Nueva Rondo RATT CF con geometría ajustable: carretera y gravel en la misma bici

La firma polaca Rondo aproxima el gravel y la carretera con su nueva RATT CF. Una bici de geometría ajustable con la que podemos tener una bici rápida sin renunciar a la comodidad de las cubiertas de 650b

Rondo RATT CF: una auténtica bici para todo

Cuando nos adentramos en el gravel a menudo tenemos que buscar un compromiso entre una vertiente más enfocada a la carretera, con ruedas de 700 y cubiertas de balón contenido o la alternativa más próxima a la bici de montaña en la que se equipan ruedas de 650b y gomas de grandes balones para adentrarnos en los caminos sin apenas limitación.

No obstante, la búsqueda de polivalencia de estas bicis supone topar con algunas limitaciones cuando toca rodar por el asfalto. La geometría de la mayoría de bicis gravel si bien resulta idónea para rodar por los caminos, nos proporciona una bici perezosa cuando salimos al asfalto. Una sensación que se multiplica si además utilizamos ruedas de 650b.

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En la firma polaca Rondo han decidido dar solución a esta limitación dotando a su nueva RATT CF de un sistema de ajuste de la geometría que permite cambiar radicalmente el comportamiento de la bici desde una auténtica máquina de carretera hasta una gravelera capaz de enfrentarse a cualquier camino.

El secreto lo encontramos en las punteras ajustables de su horquilla. Una solución que ya habíamos visto en otros fabricantes como Cervélo y su Áspero, o incluso en alguna bicicleta de carretera como la primera generación de Canyon Aeroad. Sin embargo, en estos modelos el ajuste se limitaba a modificar ligeramente el avance de la horquilla para dar mayor facilidad de giro a la dirección o lograr mayor estabilidad a alta velocidad.

En Rondo llevan el concepto mucho más allá con una disposición de las posiciones de ajuste en diagonal además de un mayor rango entre ambos extremos. De esta forma, además de modificar el offset de la horquilla en 10 milímetros también se varía el ángulo de dirección en 0,5º.

De esta forma, si elegimos la posición baja el ángulo de dirección efectivo es más tumbado y, al ser el avance de la horquilla menor el trail resultante de ambas medidas resulta mayor. Esto se traduce en un comportamiento mucho más estable que resulta ideal para lidiar con terrenos complicados. En la posición contraria conseguimos un ángulo de dirección más vertical a la vez que el mayor avance reduce el trail por lo que la dirección será mucho más ágil. En ambos casos, se trata de unas geometrías desarrolladas sobre ruedas de 650b.

Rondo ha plasmado este concepto en su RATT CF, una bici que la marca define como Allroad resaltando precisamente su comportamiento en carretera pese a las ruedas de 650b de gran balón que equipa de serie.

Podemos encontrarla en dos montajes: CF1 con Shimano GRX RX810 y ruedas elaboradas por Hunt para la marca por 4.499 €, y la CF2 que equipa Shimano GRX RX400 y unas ruedas y componentes más sencillos que se queda en 3.599 €. En ambos casos se elige una configuración de doble plato y unas cubiertas de tipo semislick Vittoria Terreno Zero que resaltan sus cualidades carreteras sin perder un rodar veloz cuando nos adentremos en los caminos.