Señales que indican que tienes que cambiar los neumáticos
Los neumáticos son una de las partes más importantes de la bici. De hecho, su estado está directamente relacionado con la seguridad, el rendimiento y el buen funcionamiento en general. Todo el mundo debería saber cúando tiene que cambiar sus cubiertas, pues un cambio de neumáticos a tiempo es clave para practicar el ciclismo de manera segura y óptima.
Cúando hay que cambiar los neumáticos: más allá de los números
Por lo general, la vida media de los neumáticos -ya sean de carretera o de MTB- es de 3.000 a 4.000 kilómetros. Pese a la importancia de este dato, el propio neumático nos dará algunas señales mucho más determinantes sobre cuándo tenemos que sustituirlos.
Por todo ello, el fabricante italiano Vittoria ha elaborado una guía con la que nos da las claves para saber reconocer los síntomas de un neumático desgastado.
Dime el uso que le das a tus neumáticos y te diré cuándo hay que cambiarlos
RECOMENDADO
Es imposible saber con exactitud los kilómetros que aguantarán nuestras cubiertas en buen estado. Y es que hay que tener en cuenta el tipo y la calidad del neumático, el peso del ciclista, el terreno por el que se circula, el mantenimiento y hasta el estilo de conducción, todos ellos factores que influirán mucho. Vayamos por partes.
Factores que determinan la durabilidad
En primer lugar, hay que hablar de la presión. Las presiones altas -más rendimiento y velocidad- son habituales en carretera, pero hacen que los neumáticos más vulnerables a los pinchazos ante baches u otros obstáculos de la calzada.
Por otro lado, las presiones más bajas -más tracción- suelen usarse en MTB. El manejo será más suave y se reducirá el riesgo de pinchazo. Aunque, como en todo, no hay que pasarse: una presión demasiado baja aumentará la posibilidad de pinchar y dificultará la conducción.
El estilo de conducción es otro de los factores que influyen en la vida de nuestras cubiertas. Cuanto más agresivo en las frenadas y en la forma de girar, y más derrapes y trucos se hagan, más ràpido se consumirán. Así que cuanto más suave y fluida se lleve la bici más se alargará el buen estado de los neumáticos.
Por supuesto, el terreno es un factor clave. En carretera, los neumáticos sufrirán más de la cuenta si encuentran más gravilla o irregularidades en el asfalto. En MTB, los caminos rocosos dañarán más las cubiertas de lo que lo hará un camino en donde predomine la tierra.
En estos casos, el desnivel suele ser un gran olvidado: terrenos con subidas y bajadas pueden desgastar más que los llanos.
Finalmente, otro factor importante es el mantenimiento. Tener los neumátcios a una buena presión o comprobar si tienen elementos punzantes también ayudará.
El momento de cambiarlos
Tan importante es conocer los factores que acortan la durabilidad de nuestras cubiertas, como saber cuándo hay que cambiarlas.
La primera señal que hay que atender es al indicador de desgaste de la banda de rodadura. Si bien no todos los neumáticos tienen, su uso está bastante extendido.
Las vibraciones son una clara alarma que puede indicar que el neumático ha dejado de funcionar correctamente. Por otro lado, un desgaste irregular de la banda de rodadura -zonas más desgastadas que otras- puede ser también un buen motivo para cambiarlos.
Además, cualquier grieta o burbuja indicará también que el neumático no está en buen estado.
En MTB, otro indicador serán los tacos. Habrá que sustituir las cubiertas cuando no se reconozca su dibujo original porque los tacos estén desgastados o incluso rotos.
Finalmente, otra señal que nos debe hacer reflexionar sobre la conveniencia de cambiar los neumáticos son los pinchazos constantes. Es importante comprobar que la superficie esté libre de agujeros, desgastes, objetos punzantes y de que el neumático está correctamente montado.