.
El dato de eficiencia que ofrece Classified en esta combinación es del 99,2%. Una pérdida tan leve como la que se obtiene en cualquier transmisión debido al más mínimo cruce de cadena.
Pasando a la otra posición del Powershift, la relación es 1:1 y el buje funciona como si de cualquier otro se tratase. Aquí no hay sonido alguno. Detalle que se ve acentuado por una cadena que funciona en posiciones no forzadas. Además nuestra bici de pruebas ha resultado ser, en su conjunto, una bici realmente silenciosa y daba gusto rodar por carreteras en buen estado oyendo tan solo el sonido del viento.
Acentúa aún más este efecto de bici silenciosa el hecho de que el buje no emite tampoco apenas ruido dejando de pedalear, aunque ya sabemos que no a todo el mundo le gusta un buje silencioso.
Precisión máxima y adiós a las salidas de cadena para siempre
El funcionamiento del cambio de plato virtual es absolutamente silencioso, de hecho, si cambiamos sin pedalear (que es posible con el Powershift) no notamos nada hasta que no volvemos a mover las bielas y comprobamos que ha cambiado nuestra cadencia.
Si hacemos lo contrario y cambiamos pedaleando con fuerza, incluso de pie, igualmente es silencioso al 100%, y el cambio se efectúa con precisión absoluta.
El hecho de que el cambio sea tan silencioso hace que la única pega que le hemos encontrado al sistema penalice un poco más. No es otra cosa que la falta de nitidez que ofrece el pulsador.
No hay ningún click que nos haga percibir que se ha pulsado correctamente y el tacto tampoco nos ofrece una sensación muy clara. Esto hace que alguna vez hayamos hecho alguna pulsación en falso, sin que llegue a cambiar, sobre todo los primeros días. Una vez acostumbrados ya no ha habido problema, pero tenemos que ser conscientes de pulsar bien.
En principio, ante tal fiabilidad y rapidez en el cambio, pensamos que usaríamos bastante más el cambio con el Powershift de lo que cambiamos de plato normalmente en una transmisión convencional donde, siendo sinceros, si podemos evitar un cambio de plato lo hacemos, aunque solo sea por ser ligeramente más lento. Pero tras habituarnos al Powershift, se hace bastante patente una menor necesidad de cambios constantes ya que todas las coronas son utilizables en cada combinación. No hay ningún problema en rodar con la corona más pequeña o más grande y solo si llegamos al límite es necesario el cambio de plato virtual.
En cuanto a la precisión del cambio de coronas traseras (hay que tener en cuenta que el cassette es específico de Classified), nos ha sorprendido para bien. Podíamos esperar que la precisión y suavidad del cambio fuera algo inferior respecto a un montaje completo Sram, pero la verdad es que no hemos notado la más mínima imprecisión y el cambio es bastante silencioso.
Como hemos adelantado, en nuestra bici de pruebas teníamos el conjunto de ruedas al completo de Classified, en concreto el modelo R50, con llantas de carbono tubeless ready con 50mm de perfil. El aspecto de estas está muy cuidado y el nivel de acabados es buenísimo.
En nuestras pruebas las ruedas se han comportado como se espera de unas ruedas de gama alta, ofreciendo una rigidez y precisión de trazada sobresalientes y contribuyendo al excelente rodar de la 3T Strada.
Conclusiones finales
La gran pregunta que nos hacemos cuando se trata de este tipo de componentes innovadores desarrollados por marcas que no son las principales protagonistas del mercado es si este producto viene para tener una relevancia considerable en el mercado y se implantará definitivamente o si se acabará diluyendo. En nuestra opinión, el Classified Powershift tiene todos los argumentos para convencer a una gran mayoría de usuarios, y esto es al final lo más importante.
También, por supuesto, puede tener su sitio en la más alta competición, como ya se ha demostrado recientemente en las bicis de profesionales como Victor Campenaerts.
El mayor obstáculo que le vemos es el precio, ya que no es un componente barato. Por lo demás, a pesar de llevar un cassette específico, que a algunos usuarios les puede crear reticencias, nos ha demostrado un funcionamiento impecable. Tan solo la nitidez del mando es algo que nos gustaría que se mejorara en el futuro.
Una posibilidad real a tener en cuenta si usamos este sistema es que podemos usar el Powershift en diferentes ruedas y así, por ejemplo, compartirlo en una bici de carretera y otra de gravel. El cambio de una a otra rueda se realiza en uno o dos minutos (lo hemos comprobado).
En definitiva, después de muchos kilómetros realizados con el Classified Powershift, nos ha convencido al 100%. El hecho de olvidarnos del desviador y de los cruces de cadena hacen que estemos más enfocados en lo importante, ya sea en las salidas con la grupeta o en la más alta competición.