Strade Bianche 2022: horarios, dónde ver y favoritos
Es la carrera que más ha crecido en los últimos tiempos, de lejos. Ha conseguido colarse en el corazón de los fans gracias a su mezcla de hipnóticos paisajes, nubes de polvo, enorme dureza y... su ingrediente secreto, el sterrato.
La Strade Bianche 2022 es la gran clásica del sterrato, la que lo puso en el mapa del ciclismo de carretera.
Horarios y dónde ver la Strade Bianche 2022
Esta Strade Bianche 2022, que se presume tan trepidante como siempre y quizá más abierta que nunca (es el consuelo que nos queda ante las muchas ausencias) comenzará el sábado 5 de marzo a las 11.45 de la mañana, con unos 6 grados de temperatura en Siena. Y, según los organizadores, finalizará allí mismo entre las 16.00 y las 16.45 horas. Aquí puedes ver los horarios de paso por cada tramo, así como altimetría y planimetría.
Como ya hemos dicho antes, te recomendamos que te conectes, como tarde, a las 15.00, para disfrutar de los 50 últimos kilómetros. ¿Dónde? Pues podrás verlo en Eurosport (tanto en las distintas plataformas como en su servicio Eurosport Player), así como en el canal de suscripción por internet GCN+. No te pierdas nada porque, con la previsión meteorológica que hay, parece que nos espera otro espectáculo dantesco y a la vez precioso como el de la pasada París-Roubaix.
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Este sábado, 5 de marzo, la 16ª edición promete emociones tan fuertes como siempre, con dos ingredientes más si cabe: el barro y el frío. Aunque parece que finalmente no lloverá ese día, sí lo hará los anteriores, y las máximas serán de solo 8 grados si las predicciones están en lo cierto. Un pequeño 'infierno del Norte' en el sur de Europa que, además, estará marcado por importantes ausencias... así que será más impredecible si cabe. Aquí te damos todos los favoritos (desde Alaphilippe y Tom Pidcock hasta Alejandro Valverde, pasando por Pogacar) y el resto de las claves para que la disfrutes al máximo: recorrido, puntos determinantes, horarios y televisiones.
Strade Bianche 2022: así será el recorrido
Pocas sorpresas habrá en cuanto a la ruta, porque es la misma de los cuatro años anteriores. Es igual el kilometraje (184 km), idénticos los tramos de sterrato (hasta 11, con un total de 63 km) y tampoco hay cambios en el ya mítico muro final camino de la Piazza del Campo de Siena, con pendientes máximas del 16%. De manera que todos los grandes favoritos se conocen al dedillo tanto las subidas como los descensos en los que se puede atacar. Porque aquí, en Strade Bianche, son casi más importantes las bajadas, en las que los ciclistas más habilidosos sacan ventaja, que las zonas que pican hacia arriba. Más si cabe en las condiciones de barro que se encontrarán este 2022.
Debes estar atento sobre todo al octavo tramo de sterrato, de Monte Sante Marie, con 11,5 km de durísimos subibajas. Empieza a 54 km de meta (hacia las 15.00 horas), y es donde, en los últimos años, la carrera empezó a ponerse seria. Aunque tampoco hay que descartar que alguno de los favoritos quiera jugar a la épica y se líe la manta a la cabeza en el anterior, a 73 km de la línea de llegada. Después de Monte Sante Marie ya solo quedarán 3 tramos cortos, pero muy exigentes, además de la subida final a Siena.
Los favoritos... y las grandes ausencias
Lo que sí ha venido con sorpresas ha sido el anuncio de los participantes en esta Strade Bianche. Además de las 17 escuadras WorldTour y de Alpecin-Fenix y Arkea-Samsic, que como los 2 primeros de los ProTeam tienen derecho a estar, las 3 invitaciones han ido para los italianos: Bardiani-CSF-Faizanè, Drone Hopper-Androni Giocattoli y Eolo Kometa. ¿Lo extraño? No estará TotalEnergies, el equipo de Peter Sagan, que aquí ha sido dos veces segundo. Eso sí, aquello fue hace casi una década, y se presume que han sido ellos quienes han renunciado a la wild card. Al fin y al cabo, aunque al eslovaco se le da bien el sterrato, en una subida final tan explosiva siempre habrá alguien mejor. Así que ha preferido preparar otras carreras, como la Milán-Sanremo.
Pero habrá varias ausencias notables más. Por distintas razones, no estarán en la salida 3 de los 4 primeros clasificados de la pasada edición. Mathieu Van der Poel aun está reponiéndose de sus problemas físicos, Egan Bernal sigue convaleciente de su terrible accidente en enero y Wout Van Aert ha elegido la París-Niza para preparar a conciencia las clásicas de primavera. Tampoco tomará la salida Alexey Lutsenko, vencedor hace unos días en la nueva Clásica Jaen - Paraíso Interior (la 'Strade Bianche española'), y el año pasado en la Serenissima Gravel.
Así las cosas, y con la lista de participantes confirmados aun por publicarse, nos queda un gran tridente de favoritos: Tadej Pogacar, Julian Alaphilippe y Tom Pidcock. El esloveno viene de ganar las dos primeras etapas con final en alto que ha disputado en la temporada, además de la general del UAE Tour. Así que, aunque ha pasado el covid-19, está muy en forma y con hambre... y ya fue 7º en Siena el año pasado.
El francés no ha estado tan brillante como se esperaba de él en lo que va de temporada, pero ese muro final se adapta de maravilla a sus explosivas cualidades, y por eso ya triunfó en 2019 y quedó 2º, solo por detrás de un incontenible Van der Poel, en 2021. Además, siempre hay que tener en cuenta al campeón del Mundo. Lo mismo vale para el de Ciclocross, Pidcock, que no ha empezado con buen pie en carretera, pero que ya hizo 5º el año pasado en su debut, y que contará en su equipo con la experiencia de todo un Michal Kwiatkowski. Este será su primer gran objetivo del año y, si los corredores se encuentran mucho barro, eso podría beneficiarle.
Luego viene un nutrido pelotón de aspirantes. Tiesj Benoot (ganador en 2018), Jakob Fuglsang, Tim Wellens (segundo tras Lutsenko en Jaen, y ya recuperado de sus problemas de salud, según el Lotto-Soudal) o Davide Formolo saben lo que es hacer podio aquí, y volverán a intentarlo. Otros con posibilidades son escaladores como el colombiano Sergio Higuita, el español Pello Bilbao o los franceses Thibaut Pinot y Warren Barguil, o llegadores: Magnus Cort, Alberto Bettiol, Michael Matthews, Gianni Moscon, Greg Van Avermaet o, cómo no, el incombustible Alejandro Valverde. Extrañamente, esta carrera le falta en su palmarés, y no estaría mal que se desquitara en su última temporada.
Entre los 'tapados' que pueden hacerlo muy bien están hombres habilidosos como el esloveno Matej Mohoric (pues aquí puedes marcharte bajando). Y ojo especial a Alessandro Covi: el joven italiano del UAE Emirates acabó 2º en la etapa del sterrato del pasado Giro de Italia, y está arrasando en estos primeros compases de la temporada, con 2 victorias y varios puestos de honor. Él puede ser la segunda opción del equipo, tras Pogacar. También es buena apuesta Quinn Simmons, un sorprendente estadounidense de solo 20 años que ya ha dejado destellos de calidad y que liderará al Trek-Segafredo.
La edición 2021: territorio Van der Poel
Quizá recuerdes que el año pasado vimos sobre estas pistas de tierra blanca una de las mejores actuaciones del siempre brillante Mathieu Van der Poel. Primero, Alaphilippe y él reventaron la carrera a 50 km de meta, en Monte Sante Marie; luego, descerrajó un nuevo ataque a falta de 12, en el último tramo de sterrato, que solo pudieron seguir el campeón del mundo y Egan Bernal.
Y, en la rampa final, de Santa Caterina, hizo un impresionante despliegue de más de 1.300 vatios para llevarse la victoria. Por cierto, como ya te contamos en su momento, el holandés corrió con un manillar modificado, después de haber roto uno en la clásica anterior, Le Samyn.