Superagers: quiénes son y cómo la bici te puede convertir en uno de ellos

Hace unos días fallecía, a los 117 años de edad, la catalana María Brayas, reconocida como la persona más vieja del mundo. Su longevidad ha vuelto a traer a la palestra el tema de los factores que nos hacen tener una vida más larga y saludable, aspectos sobre los que se desarrollan diferentes investigaciones científicas y entre los que la bicicleta se postula como una excelente herramienta para convertinos en Superagers, o lo que es lo mismo gozar de salud durante muchos más años.

Cómo la bici te puede ayudar a vivir más años

El ser humano cada vez cuenta con una vida más longeva merced a las mejoras en las condiciones de vida. Sin embargo de poco sirve tener una vida larga si no se llega a una edad avanzada en condiciones físicas y mentales como para seguir disfrutando de la misma, un campo de estudio que atrae la atención de los científicos, sobre todo, analizando los condicionantes de las cada vez más personas que superan la centena de años y, sobre todo, de los pocos individuos que sobrepasan los 110.

Entre los patrones que han detectado en estas personas, destacan que la gran mayoría de ellos llegan a esa edad manteniendo buenas facultades físicas y psicológicas, lo que les ha llevado a acuñar el término superager que define a aquellos individuos de más de 80 años pero con capacidades cognitivas que se encuentran habitualmente en personas de 50 a 60 años.

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Obviamente, convertirse en un superager tiene un alto componente genético, de hecho, es habitual que la longevidad se comparta entre miembros de grupos familiares. Sin embargo, también se han observado en las investigaciones muchos factores ambientales que se repiten en individuos que logran llegar a avanzadas edades en plena forma.

Entre estos factores encontramos el llevar una alimentación saludable, tener una buena red social de amigos y familiares lo que les permite mantenerse activos, estimula y, en resumen les ayuda a disfrutar de la vida.

Y entre esos factores, uno no menos importante es que son personas activas físicamente, lugar donde la bici se puede convertir en una herramienta tremendamente útil. De hecho, además de la actividad física que supone, montar en bici sirve para mantener activa la psicomotricidad al requerir de equilibrio, agilidad y habilidad para su manejo.

Tampoco hay que desdeñar el factor social que implica el ciclismo, donde las grupetas se convierten en amigos con los que compartimos mil aventuras y que nos sirven de estímulo para superarnos cada día. De hecho, en casi todas las zonas habitualmente transitadas por los ciclistas es fácil encontrar grupetas de superabuelos cuyos integrantes superan en muchos casos los 80 años y que siguen siendo capaces de afrontar, a su ritmo, recorridos de más de 100 kilómetros incluso con puertos. Incluso, seguro que conocéis a alguno que con 60 o 70 años es capaz de pedalear al ritmo de los mejores de las grupetas en el llano y que hace falta una subida y ritmo exigentes para poder soltarles.

Un buen ejemplo, que llenó páginas en los periódicos hace unos años fue el del ciclista francés Robert Marchand, que falleció en 2021 a los 109 años de edad y que, con 105 años, logró establecer un récord de la hora en velódromo tras recorrer 22,547 km y para el que la UCI tuvo que crear una categoría específica ya que nadie de tal edad había intentado nuca afrontar ese récord a una edad tan avanzada. Y hablando de ciclistas de avanzada edad no podemos dejar de mencionar a Federico Martín Bahamontes quien falleció en 2023 cuando contaba con 95 años y quien se mantuvo con excelentes capacidades cognitivas toda su vida, convirtiéndose en genio y figura cuando comenzaba a relatar sus andanzas como ciclista profesional en los años 40.