Probamos la Trek Procaliber 9.6: una rígida que no renuncia a nada

Las mountain bikes de doble suspensión para XC han comenzado un viaje directo hacia la tendencia más salvaje de la modalidad, pero para los que siguen buscando sensaciones más reactivas, ligereza y sencillez hoy os traemos la prueba de una rígida que no renuncia a nada. Y todo ello con un precio muy razonable, así nos ha ido con esta Trek Procaliber 9.6.

La Trek Procaliber 9.6 no renuncia a nada

Trek fue una de las marcas pioneras en el uso del carbono en el ciclismo, y las afamadas siglas OCLV nos traen el recuerdo de modelos emblemáticos que marcaron época. El cuadro que presenta la Procaliber 9.6 está fabricado con el denominado Carbono OCLV Mountain, que está preparado para soportar cualquier impacto propio del mountain bike. Pero lo que más llama la atención de este cuadro es su sistema IsoSpeed.

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Características principales

El IsoSpeed aprovecha la intersección del tubo vertical para unir el tubo horizontal y los tirantes mediante una rótula que permite la flexión del cuadro. El Isospeed ofrece un gran confort al permitir que la tija y tubo vertical puedan flexar de manera libre a lo largo de su longitud.

Otra de las características destacables del cuadro de la Procaliber es el tubo diagonal Straight Shot, totalmente recto de principio a fin, maximizando la rigidez sin aumento de peso. Por lo demás, el cuadro está a la última en estándares y prestaciones actuales. Tiene guiado interno de cables de principio a fin y con un mantenimiento sencillísimo, incluyendo el guiado para tija telescópica, aunque no la monte de serie. Y también incorpora el bloqueo de dirección Knock Block para evitar golpeos de manillar en el tubo superior.

El eje trasero es Boost y la patilla de cambio Sram UDH, lo que asegura compatibilidades y facilidad a la hora de buscar recambio. Trek sigue confiando en el pedalier PressFit, a pesar de que algunas marcas optan por sistema roscado por facilidad de mantenimiento. El PressFit permite una mayor anchura a los tubos en su encuentro con la caja, permitiendo optimizar la rigidez y ganando estéticamente.

Para maximizar la rigidez estructural, cada tubo de la Procaliber tiene una forma determinada en función de su cometido. Como hemos dicho, el diagonal es totalmente recto y su perfil cuadrangular tiene aristas muy suaves. No como el tubo horizontal, con aristas vivas y aplanándose cada vez más hacia su encuentro con la rótula IsoSpeed.

También el tubo vertical varía su forma redonda para acabar aplanándose y ensanchandose a la vez que se curva en su encuentro con el pedalier.

Geometría

En cuanto a la geometría, la Trek Procaliber 9.6 apuesta por los orígenes del XC y no vemos ángulos con lanzamientos exagerados ni medidas muy extremas.

Así, el ángulo de dirección es de 68,8º, medida muy equilibrada que gustará a aquellos usuarios que priorizan la agilidad.

El tubo vertical de 73,8º nos coloca en una posición neutra. Permite una colocación óptima para las subidas pero sin dejar de lado la comodidad a la hora de llanear.

El reach es, en la talla M que hemos probado, de 420mm, lo cual hace que esta vaya a ser una bici cómoda donde vamos a ir más bien erguidos, aunque su pipa de dirección de solo 90mm nos va a permitir, si eliminamos los espaciadores bajo la potencia, colocar el manillar bastante bajo.

Estas medidas repercuten en una longitud total entre ejes bastante reducida. En talla M es de 1103mm, lo cual hará que la Procaliber se desenvuelva bien allá donde se necesite agilidad.

Una estudiada selección de componentes para las máximas prestaciones

Trek ha conseguido con esta Procaliber 9.6 que una bici a un precio muy competitivo ofrezca lo último en cuanto a tecnología. Así, podemos disfrutar de las bondades de una transmisión Shimano de 12 velocidades combinando un cassette Shimano SLX 10-51, un mando también SLX con un cambio XT.

Las bielas son Shimano MT611 y montan un plato de 30 dientes que nos permitirá, aunque no estemos en plena forma, subir por cualquier sendero o pista por inclinado que sea.

La frenada también se confía a Shimano con una combinación de pinzas MT410 con manetas M4100. Monta discos de 180mm delante y 160mm en la rueda trasera.

La horquilla que acompaña al cuadro de la Procaliber es una Rock Shox Recon Gold RL con 100mm de recorrido. Viene con sistema DebonAir y un hidráulico Motion Control con bloqueo remoto en el manillar.

Las ruedas son 100% Bontrager, combinando bujes boost con rodamientos sellados y anclaje de 6 tornillos para los discos con llantas Bontrager Kovee Comp de 23mm de ancho interno.

El eje pasante trasero Bontrager Switch tiene una leva extraíble, lo que nos permite disponer rápidamente de una allen de 6mm para, por ejemplo, desmontar la rueda delantera llegado el caso.

Los neumáticos también son Bontrager. En ambas ruedas se montan los XR2 Team Issue tubeless ready, en medida de 2,20”.

En el resto de componentes seguimos encontrando la marca de la casa que presentan un diseño y acabados más que correctos.

La potencia Bontrager Rhythm Comp en esta talla es de solo 60mm, lo cual hará que vayamos en una posición más que cómoda. El manillar Bontrager Comp mide 72cm, aunque aumenta a los 75cm a partir de la talla L.

La tija Bontrager Comp también presenta muy buenos acabados y su diámetro es de 31,6mm, de manera que si queremos cambiarla por una telescópica tendremos más opciones.

El sillín que monta es el Bontrager Arvada, con una anchura de 138mm.

Rodando con la Trek Procaliber 9.6

Que sea una hardtail y que tenga un precio relativamente contenido no está reñido con una estética llamativa y espectacular. Las formas trabajadas de su cuadro llaman la atención cuando se mira de cerca y la decoración de nuestra bici de pruebas, con ese naranja tan llamativo, no dejará indiferente, o lo amas o lo odias… De todas formas la Trek Procaliber 9.6 viene en otros dos acabados, uno combinando el acabado carbono con un color flúor también muy espectacular, pero si eres de bicis un poco más discretas el acabado azul es el tuyo.

Los componentes Bontrager nos parecieron de muy buena factura y nos llamó la atención la tija de 31,6mm, ya que en las rígidas es muy común el uso de diámetros más delgados para favorecer cierta flexión, pero como la Trek Procaliber cuenta con la ventaja del IsoSpeed, pueden montar este diámetro que el tubo vertical seguirá teniendo esa leve absorción que nos dará comodidad y, además, si queremos montar una tija telescópica, tendremos más opciones donde elegir.

Como decimos, la bici en vivo nos gusto mucho, pero suponíamos que no iba a ser muy ligera ya que su montaje se aleja de esos componentes exclusivos que vemos en las gamas altas, pero lo cierto es que no se dispara el peso. En nuestra báscula arrojó la cifra de 11,78kg a falta de montarle los pedales y salir a rodar.

Una vez cumplido el trámite, colocamos el sillín a nuestra altura y salimos a probarla.

Como esperábamos, la posición que adoptamos sobre la Procaliber es realmente cómoda ya que, unido a su corto reach, monta una potencia también bastante corta. Además nuestra unidad tenía el tubo de la horquilla sin cortar y bastantes espaciadores bajo la potencia, de modo que íbamos demasiado erguidos para una bici de Cross Country. Tras el primer día de prueba, optamos por invertir los espaciadores y aprovechar esa pipa de dirección de 90mm para conseguir una posición un poco más eficiente y exprimir un poco a la Procaliber a ver de lo que es capaz.

En las primeras rutas, rodando principalmente por pista, pudimos apreciar la comodidad que otorga el IsoSpeed pues, salvando las diferencias con una doble, le da una docilidad a la trasera que nos permitía seguir pedaleando sentados en zonas bastante irregulares. La horquilla Rock Shox Recon también mostró unas dotes correctas de sensibilidad, a pesar de tratarse de una horquilla de gama media. En estas circunstancias, la Procaliber nos permite rodar a velocidades bastante altas con un buen aprovechamiento de nuestra energía.

También cuando toca ponerse de pie contamos con el bloqueo Rock Shox OneLock en el manillar, que elimina por completo las oscilaciones de la horquilla.

En cuanto al funcionamiento de los componentes que monta hay que hacer una mención especial a la suavidad y precisión de los cambios que, aunque no estemos ante las gamas más altas de Shimano, su funcionamiento es intachable. En situaciones de cambio bastante forzadas, sigue funcionando de manera eficiente y, además, muy silenciosa.

En nuestra opinión, sólo el peso de esta transmisión la diferencia, en cuanto a prestaciones, de la más alta gama.

También la frenada hizo gala de la fiabilidad y potencia a la que Shimano nos tiene acostumbrados pero, aquí tenemos que decir que la forma de la maneta M4100 no nos gusta nada. Es una maneta demasiado larga para utilizar un solo dedo, que es a lo que acostumbramos en este tipo de bici y, además la potencia de los frenos lo permite. Después de ajustar el alcance y la posición pudimos acostumbrarnos pero sin duda preferimos la maneta más corta de los grupos superiores.

El resto de componentes cumplió de sobra con su cometido, aunque hubiéramos preferido un par de centímetros más en el manillar ya que los 72cm que monta ya nos parecen algo escasos.

El conjunto de ruedas también se portó de manera excelente y nos gustó mucho el taqueado de los neumáticos Bontrager XR2, que son muy rodadores pero tienen un agarre correcto. Eso sí, también estamos ya acostumbrados a usar llantas de mayor anchura, con los beneficios que conlleva en cuanto a agarre y comodidad al permitir presiones menores, más tratándose de una hardtail.

Buscando el límite a la Procaliber 9.6

No por tratarse de una bici de gama media íbamos a dejar de exprimir a la Procaliber en todos los terrenos, así que la llevamos a los recorridos más duros física y técnicamente a ver cómo se comporta.

Cuando llegaron las subidas con mayor inclinación y terreno algo más técnico tuvimos la ventaja del desarrollo que monta, con ese plato de 30 dientes que hace que no nos atranquemos por inclinado que pueda llegar a ser el terreno. Los neumáticos hicieron gala de una buena tracción, a pesar de los que aparenta su taqueado. Y, la rigidez de su cuadro de carbono nos da esa transferencia de energía óptima para superar las dificultades con un golpe de pedal. Eso sí, aquí notamos que el peso no es el de una bici de Copa del Mundo y no tiene ese nervio y agilidad en subidas de bicis más ligeras, aunque su corta longitud entre ejes hace que la podamos mover con cierta facilidad en zonas reviradas.

Cuando llegan las bajadas, la posición cómoda y erguida que adoptamos en la Procaliber nos da seguridad, y el funcionamiento de la Rock Shox Recon tiene poco que envidiar en cuanto a absorción a horquillas de gama superior. El cuadro no deja de ser un hardtail, pero gracias al IsoSpeed, no tiene ese tacto tan seco y rebotón de otras rígidas similares.

En senderos de bajada da gusto mover la bici ya que gracias a su corta longitud total hace gala de una gran agilidad.

Lo que sí echamos de menos fue una tija telescópica que terminaría de convertir a la Trek Procaliber 9.6 en una bici realmente divertida.

Conclusiones

La verdad es que la Trek Procaliber 9.6 nos ha dejado un buen sabor de boca. Nos alegra ver que, aunque el mercado esté con unos precios desorbitados en muchos casos, gracias a la evolución continua y a la tecnología que hay actualmente, se puede disfrutar de una bici de muy altas prestaciones por un dinero razonable.

La Procaliber es una bici ideal para el biker aficionado sin grandes pretensiones, pero también es apta para competir si tu presupuesto es limitado. Con un simple cambio de potencia por una de un par de centímetros más, podemos conseguir una posición muy eficiente sobre ella para colocarle un dorsal y darlo todo.

También nos parece una gran opción de compra si tu idea es ir mejorándola ya que dispones de un cuadro de categoría para ir aligerándola poco a poco.

Trek Proclaimer 9.6: especificaciones, peso y precio

• Cuadro: Carbono OCLV Mountain, IsoSpeed
• Horquilla: RockShox Recon Gold RL, DebonAir
• Mando remoto: RockShox OneLock Sprint
• Pulsador: Shimano SLX M7100
• Cambio: Shimano XT M8100
• Bielas: Shimano MT611, plato 30D
• Cassette: Shimano SLX M7100, 10-51, 12v
• Cadena: Shimano Deore M6100
• Frenos: Shimano manetas MT4100, pinzas MT410, 180 /160mm
• Bujes: Bontrager boost, rodamientos sellados
• Llantas: Bontrager Kovee Comp 23, tubeless ready
• Neumáticos: Bontrager XR2 Team Issue, tubeless ready, 120tpi, 29x2,0”
• Sillin: Bontrager Arvada, anchura 138mm
• Tija: Bontrager Comp, 31,6
• Manillar: Bontrager Comp, 720mm S, M, ML. 750mm L, XL, XXL
• Potencia: Bontrager Rhythm Comp
• Peso: 11,78kg
• Precio: 2.249,10€

Más información sobre esta bici, sus montajes y precios en la web del fabricante.