Probamos la Specialized Turbo Levo Alloy, la más económica de la gama
En el mundo de las E-Bikes hemos asistido a una evolución vertiginosa, dentro de su corta existencia. Pero si tenemos que nombrar un modelo que definiera un antes y un después sería sin duda la aparición de la Specialized Turbo Levo allá por el 2015. Una bici que introdujo conceptos como la integración del motor y la batería como nunca antes se había visto.
Hoy la Turbo Levo va por su tercera generación y sigue siendo un referente en cuanto a innovación y funcionamiento. Hemos tenido ocasión de probar a fondo su modelo de entrada a la gama y así comprobar si, con un precio contenido, podemos disfrutar de las virtudes de una de las E-Bikes más aclamadas.
Specialized Turbo Levo Alloy: múltiples argumentos para seguir siendo la referencia
La tercera generación de las Turbo Levo no ofrece grandes cambios estéticos respecto a su antecesora, pero aquí se cumple aquello de "las apariencias engañan".
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Para empezar, esta eMTB adopta el concepto “Mullet”, combinando una rueda trasera de 27,5” con una de 29” en la parte de delante. Un sistema que obtine lo mejor de ambas medidas. La 29" delantera favorecerá el paso a través de los obstáculos y optimizará la estabilidad y el agarre, mientras que con la trasera de 27,5" tenemos un basculante más compacto, con vainas cortas, que dotarán de más agilidad a una bici que, por sus características propias de E-Bike lo va a agradecer mucho.
Las mayores diferencias respecto a la anterior generación se encuentran en la geomería de esta nueva Turbo Levo. En general se ha actualizado conforme a las tendencias, desplazándose algo más hacia la vertiente más endurera, pero como vamos a ver, con las opciones de personalización de su geometría nos encontramos ante una bici muy polivalente, que podremos adaptar al uso que pretendamos darle.
Además de esto, se adopta el sistema “S-Sizing”. Con el que el tubo vertical varía muy poco en cada talla para no limitarnos a una talla concreta en función de nuestra longitud de piernas. De esta manera podemos optar por una talla más grande si preferimos una mayor estabilidad, o elegir una talla menos si buscamos una bici más manejable. Dejando de lado, por el momento, los cambios que nos permite hacer, vamos a ver que nos encontramos tal cual sale de la caja.
Para empezar, decir que el ángulo de dirección se va hasta los 64,5º (1,5º mas relajado que la Gen2) y el de sillín se adelanta hasta los 76,7º.
También crece el reach y en talla S3 (que correspondería a una M) mide 452mm. La rueda trasera de 27,5” ha permitido acortar las vainas, quedando en 442mm. Gracias a esto la longitud entre ejes, a pesar de crecer debido al resto de medidas, no es desorbitada, quedándose en la talla S3 en 1225mm.
Como vemos, la Turbo Levo ahora es más capaz de afrontar un uso más endurero, aunque la catalogan como Trail, ya que en la gama de Specialized tenemos a la Turbo Kenevo para esas vertientes agresivas.
Pero como hemos adelantado, esto no se queda aquí, ya que tenemos dos puntos de ajuste geométrico que dan como resultado 6 geometrías distintas.
En primer lugar podemos variar el ángulo de dirección en 1º. Ya sea haciéndolo más vertical o lanzándolo aún más. Esto se consigue cambiando la cazoleta superior de la dirección por otra excéntrica que nos viene como accesorio y, según como la coloquemos, variará ese grado en el sentido que busquemos. De momento, con este ajuste, ya podemos escoger entre 3 ángulos diferentes en la dirección.
Y el otro punto de ajuste se encuentra en las vainas, donde encontramos un flipchip, con el que podemos alargar en 6mm la longitud de dichas vainas, al mismo tiempo que bajamos el pedalier 7mm y la dirección se lanza aproximadamente medio grado más.
Como vemos, Specialized se ha encargado de que la Turbo Levo se pueda adaptar a usos muy distintos, desde el enduro más radical, hasta un uso rutero sin pretensiones agresivas.
En cuanto a la construcción del cuadro y líneas principales sí que encontramos semejanzas con su anterior versión. Y es que la Turbo Levo es una de las E-Bikes más atractivas del mercado para nuestro gusto.
Sus suspensiones nos otorgan 160mm de recorrido delante y 150mm detrás, utilizando la trasera una suspensión de tipo 4-Bar basada con la cinemática de su modelo muscular Stumpjumper EVO, pero adaptándolo a las características de una E-Bike como la Turbo Levo.
Estéticamente llama la atención el Side Bar, que es ese refuerzo junto al amortiguador, y también que el tubo diagonal no es extremadamente grueso, como ocurre en otras E-Bikes capaces de albergar grandes baterías (en el caso de la Turbo Levo, hasta 700Wh, aunque nuestro modelo cuente con 500 Wh). Eso sí, la zona del motor se ve muy voluminosa, y eso es porque la parte baja de la batería y el motor comparten ese espacio. Con esto no solo consiguen unas líneas algo más estilizadas en el resto del cuadro, sino que bajan muchísimo el centro de gravedad, lo cual va a mejorar muchísimo el manejo de la bici.
Por último, un par de detalles que nos han gustado mucho de esta Turbo Levo son, por un lado, la conexión del motor a la batería (que al mismo tiempo es el puerto de carga). Está muy bien terminado y sellado para que no entre agua ni suciedad y, al mismo tiempo, es muy sencillo de utilizar.
El otro detalle, que puede parecer menor, es que han rediseñado el guiado interno del cable de la tija, y ahora es fácil subir o bajar el sillín y la funda desliza por el interior sin problema.
El motor más potente y personalizable del mercado
Pues sí, con 90Nm de par máximo y una asistencia que puede llegar a multiplicar por 4 la potencia que nosotros ejerzamos en las bielas, nos encontramos ante el que es, sobre el papel, el motor más potente que ha pasado por nuestras manos.
En esta nueva versión, el motor Turbo Full Power System 2.2, monta una correa más robusta y duradera y un nuevo firmware en busca de un pedaleo más natural. Pero como cada usuario puede tener distintas preferencias y gustos, desde la aplicación Mission Control de Specialized podemos ajustar una serie de parámetros que harán que el motor se comporte justo como queremos, e incluso podemos variar los ajustes tan solo abriendo la aplicación en mitad de nuestra ruta.
Desde la aplicación Mission Control podemos variar el nivel de asistencia de cada modo (Eco, Trail y Turbo) en incrementos del 10%. Asimismo, también podemos ajustar la potencia pico también para cada modo.
Para el que no esté familiarizado con estos ajustes, diremos que la asistencia varía siempre en función de la fuerza que imprimamos nosotros a los pedales. Si tenemos una asistencia alta multiplicará en mayor medida nuestra potencia, y con asistencias bajas no dará un porcentaje menor, pero siempre aumentará si nosotros aumentamos nuestro esfuerzo. El límite de este aumento es la potencia máxima que es capaz de otorgar el motor y, en principio, podemos llegar a esta potencia máxima sea cual sea el nivel de asistencia que estemos usando, la única diferencia será el esfuerzo que nosotros tenemos que hacer para llegar a ella.
Con el ajuste de la Potencia Pico, podemos limitar la potencia máxima del motor en cualquiera de los modos, de manera que llegaremos a un punto en el que, aunque sigamos ejerciendo más fuerza, el motor llega al límite que hayamos establecido. Utilizando este ajuste en función del tipo de ruta que vamos a hacer nos permitirá economizar batería.
Otro ajuste importantísimo que nos permite hacer la Turbo Levo es la Respuesta de Aceleración. Con este ajuste elegimos si queremos una entrega de potencia muy suave en cada arrancada, o por el contrario que el motor nos entregue su potencia casi de inmediato. Esto puede cambiar el comportamiento de la bici por completo, haciéndola más dócil y gobernable o convirtiéndola en un caballo de carreras.
A la hora de afrontar trialeras de subida es un ajuste vital, ya que si la respuesta es muy lenta puede no darnos tiempo a dar inercia a la bici para superar los primeros obstáculos. Y si nos vamos al extremo contrario puede ser difícil gobernar una bici con esta potencia en cada arrancada y puede derrapar la rueda trasera con facilidad.
Con la Turbo Levo tenemos la ventaja de poder ajustar este parámetro en incrementos del 10% y conseguir que la bici se adapte a nuestra preferencia.
Con la aplicación Mission Control podemos ajustar otro parámetro. Se trata del modo Shuttle, que por defecto viene desactivado pero lo podemos aumentar en el nivel que queramos. Según Specialized es algo así como una ayuda extra para activarlo cuando estamos muy cansados de una ruta exigente y poder terminarla con menos esfuerzo.
Specialized Turbo Levo Alloy: montaje de entrada muy acertado
Estamos ante el modelo más económico de la familia Turbo Levo, pero ello no implica que haya componentes que no vayan a estar a la altura para el uso agresivo que se le presupone a esta bici.
En las suspensiones contamos con los modelos de entrada de Rock Shox. Delante la horquilla Rock Shox 35 Silver con barras de 35mm nos garantiza una rigidez correcta aunque su sensibilidad no llega al nivel de sus hermanas mayores. El amortiguador Rock Shox Deluxe Select R carece de palanca para variar la compresión pero también ofrece un buen comportamiento.
La transmisión combina componentes Sram NX Eagle con mando y cambio SX Eagle. Esta combinación es la más asequible para acceder a las 12 velocidades en Sram. Su funcionamiento, como veremos, es más que correcto, aunque no goza de los acabados de grupos superiores.
En los frenos tenemos unos Sram G2 RE que, con sus 4 pistones y discos de 200mm, garantizan una frenada segura en cualquier condición.
Las ruedas de la propia marca combinan unos bujes de aspecto sólido y rodamientos sellados con una llanta de aluminio de 30mm de ancho interno. Ambas ruedas tienen 28 radios DT Swiss.
Como ya hemos comentado la delantera es de 29” y la trasera de 27,5”. Sobre éstas se montan neumáticos Specialized. Modelo Butcher delante y Eliminator detrás, ambos con carcasa Grid Trail y anchura de 2,6”.
La tija telescópicas es una Tranz X dropper de 34,9mm de diámetro y su recorrido varía en función de la talla, siendo de 150mm la que montaba nuestra unidad. Esta tija ya la hemos probado en otras ocasiones y su funcionamiento es excelente.
Del resto de componentes firmados por Specialized destaca el conjunto manillar-potencia con diámetro de 35mm y buenos acabados y el Sillín Bridge que, tratándose de Specialized y su Body Geometry es garantía de comodidad.
Poniendo a prueba la Specialized Turbo Levo Alloy
Cuando nos llegó nuestra bici de prueba, a simple vista no nos pareció muy diferente de la versión anterior. Es fijándonos con detalle donde encontramos las diferencias, al margen de la rueda trasera de 27,5" que sí es algo que salta a la vista.
Esto es algo que nos gustó, ya que la Specialized Turbo Levó es una de las E-Bikes que nos parecen más bonitas estéticamente. Y los acabados, aún tratándose de la versión de aluminio, están cuidados hasta el último detalle.
Como siempre, la subimos a nuestra báscula antes de ponerle los pedales, y la cifra que arrojó fueron 23,68 kg que, tratándose de la versión de entrada a la gama, nos parece una cifra muy buena, teniendo en cuenta que estamos ante una E-Bike de las más potentes.
Tras los ajustes de posición y presiones salimos a dar las primeras pedaladas. Nos encontramos cómodos desde el primer momento. El reach ha aumentado pero seguimos teniendo una posición bastante erguida gracias a su corta potencia.
La primera sensación que nos dio el motor es de una tremenda suavidad, sin el empuje brusco que ofrecen otros motores. Esto es porque la respuesta de aceleración viene al mínimo, pero la podemos variar al gusto. Nosotros la acabamos dejando al 40%, donde encontramos un buen compromiso entre agilidad en la arrancada y facilidad en el manejo.
Ya en marcha, fuimos jugando con los niveles de asistencia y pudimos comprobar la tremenda potencia que el motor puede llegar a ofrecer. En el modo ECO el motor es muy silencioso, y conforme subimos asistencia se percibe un zumbido, pero dentro de esta categoría de motores nos parece de los más silenciosos.
Quisimos comprobar en qué se traduce el uso del modo Shuttle, ya que la explicación que se da de este ajuste es algo escasa. Para ello vinculamos la Turbo Levo a nuestro Garmin y pusimos en pantalla el dato de la potencia ejercida por nosotros. Después hicimos diferentes pruebas en la misma subida y en diferentes modos de asistencia con y sin Shuttle activado.
Nada más arrancar notamos que con el Shuttle activado al 100% cuesta bastante menos acelerar desde parado, y luego en la subida fuimos viendo en cada modo como la potencia que ejercíamos nosotros era menor para una misma velocidad.
La conclusión que sacamos es que le da un plus de asistencia a todos los niveles respecto a cómo están ajustados, y podría ser útil, tal como dice Specialized, para ese día que acabamos cansados y la última subida queremos un extra de ayuda (si queda batería para ello claro…).
Turbo Levo 3ª Generación: la eMTB total
Llegó el momento de poner a prueba la Turbo Levo en todo tipo de terrenos y ver hasta dónde ha mejorado su geometría y cuánto pueden dar de sí los ajustes que ofrece. Viene de serie con una cazoleta de dirección neutra que deja su ángulo en 64,5º y el ajuste del flipchip trasero en High (vainas cortas).
Con este ajuste encontramos una bici muy equilibrada. La manejabilidad en las subidas o en tramos de pedaleo es bastante buena, y cuando el terreno se inclina hacia abajo percibimos una gran seguridad, nos da confianza para dejar correr la bici en tramos comprometidos. Asimismo la entrada en curvas es asombrosamente buena para una bici con este peso. Aquí el hecho de ser Mullet tiene mucho que ver.
En tramos rápidos y rotos la geometría ayuda y, aunque las suspensiones hacen su trabajo razonablemente bien, se nota que no tenemos un montaje Premium en este sentido. Aun así, la Turbo Levo nos dio total confianza en los descensos.
Una vez adaptados a la bici hicimos pruebas con los ajustes geométricos. Cambiamos la cazoleta de dirección neutra por la excéntrica. Esta operación es realmente sencilla, tan solo aflojar la dirección y sacar la potencia es necesario para el cambio, a diferencia de otras bicis en las que también hay que cambiar la cazoleta inferior y sacar la horquilla. Además la cazoleta es de aluminio y da la impresión de un diseño fiable y duradero. Una vez con la cazoleta excéntrica, para cambiar el sentido y variar de -1º a +1º ni siquiera tenemos que sacar la potencia por completo, tan solo aflojarla y levantar unos milímetros.
Probamos primero con la posición de +1º, quedándo la dirección en 65,5º. Aquí notamos una clara ventaja en ciertas situaciones, como por ejemplo en zonas de pedaleo y rodaje por pistas poco complicadas. La bici se mueve mejor y se siente bastante más ágil.
También notamos una mejoría palpable en un sendero muy técnico de constante subida y bajada, donde ponemos a prueba todas las E-Bikes que pasan por nuestras manos. Aquí la agilidad de la Turbo Levo con el ángulo de 65,5º nos hizo afrontar todos los pasos con una facilidad asombrosa. En general este ajuste nos parece muy indicado para todo aquel que no pretenda afrontar bajadas de mucho peligro y desnivel, o alcanzar velocidades máximas en descensos.
Como no podía ser de otra forma, probamos el ajuste contrario. Giramos la cazoleta para dejar el ángulo en 63,5º. El cambio se siente al instante y no hace falta tener mucho feeling para notar la diferencia en el comportamiento. Ahora la Turbo Levo es algo más torpe en el manejo a bajas velocidades. En zonas de pedaleo cuesta un poco más ir llevando la bici por la trazada exacta que queremos, pero en cuanto la velocidad aumenta la cosa cambia.
Fue comenzar a bajar los senderos más agresivos y notar una seguridad increíble. Tanto en zonas inclinadas y técnicas como en senderos muy rápidos la Turbo Levo se siente como una verdadera enduro.
Este ajuste será el preferido de aquellos que busquen la vertiente más endurera y las subidas las tomen a modo de enlace para la siguiente bajada.
Nos falta el ajuste del flipchip que, si lo ponemos en Low y alargamos vainas, unido al ángulo de dirección más lanzado, la estabilidad que conseguimos con la Turbo Levo llega a un nivel superior. Este ajuste lo vemos factible en bajadas de tipo bikepark donde podemos afrontar peraltes y saltos con mucha seguridad. En el resto de situaciones y bajadas más naturales vemos más lógico el flipchip como viene de serie.
Conclusión final
Tras una temporada en la que hemos podido disfrutar de la Specialized Turbo Levo Alloy hemos podido comprobar cómo la evolución que ha sufrido este modelo vuelve a colocarlo como un referente en el mundo de las E-Bikes. La personalización que se puede conseguir en la Turbo Levo, tanto en lo referente al comportamiento del motor, como en cuanto a la geometría, hace que sean cuales sean nuestras preferencias, encontramos una bici que se adapta a nuestro estilo.
Además el hecho de probar el modelo más económico nos muestra que, desde el primer escalón de acceso a la gama, la Specialized Turbo Levo nos ha demostrado que tiene muchos argumentos para considerarse una referencia.
Specialized Turbo Levo Alloy: especificaciones, peso y precio
- Cuadro: Specialized M5 Premium Alloy, S-Sizing, 150mm travel
- Horquilla: RockShox 35 Silver, S1: 150mm, S2-S6: 160mm
- Amortiguador: RockShox Deluxe Select R
- Cambio: Sram SX Eagle
- Cassette: Sram NX Eagle, 11-50
- Cadena: Sram NX Eagle
- Pulsador: Sram SL SX Eagle
- Bielas: Praxis forged M30, 160mm
- Plato: Sram X-Sync Eagle, 32T
- Bujes: Alloy sealed cartridge bearings, 12x148 / 15x110
- Llantas: Specialized hookless alloy, 30mm inner wide, tubeless ready
- Neumático del: Specialized Butcher, Grid Trail, T9, 29x2,6”
- Neumático tras: Specialized Eliminator, Grid Trail, T7, 27,5x2,6”
- Frenos: Sram G2
- Potencia: Alloy Trail Stem, 35mm bar bore
- Manillar: Alloy, 35mm diameter, 780mm
- Sillín: Specialized Body Geometry Bridge
- Tija: TranzX dropper. S1: 100mm, S2: 125mm, S3: 150mm, S4-S5: 170mm, S6: 200mm
- Motor: Specialized Turbo Full Power System 2.2
- Batería: Specialized M3 500Wh
- Peso: 23,68kg
- Precio: 5.500€