Quién ganará la Vuelta a España 2021
Queda solamente una semana para que termine la Vuelta 2021 y, en esta jornada de descanso, reflexionamos sobre la situación actual, sobre lo que hemos visto hasta ahora, sobre lo que nos queda por dirimir y hacemos balance de una edición que ha tenido sus luces y sus sombras. Analizamos los favoritismos y analizamos también si la Vuelta está siendo aburrida o no, y por qué.
Quién ganará la Vuelta a España 2021
La Vuelta 2021 está que arde. La igualdad en la general es sin duda la mejor noticia para una carrera con puntos positivos y alguna que otra cosa a mejorar. Pero esa pelea por la victoria en Santiago de Compostela nos mantiene agarrados al televisor aún a una semana vista del desenlace final.
Esa igualdad se debe fundamentalmente a dos factores: el primero, es que el ciclista más en forma con diferencia del circuito Pro Tour no está en esta edición de La Vuelta 2021. Esa, que en principio es una mala noticia, ha acabado por aportarle la mayor emoción a una ronda bien planteada, pero que sigue lejos en cartel del Tour de Francia.
RECOMENDADO
Favoritos para ganar la Vuelta 2021
Vuelta 2021: 7 etapas de montaña que no te puedes perder
Roglic se cae y Nielsen hace doblete
Storer gana con inteligencia y los favoritos entran de la mano
Un prototipo de Orbea Orca Aero se deja ver en la Vuelta
¿Cuántos días debe descansar un ciclista a la semana?
No ha venido Tadej Pogacar, y en su lugar tenemos una pelea preciosa entre el más fuerte del resto de mortales, su compatriota Primoz Roglic; Enric Mas y un Movistar muy entonado (sin Valverde, una lástima su caída) con Supermán López en la recámara; y los candidatos imprevisibles, en este caso Eiking, que mantiene el rojo después de haber salvado varios match point, como la subida a Villuercas.
Por eso, cuando nos preguntamos quién ganará la Vuelta a España 2021, la lista la tenemos bastante presente. El primer candidato, sin lugar a dudas, y principal favorito es Primoz Roglic. El del Jumbo Visma ha demostrado ser el más fuerte. En la única etapa que descolgó al resto, se fue al suelo bajando y fue cazado por Enric Mas y el resto de la banda. Pero Roglic no sólo tiene más sprint y ha ganado etapas por ello, sino que tiene una bala de plata en la última etapa, una contrarreloj individual entre Padrón y Santiago de Compostela. Si no llega líder ahí, puede romper al resto en la lucha contra el crono, donde es un especialista. Su reciente oro olímpico da fe de ello.
Por detrás de Roglic, podemos decir que hay un pequeño grupo de candidatos. Reducido, porque algunos perfiles se han venido abajo. Destacan el de Carapaz, que abandonaba anteayer tras una grandísima temporada que incluye pódium en el Tour y oro olímpico en Tokio 2020 en ciclismo en carretera; Pidcock, que ha venido a pasearse; y Egan Bernal, a más de 4 minutos del líder. Vamos, todo el Ineos al completo, que va a completar su annus horribilis en Tour y Vuelta. Se salva Adam Yates, que también a 4 minutos, está demostrando su fortaleza y su valentía, así que con tanta montaña por delante puede intentar pelear por el pódium.
Pero ese pódium está caro. Venderán cara su piel sobre todo dos ciclistas del Movistar que han llegado muy fuertes. Enric Mas es el primero. El mallorquín está haciendo una temporada buenísima. Su sexta posición en el Tour y su probable pódium en la Vuelta cierran el que será su mejor año, aún a falta de saber el color de su medalla en la ronda española. Está al nivel de Roglic, es el único que le está peleando la montaña y aunque le falta el puntito final, ha dado la cara con creces. El otro es Miguel Ángel López, un gran corredor que tuvo mala fortuna en el Tour, donde se fue al suelo, y que está muy fuerte. Puede tirar por sí mismo o puede ser el mejor aliado de Mas en caso de necesitarlo. Ambos forman una dupla fortísima.
Por último, no hay que perder de vista a dos ciclistas que seguramente caigan en las próximas dos etapas montañosas, pero que hay que hacerlos caer. Sobre todo Eiking, que se está mostrando fuerte en la montaña extremeña, aguantando siempre en el grupo de favoritos. El noruego del Intermarche ganó el maillot rojo un día cualquier en una fuga más, y ahora hay que quitárselo. Guillaume Martin también está en una situación similar, aunque se da por hecho que ambos pelean básicamente por entrar entre los 10 primeros, habrá que ver qué ocurre en Covadonga y en el Gamoniteiru, dos finales en Picos de Europa tremendos. Nuestra apuesta: Roglic, Mas, López para el pódium.
¿Está siendo aburrida la Vuelta 2021?
Se ha montado un debate en redes sociales sobre la emoción (o su ausencia) en la Vuelta 2021. No sabemos qué os estará pareciendo a vosotros y vosotras, pero creemos conveniente distinguir varios aspectos.
El primero, es que la emoción en el ciclismo se siente o no se siente. Sí, así es. Hay telespectadores que sólo disfrutan con las grandes etapas de montaña, o sólo con los dos minutos de preparación y llegada al sprint. Pero la Vuelta está siendo entretenida si te gusta el ciclismo sin más. Está habiendo un poco de todo. Bien es cierto que las etapas llanas han seguido casi siempre el mismo guión: fuga temprana, captura tardía y sprint final. Pero no siempre: ha habido triunfos en fuga, como los de Storer o Nielsen.
También es cierto que no es cuestión del recorrido. De hecho, la Vuelta 2021 ha planteado etapas distintas y originales que han gustado. Finales en descenso, etapas muy dinámicas y supuestas etapas llanas que parecían más bien una clásica de primavera. Esto le ha dado un jugo, un caché importante, y espectáculo casi cada día.
Así que si el problema no ha sido el recorrido, que está bien planteado y al que le queda aún lo mejor; ni tampoco el dinamismo, ¿por qué se debate sobre si está siendo o no aburrida?
Básicamente por dos factores: el primero, es el momento en el que ocurre la Vuelta 2021. Después de un año de parón por el coronavirus y otro en el que se han concentrado los eventos. Dos ediciones del Tour muy cercanas y unos Juegos Olímpicos de postre. La Vuelta llega entonces, al final de dos temporadas extrañas concentradas en pocos meses, así que los ciclistas llegan agotados mental y físicamente. Y eso reduce el espectáculo, sin duda.
El otro factor es algo que trae un debate de largo: el control de la potencia. Los vatios y los potenciómetros han cambiado el ciclismo tal y como lo concebimos. Hace poco hablábamos de potencia y su importancia en el ciclismo actual, así que cuando un ciclista va justo de fuerzas, los vatios han roto la sorpresa. Todos meten su potencia crítica y atacan a 2 kilómetros de meta de las etapas en alto. Les da para ganar, así que para qué arriesgar. El debate en torno a los potenciómetros sigue vigente, y hay una corriente que defiende eliminarlos. De hecho, el Tour ya manifestó sus dudas al respecto. Veremos qué ocurre.
En resumen, la Vuelta 2021 no está siendo aburrida, sino que el ciclismo de carretera, en general, ha bajado su emoción, de eso no hay dudas.