Merlier reina entre las caídas y Van der Poel mantiene el maillot amarillo
Después de una jornada histórica en la que se saldaron algunas deudas con la historia, llega la tercera etapa: 183 kilómetros en un perfil con muchísimas similitudes con las de ayer.
Otro día caótico más en la oficina
Todo a una altitud exigua que hacía presagiar una búsqueda de fugas y un rol del pelotón como viene siendo habitual estos días previos: sin permisividad, sin un halo de descontrol.
Como decimos, el pelotón ha marcado un ritmo impresionante estos dos días previos, haciendo que ambas etapas se diriman en el último kilómetro prácticamente, con sendos ataques de Alaphilippe y Van der Poel. Hoy había una pequeña diferencia: el último muro, el de Guern, estaba demasiado lejos de meta como para que un ataque pudiera acabar fructificando. Pero eso quién puede afirmarlo viendo lo que hemos visto hasta ahora y hablando de la Bretaña, que sorprende siempre con la estrechez del asfalto y un clima imprevisible.
RECOMENDADO
Van der Poel estrena bici a juego con su nuevo maillot amarillo
Van der Poel le rinde homenaje a su abuelo Poulidor con esta equipación
Pidcock aclara su objetivo en Tokio y sorprende con su deseo de competir en el RedBull Rampage
Las mejores bicis del Tour de Francia 2021
Favoritos para ganar el Tour de Francia 2021
¿Cuántos días debe descansar un ciclista a la semana?
Ese clima oceánico hizo aparición nada más empezar: requirió algo de abrigo y chubasqueros, pero sin excederse. Y eso que en cinco minutos ya había una primera fuga: Schelling respondía a los ataques para defender su maillot de la montaña, y se formaba un grupo con el del Bora, Wallays, Schar, Barthe y Chevalier. Todo esto, como decimos, en la primera etapa que invitaba al sprint. Dudas enormes de que los equipos con sprinters permitiesen cualquier desvarío.
Cuando la diferencia rozaba los dos minutos, apareció esa lluvia que anunciábamos y entre tanto jaleo, tanta bajada a los coches a coger chubasquero, los primeros despistes. Y las caídas, cómo no: en este caso, uno de los favoritos. Geraint Thomas tomó tierra cuando tan sólo se habían rodado unos 40 kilómetros. En las imágenes se le veía dolerse de la muñeca, pero retomó rápidamente el ritmo para reincorporarse al pelotón gracias a un trabajo de equipo brillante. Eso sí, nada más llegar, cambio de bici y vuelta al pelotón. No tuvo tanta suerte Gesink, del Jumbo, que tuvo que abandonar por esta misma caída.
A 100 kilómetros para meta, la distancia se mantenía en esos 2 minutos, cuatro escapados que iban a intentar la machada con todas las de perder.
Caídas, caos, nerviosismo y victoria de Merlier
La media rozó todo el tiempo los 45 kilómetros por hora. A esa velocidad, con tramos mojados y con un viento lateral, hay que extremar precauciones. Ejemplo de ello, el desliz entre Bennet y Dlamini, que se fueron al suelo por un despiste, aunque pudieron reemprender la marcha. Además, la carretera se ensucia, y aparecen los pinchazos. El más sonado fue el de Julian Alaphilippe, sin mayores consecuencias, aunque otros como Greipel también veían cómo se desinflaban sus neumáticos. Sin mayores incidencias que un cambio de bici y un apretón para adherirse de nuevo al pelotón.
Pero insistimos, el viento y el agua crispan a cualquiera. Se veía la tensión en el pelotón, que afrontaba además tramos de carretera muy virados, con cambios en el ancho incluso. Mientras tanto, dos equipos marcaron el ritmo y el control de la carrera. Sobre todo Deceuninck Quick Step, con Kasper Asgreen como cabeza motora; por parte del Education First, se veía el frontal de Stefan Bissegger, el único que quitaba minutos en cabeza de pelotón al equipo de Alaphilippe.
Pero la cuestión se estaba poniendo a tono para Cavendish, Sagan, Ewan y Pedersen. La encuesta del propio Tour le daba un favoritismo a Ewan y en redes ardía el nombre de Van der Poel, aunque obviamente no es un especialista al nivel de Ewan o Cavendish. Las estrecheces de la carretera no invitaban a más fugas, sino a un buen ritmo del pelotón para restar el minuto que les separaba de los escapados a 20 kilómetros de meta. En esa fuga se mantenían Wallays, Schär, Barthe y Chevalier.
Como decimos, como hasta el final todo es toro y así lo hemos visto estos dos días previos, la precaución y el nerviosismo eran los mayores enemigos. Pequeños toques, uno de ellos mandó a Alaphilippe al césped, pero mantuvo el equilibrio.
Era incluso difícil seguir al pelotón en la estrecha carretera boscosa de Pontivy, pero todo parecía más o menos controlado y la diferencia de los escapados iba mermando kilómetro a kilómetro. Mientras tanto, otras excursiones por el césped, entre ellas la de Miguel Ángel López, que cambió de bici con un compañero para intentar salvar la situación. Pero mala suerte para Roglic.
Se fue al suelo de manera estrepitosa y paró a todo su equipo. A partir de aquí, más nervios imposible: el Jumbo a tope para intentar recuperar la diferencia y Roglic enfadado y muy mascullado. Uno de los favoritos en el alambre. Perdía un minuto y veinte segundos, una barbaridad, así que continuaba la persecución.
A 7 kilómetros para meta, todo era un caos. El pelotón cazaba a la fuga y seguía con su ritmo de martillo; por detrás el Jumbo fajándose para salvar a su líder. Ya se sabe que a menudo, salvar un mal día supone salvar un Tour. Se trata de seguir cuando las cosas vienen mal a la espera de que vengan las maduras. Alcanzaron al grupo de Miguel Ángel López a cinco kilómetros, pero el pelotón iba a 72 por hora.
Y eso ocurrió: por delante otra tremenda caída y entre la catena, Tadej Pogacar. Arrancó muy muy rápido el esloveno y salvó la situación con la ayuda del equipo. Y más aún: en pleno sprint, Ewan al suelo y Sagan detrás. Sagan se levantó rápido, Ewan tardó un poco más, quizá por el peso de la culpa: quiso tomar el interior cuando no había hueco y arrastró hacia afuera a Sagan.
Etapa tremendamente accidentada, pérdida de tiempo por parte de los favoritos y un Alpecin al que le están saliendo las cosas a pedir de boca. Etapa para Tim Merlier y conserva el liderato con más ventaja aún para Mathieu Van der Poel, más líder con la pérdida de medio minuto de Pogacar y Thomas, y un minuto de Roglic, López y compañía. Mañana a recuperar y pasado a intentar reducir este minuto en la crono.
ETAPA 3
- Merlier, T. - Alpecin | 4:01:28
- Philipsen, J. - Alpecin | m.t.
- Bouhanni, N. - Arkéa Samsic | m.t.
GENERAL
- Van der Poel, M. - Alpecin | 12:58:53
- Alaphilippe, J. - Deceuninck Quick Step | +8
- Carapaz, R. - Ineos | +31"