La UCI ofrece recompensas monetarias por información sobre dopaje tecnológico
La Unión Ciclista Internacional sigue obsesionada con buscar motores ocultos en las bicicletas. No contenta con la multitud de controles que constantemente realizan en las carreras, el nuevo jefe de la lucha contra el fraude tecnológico lanza un programa de recompensas para quién proporcione información valiosa para detectar el este tipo de ‘dopaje’.
El jefe de la lucha contra el fraude tecnológico de la UCI presenta nuevas medidas para combatirlo
Desde hace años se habla de motores ocultos en las bicicletas pero, pese a todo el empeño que la UCI ha puesto en detectar o que se conoce como Fraude Tecnológico únicamente se conoce el caso de la ciclocrosista Femke van den Driessche a la que se le encontró un motor en su bici durante los mundiales de la especialidad en el año 2016.
En este empeño, la UCI nombró en el mes de abril al investigador criminalista Nicholas Raudenski quien desde primeros de mayo se ha centrado en dar un nuevo impulso a la lucha contra el fraude tecnológico. Entre las medidas que Raudesnski ha impulsado se encuentra ahora el lanzamiento de un programa de recompensas con el objetivo de animar a personas que tengan información sobre el dopaje tecnológico a compartirla de forma confidencial con la UCI a cambio de una recompensa. Una recompensa que no sólo serán económicas sino que también pueden consistir en apoyo material o asistencia financiera.
RECOMENDADO

Eddy Merckx recula tras decir que Pogacar ya estaba por encima de él

Errores que cometes al ajustar tu bici

¿Cuánto tiempo separa a un ciclista profesional de un aficionado en competición?

Rodar con un plato de 68t es cuestión de matemáticas

¿Cuándo caducan los cascos de ciclismo?

Orbea Oiz 2025: modelos (Flight Attendant incluido) y precios actualizados
Esta medida llega en un momento donde la lucha contra el fraude tecnológico de la UCI pasa por momentos bajos, habiendo sido criticado el máximo organismo del ciclismo por no realizar controles de las bicis mediante rayos X en pruebas del nivel como Giro de Italia 2023 o incluso de algunas etapas del Tour de Francia así como en muchas carreras femeninas lo que significaría que el sistema establecido deja muchos huecos en los que podrían colarse los tramposos.